La Historia del Arte define como Surrealismo a un movimiento artístico, perteneciente a las vanguardias del siglo XX, el cual surge en Francia, en 1920, alrededor de la figura del poeta André Bretón, y que se manifestó de forma amplia en disciplinas como la Pintura y la Literatura.
Origen del término Surrealismo
De acuerdo a lo que han indicado los historiadores con respecto a esta vanguardia artística, el término Surrealista aparece por primera vez en mayo de 1917, cuando Guillaume Apollinaire lo usara en la redacción de un programa de mano, que este poeta escribió para el musical Parade, en donde puede leerse textualmente, en referencia a la obra escénica en sí:
“una alianza entre la pintura y la danza, entre las artes plásticas y las miméticas, que es el heraldo de un arte más amplio aún por venir. (…) Esta nueva alianza (…) ha dado lugar, en Parade a una especie de surrealismo, que consideró el punto de partida para toda una serie de manifestaciones del Espíritu Nuevo que se está haciendo sentir hoy y que sin duda atraerá a nuestras mejores mentes. Podemos esperar que provoque cambios profundos en nuestras artes y costumbres a través de la alegría universal, pues es sencillamente natural, después de todo, que estas lleven el mismo paso que el progreso científico e industrial”.
Así mismo, un mes después, durante junio de 1917, la Historia vuelve a encontrar el uso de la palabra “surrealismo”, de parte del poeta Apollinaire, quien esta vez lo incluye dentro del subtítulo de la obra de teatro Las tetas de Tiresias, drama surrealista. De igual forma, Apollinaire incluye el término en el prefacio de la obra, usando el término nuevamente como un adjetivo calificativo de la pieza escénica.
Predecesor del surrealismo
Por otro lado, en referencia a los precedentes artísticos de esta vanguardia, la Historia del Arte ha señalado siempre al Dadaísmo, movimiento artístico del cual se cree que evoluciona el Surrealismo. Así mismo, en cuanto a aquellos intelectuales y artistas que han sido relacionados como antecedentes directos de este movimiento artístico resaltan especialmente los siguientes: Charles Fourier y el Marqués de Sade (Literatura), Heráclito (Filosofía), Hieronymus Bosch “el Bosco” (Pintura) entre otros personajes, que a pesar de no ser inmediatamente anteriores al surgimiento de este movimiento del siglo XX, son reconocidos por sus seguidores como aquellas fuentes desde las cuales se retoman los preceptos sobre la realidad, la estética y el Arte.
En qué consiste el Surrealismo
Responder a esta pregunta, básicamente obliga a volver sobre las características y rasgos más importantes de este movimiento artístico, así sobre su propia concepción de Arte, independientemente de la disciplina o formato por medio del cual se expresara. En este sentido, se pueden señalar entonces como los principales rasgos del surrealismo los siguientes:
Objetivos filosóficos
Una de las motivaciones más importantes del Surrealismo es aquella que insta al artista a emprender sus propios caminos, que lo lleven a descubrir una realidad alterna, la cual no sea el resultado de una secuencia lógica de pensamiento, sino retazos de evocaciones o visiones, sin que se deba tampoco someter la expresión de este pensamiento libre de algún modo razonable. En este sentido, el objetivo primordial del surrealismo se convierte en obtener respuestas a las inquietudes emocionales que puede sufrir el artista, siendo concebida la imaginación como la única fuente de respuesta, la cual a su vez es vista como la máxima musa de todo artista.
Características estéticas
Así mismo, en cuanto al tratamiento de los temas en el surrealismo surgen algunas señales y rasgos específicos, que viene bien describir como parte de las principales características de esta vanguardia:
- Puede ser considerado como un Arte con gran contenido erótico, donde es el pudor lo que es visto con desagrado, siendo tildado incluso de vulgar.
- Es un Arte, que tanto en la Literatura como en la Pintura, pero en especial en el Teatro, hace alarde y gran uso del Humor negro, dirigiéndolo básicamente hacia aquellas personas o símbolos del poder, hecho que lo cataloga también como un arte con intenciones subversivas.
- Existe una corriente surrealista que apuesta por el arte figurativa, tratando de introducir el rasgo imaginativo o surreal a través de la exageración de las líneas y curvas, acompañadas de un uso moderado del color.
- No obstante, también existe un surrealismo abstracto, el cual busca desesperadamente lograr la espontaneidad, a través del cultivo de la libertad, el sin sentido y el uso de colores brillantes y primarios.
- Así mismo, en esa ardua búsqueda de la interrelación de ideas dispares, como ocurre en el mundo onírico, estética que el surrealismo trata de emular, se generó a su vez la creación de collages, como un intento de poder representar la gran cantidad de imágenes que podía aglutinar una sola sociedad.
- Finalmente, en cuanto a lo estético, se podría decir que el Surrealismo perseguía instaurar lo extraño, lo diferente o aquello descolocado de su función y lugar de origen, como Bello, buscando precisamente cambiar para siempre la concepción universal de la Belleza, a través de un arte que planteaba un nuevo lenguaje.
Objetivos políticos
Dentro de sus preceptos políticos, el Surrealismo se erigía también como un Arte revolucionario, que más allá de desconocer y burlarse de los centros del poder, instaba a la gente a no creer en conceptos preestablecidos, sino que los estimulaba para que buscaran dentro de sí sus propias respuestas, teniendo a la imaginación como fuente constante de ellas.
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