Características de los textos expositivos

Así mismo, los lingüistas se han dado a la tarea de enumerar algunos de los principales rasgos de este tipo de discurso, encontrándose entre estos los siguientes:

• Busca transmitir una información.
• Tiene como objetivo ampliar los conocimientos del interlocutor sobre el tema que aborda.
• Se basa prácticamente en la Función Referencial del Lenguaje, puesto que los objetos sobre los que basa su información pertenecen al contexto de los hablantes.
• Tiende a darse en contextos formales, aun cuando puede darse en ocasiones también en registros informales.
• El texto expositivo debe ser conciso.
• Durante su realización, el hablante debe suspender sus juicios u opiniones, y limitarse a dar cuenta de los distintos elementos y características objetivas que tiene el elemento a describir.
• Es el registro por excelencia de los textos académicos, aun cuando puede llegar a ocupar otros textos formales, como las Leyes, edictos, reportajes, entre otros.
• Constituye una comunicación asimétrica, en donde uno de los hablantes sabe más que el otro, al tiempo en que el hablante que expone la explicación domina el discurso, mientras que el otro involucrado asume un rol mucho más receptivo.

Estructura general

Con respecto a la forma en la que el hablante –bien si se trata de un texto escrito o un texto oral- debe estructurar su discurso, la Lingüística también ha indicado la forma en la cual por lo general se organiza el Texto Expositivo, a fin de transmitir al interlocutor de forma adecuada los conocimientos que desea comunicar. De esta forma, la estructura del Discurso Expositivo estaría conformada básicamente por tres partes, las cuales se explican a continuación:

Introducción

Considerada la primera etapa del Texto Expositivo, tiene la misión de albergar la presentación que hace el hablante sobre el tema que abordará en el texto. Así mismo, durante este primer momento del discurso, el hablante debe explicar también la trascendencia con la que cuenta el objeto o entidad que se abordará, durante el texto.

Desarrollo

Un poco más extenso que la primera parte, el Desarrollo constituye la parte central del texto expositivo, y el lugar del discurso en el cual se realiza la explicación. De esta forma, es en el Desarrollo donde el hablante se da a la tarea de transmitir a su interlocutor de forma concisa y objetiva la información sobre un objeto determinado.

Conclusión

Conocida también como Epílogo, esta parte final del Discurso Expositivo está destinada a albergar un resumen de las principales ideas que se han desarrollado durante la explicación principal, a fin de que sea la última información que perciba el interlocutor.

Tipos de textos expositivos

Así mismo, disciplinas como Análisis del Discurso, señalan básicamente dos tipos o clases de Textos Expositivos, cuyo principal criterio de discriminación es la exigencia que se le hace al interlocutor. De esta forma, las distintas clases de Textos Expositivos son los siguientes:

Divulgativos

Son aquellos textos que ofrecen al interlocutor o lector una explicación, objetiva y precisa, la cual puede ser entendida por éste, aun cuando no tenga conocimientos ni información anterior al tema sobre el cual se desarrolla el Texto Expositivo. Dentro de los ejemplos que pueden encontrarse sobre este tipo de textos, resaltan los libros de textos, ensayos, conferencias, exposiciones, disertaciones, entre otros.

Especializados

Por otro lado, dentro de los Textos Expositivos también puede distinguirse aquellos discursos que exigen un poco más al interlocutor, el cual debe conocer previamente el tema, que se tratará durante la exposición, a fin de que pueda entender las explicaciones que desarrollará el autor o hablante. Entre este tipo de textos resaltan textos como artículos académicos, leyes, decretos, Informes, entre otro.

Imagen: pixabay.com