Joaquín Archivaldo Guzmán Loera, mejor conocido como el Chapo Guzmán, nació en Sinaloa, México, en el año de 1957. Hacia la edad de 15 años comenzó a cultivar y vender marihuana, y de aquella época obtendría el apodo de El Chapo, debido a su baja estatura.
Para la década de los 80 trabajaría con Félix Gallardo, alias El padrino, y quien para entonces era el principal narcotraficante de México. Hacia la década de los 90 El Chapo ya era uno de los principales narcos, y en 2001 ya era el segundo hombre más buscado el mundo, luego de Osama Bin Laden y, tras la muerte de éste, pasó a ser el primero.
En 1993 fue apresado, pero logró escapar 8 años después de la prisión de máximo seguridad de Puente Grande. 13 años después, en 2014 volvió a ser capturado, pero tan sólo un año después logro burlar de nuevo la cárcel.
Gracias a esto El chapo también se ha ganado el título del eterno fugitivo, pero hay quienes ven en esto un pacto maligno que lo protege. De hecho, hay quienes aseguran que el Chapo es un ferviente devoto de la Santa Muerte, y que también practica la santería, además de haber realizado sacrificios no sólo animales, sino humanos para obtener fortuna y protección. Se especula que en 2004, y precedido por sacerdotes satánicos, habría participado en un ritual en honor a Satanás haciendo pacto con él.
Algunos cartománticos son del mismo parecer y hasta aseguraron, luego de su fuga de la cárcel de Almoloya en 2015, que no lo veían de nuevo pisando una cárcel. Verdad o mentira, lo cierto es que El Chapo se ha ganado su nombre a pulso, opacando inclusive a nombres míticos como Pablo Escobar o al mismo Amado Carrillo Fuentes, el señor de los cielos. Tras su fuga en 2015 El Chapo se ha convertido en leyenda.