Relatos de África
Para nadie es un secreto que África (o bueno, al menos varios sectores del continente) se caracteriza por una población particularmente rural, particularmente pobre y particularmente tradicional. Por esta razón, de allí nos llegan relatos que parecen salir de un mundo ya perdido.
Hace algún tiempo hablamos del duende que se apareció en una comisaría de Zimbabue. De acuerdo con los oficiales, el ser habría saltado del contenedor de un hechicero, haciendo que todos huyeran despavoridos del lugar.
Este caso tiene algo de semejanza con aquel. Se refiere a la supuesta conversión en Nigeria de un niño… en una papa.
La conversión
El suceso ocurrió hacia mediados de marzo del año 2000. De acuerdo con varias agencias de noticias, un grupo de jóvenes de la Escuela Primaria Evangelista de la ciudad de Maiduguri (hacia el norte de Nigeria) dijeron a su profesor que uno de sus compañeros había recibido el dulce de un desconocido… y se había convertido en una papa.
Pero no solo esto: incluso tenían la papa. El tubérculo, de tamaño inusual, eso sí, quedó bajo custodia de la policía una vez le explicaron la situación. El asunto pronto se popularizó y decenas de personas fueron a la comisaría a ver la papa… y comenzaron a perseguir al hombre que le había dado el dulce.
Lamentablemente, no sabemos qué pasó después. Sea lo que fuese, no alcanzó los medios internacionales, por lo que no tenemos manera de seguir la noticia. Quizás encontraron un chivo expiatorio. O quizás encontraron al hombre y devolvió al niño a su forma natural.
En cualquier caso, esta pintoresca noticia sirve para resaltar el papel de la tradición y la magia en grandes poblaciones en el mundo y para preguntarnos qué tan cierto es todo lo que sabemos. Al fin y al cabo, vivimos en el mismo mundo en el que un niño es convertido, mediante magia, en una papa.
Fuente de imagen: foodsubs.com