Los viajes del ser humano fuera del planeta, siempre han sido todo un misterio y algo de lo más interesante para los amantes de la ciencia. Todo habría comenzado el siglo pasado con Yuri Gagarín, un astronauta de origen ruso: “el primer hombre en viajar al espacio exterior”. Sin duda alguna, marcó la historia con sus huellas, pero su vida terminó de una mera muy extraña. Por lo general, se enseña erradamente que los primeros en llegar a la luna fueron los estadounidenses, cuando se tienen todas las pruebas de que el primero en hacerlo fue Gagarín, enviado por la Unión Soviética. Ésta es su historia:
Una fama histórica pero ilusoria
Yuri Alekséyevich Gagarín nació el 9 de marzo de 1934, en Novosyolovo y falleció el 27 de marzo de 1968 de un modo que todavía sigue siendo todo un enigma. Era un militar de los mejores entrenados por los soviéticos, especializado en asuntos aeroespaciales. Por eso fue seleccionado para que el martes 12 de abril del 61, abordara la nave Vostok 1, rumbo al espacio.
Gagarín relata que apenas divisó el planeta completo, experimentó una sensación indescriptible, en la que deseaba intensamente que este mundo no fuera destruido y la belleza de la naturaleza prosiguiera para siempre. Obviamente, que ante estos sucesos, la humanidad cambió su modo de ver la existencia y Rusia habría logrado lo que los estadounidenses presuntamente, todavía no alcanzaban. Los resultados astronómicos de la URSS superaban grandemente a los occidentales; por ejemplo, fueron también quienes lanzaron el primer satélite fuera de la atmósfera terrestre, el cual se denominó “el Sputnik”. Así mismo, para observar diversos detalles de los viajes espaciales, se les ocurrió poner a bordo de una nave a un perro. Actualmente, continúa liderando todo lo concerniente de tecnología satelital.
Después de sus aventuras bien logradas a cientos de miles de kilómetros del piso, parecía que levitaba, pero esta vez no por efectos de la gravedad, sino del ego, pues la fama que adquirió era exagerada y eso lo condujo al desequilibrio de los extremos. Primero tenía un feliz matrimonio, pero gracias a sus hazañas tenía luego varias mujeres y se volvió alcohólico.
Cuentan algunas anécdotas de sus biografías, que cierta vez su esposa lo sorprendió en la casa, desnudo con otra mujer. Del susto de la sorpresa y a modo de reacción, sumado al alto grado de embriaguez en el que se hallaba, Gagarín saltó por la ventana y se golpeó fuertemente la cabeza, al punto en que se perforó el cráneo. Esa ocasión contó con suerte y su vida se salvó.
Fue tan sólo un momento ilusorio en su vida, porque por su comportamiento y por todo lo que este hombre llegó a ver y a saber, el gobierno determinó que jamás volvería a subir a una nave espacial y aunque se entrenó para ir en la misión de la nave Roscosmos, le fue terminantemente prohibido regresar al espacio. Luego ante los medios de comunicación, el gobierno soviético declaró que la razón de ello, era porque no pensaban volver a arriesgar a semejante héroe nacional.
Una polémica sin fin
En unas circunstancias bastante raras, como lo consideran los analistas, durante una rutina aérea, Yuri resultó estrellándose en la parte norte de Moscú, en un caza MiG-15. Bueno, esa fue la versión que ofreció el gobierno de Rusia, pero para la gran mayoría que vio las condiciones del siniestro y todo lo que bordeaba la muerte del astronauta, esas explicaciones no satisfacen la lógica y la razón de los hechos. La controversia llegó al punto en el que se afirmó que Gagarín fue víctima de un complot de la KGB y que se encontraba en un terrible estado de alicoramiento mientras piloteaba.
Cuando se conmemoró el aniversario 50 del viaje del primer hombre al espacio, en una conferencia de presa se leyó un presunto documento clasificado, mismo en el que las autoridades rusas detallan todo lo relacionado con las investigaciones sobre el siniestro de Yuri, que a la letra dicen: “según los análisis de las circunstancias del accidente aéreo y los elementos de la investigación, la causa más probable de la catástrofe es una maniobra brusca del piloto, para evitar una sonda atmosférica o, tal vez, para evitar ingresar a una capa de nubes. La maniobra brusca causó el ingreso del aparato en una situación crítica de vuelo y su caída en condiciones meteorológicas difíciles”.
Pero la polémica continuó, porque a casi nadie le pareció que eso fuera un verdadero documento clasificado sobre el caso del astronauta. Igor Kuznetsov, un ex coronel de la fuerza aérea de la URSS, manifestó que llevaba nueve años investigando el caso y concluyó que la causa de la muerte fue una imprudencia que habría cometido el piloto a 10 mil pies de altura, al no haber cerrado correcta y herméticamente la cabina y por ello, decidió descender en picada hasta llegar a una altitud pertinente, pero su maniobra fue exagerada y por ello perdió el control de la aeronave.
Verdad o no, este hombre llegó a cumplir el sueño que muchos anhelarían: salir en carne propia al espacio exterior y ver el mundo desde allí.
Imágenes: wikipedia.org (2)