Sucedió en Brasil, en el funeral de un niño de tan sólo dos años de edad. El infante yacía en un ataúd en el proceso denominado velorio, antes de ser sepultado, cuando despertó y alarmó a todos los dolientes presentes.
Se levantó, bebió agua y volvió a su ataúd
Su nombre era Kelvin Santos, quien falleció en junio de 2012 y era, porque al momento en que despertó pidió un poco de agua, la bebió y volvió a acostarse en el cajón mortuorio, pero para nunca más volverse a levantar con ese cuerpo.
El suceso marcó para siempre la vida de los asistentes a las exequias, especialmente sus familiares. Pero este no es el único caso que se ha reportado, pues en Colombia, México, Perú y otros lugares del mundo, han registrado casos iguales y similares. La ciencia oficial no se explica cómo pueden volver, luego de ser dictaminados como difuntos y han permanecido muertos durante horas, incluso días.
El caso se ha dado en varias partes del mundo
La causa del deceso del niño fue una neumonía. Fue llevado en un estado crítico al hospital, pero fue demasiado tarde. Habían trascurrido varias horas después de haber sido decretado como fallecido y hasta arreglado por la empresa funeraria, cuando sorprendió a todos con semejante fenómeno paranormal. Tan pronto se levantó del féretro, se acercó a su papá y le dijo: “papá, ¿me das un poco de agua?”
Curiosamente, los niños difuntos que horas después de partir de este mundo y regresan por unos instantes, siempre piden un vaso de agua. Algo que tampoco se ha podido explicar de ninguna manera objetiva.
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