Tal vez uno de los empresarios y creadores más importantes y conocidos de las últimas décadas del siglo XX y las primeras del siglo XXI sea Steven Paul Jobs, mejor conocido como Steve Jobs, hombre que desde 1976 se convirtió en uno de los desarrolladores de computadoras y software más exitosos de todas las épocas, firmados con su sello de renombre mundial: Apple
Relevancia de Steve Jobs
De esta forma, aun cuando Apple Inc. nació en el garaje de su casa, junto a sus colaboradores Ron Wayne y Steve Wozniak, en poco tiempo llegó a convertirse en un verdadero emporio informático, del cual Steve Jobs fue el presidente ejecutivo hasta el final de sus días, convirtiéndose en ejemplo de gestión empresarial en el mundo, debido no sólo a su logro corporativo en sí mismo, sino por las políticas aplicadas dentro de su empresa, y su filosofía para los negocios, más allá de la calidad, diseño e innovación de los dispositivos creados por esta compañía.
Frases célebres de Steve Jobs
Así, el mundo de los negocios manifiesta especial interés por estudiar las movidas, estrategias, visiones y pensamientos de este genio de las empresas, quien llevó una compañía de garaje a ser la más importante empresa informática del mundo, con sedes en numerosos países y millones de ventas en dólares. En este sentido, cobran especial importancia algunas de las frases pronunciadas por este magnate de los negocios sobre la visión que tenía sobre este mundo, a fin de poder entender cómo percibía algunos aspectos. A continuación, entonces, algunas de las frases más resaltantes de Steve Jobs.
El amor al trabajo “Tu trabajo va a llenar gran parte de tu vida, y la única forma de estar realmente satisfecho con él es hacer lo que creas que es un gran trabajo. Y la única manera de hacer un trabajo genial es amar lo que haces. Si no lo has encontrado, sigue buscando. No te detengas. Al igual que con todos los asuntos del corazón, lo sabrás cuando lo encuentres. Y, como cualquier gran relación, sólo se pondrá mejor y mejor, conforme los años pasen. Así que sigue buscando hasta que lo encuentres. No te detengas.”
“Tu trabajo va a llenar gran parte de tu vida, y la única forma de estar realmente satisfecho con él es hacer lo que creas que es un gran trabajo. Y la única manera de hacer un trabajo genial es amar lo que haces. Si no lo has encontrado, sigue buscando. No te detengas. Al igual que con todos los asuntos del corazón, lo sabrás cuando lo encuentres. Y, como cualquier gran relación, sólo se pondrá mejor y mejor, conforme los años pasen. Así que sigue buscando hasta que lo encuentres. No te detengas.”
Este pensamiento de Steve Jobs revela en gran parte la filosofía que tenía este empresario en relación con su trabajo, al cual evidentemente veía como el gran amor de su vida. Bajo esa perspectiva se podría decir que la mejor manera de pasar ocho o muchas más horas inserto en una actividad, despertarse temprano, acostarse tarde, entre muchas otros concesiones, que sólo puede ser entendidas a través del lente del amor, para no verlas como sacrificios insuperables. De esta forma, este gran empresario le transmitió al mundo la importancia de amar el trabajo, así como la necesidad de no quedarse anclado en una actividad que no se hiciera por amor, sino por el contrario buscar incansablemente aquella actividad que se amara, a fin de vivir felices.
La pasión de los trabajadores Cuando contrato a alguien realmente con mucha experiencia a las espaldas, ser competente es lo más importante. Tienen que ser realmente inteligentes. Pero el verdadero problema para mí es: ¿van a enamorarse de Apple? Porque si sucede, todo lo demás pasará solo. Ellos tendrán que hacer lo mejor para Apple, no lo que es lo mejor para ellos mismos, ni lo mejor para Steve Jobs, o lo mejor para cualquier otra persona.
Cuando contrato a alguien realmente con mucha experiencia a las espaldas, ser competente es lo más importante. Tienen que ser realmente inteligentes. Pero el verdadero problema para mí es: ¿van a enamorarse de Apple? Porque si sucede, todo lo demás pasará solo. Ellos tendrán que hacer lo mejor para Apple, no lo que es lo mejor para ellos mismos, ni lo mejor para Steve Jobs, o lo mejor para cualquier otra persona.
Así mismo, esta visión sobre el amor que se debe tener en el trabajo, Steve Jobs la proyectaba en la relación que sus empleados establecían con Apple, ya que para este empresario, el empleado ideal no sólo debía ser inteligente y uno de los mejores en su área, sino que debía ser capaz de desarrollar un profundo amor por la compañía, a fin de que pudiera hacer lo mejor por ella. De esta forma, Steve Jobs buscaba trabajadores que sintieran amor y pasión por Apple, pues sería la única forma de crear compromiso. En este sentido, este pensamiento resulta útil no sólo para el empleado que pueda preguntarse si en verdad está enamorado de la empresa para la que trabaja, sino también para el Gerente y administrador, a fin de evaluar si en su personal cuenta con empleados que sientan esto.
El liderazgo del empresario Cuando llega una buena idea, ya sabes, parte de mi trabajo es contarlo, ver lo que diferentes personas piensan, conseguir que la gente también hable de ello, discutir sobre ello, conseguir ideas moviéndome entre un grupo de 100 personas. Tener diferentes personas para explorar diferentes aspectos y ya sabes, explorar.
Cuando llega una buena idea, ya sabes, parte de mi trabajo es contarlo, ver lo que diferentes personas piensan, conseguir que la gente también hable de ello, discutir sobre ello, conseguir ideas moviéndome entre un grupo de 100 personas. Tener diferentes personas para explorar diferentes aspectos y ya sabes, explorar.
Esta frase parece revelar muchísimo de la concepción de liderazgo que tenía este gran empresario de la informática. De esta manera se puede inferir que Steve Jobs estaba totalmente consciente de que la tarea de un líder para nada puede ser la de imponer ideas y hacer que otros lo sigan, sino que por el contrario un buen líder inspira en otros las ideas y los procesos creativos. Al menos esto es lo que parece dejarse ver en este pensamiento en donde Jobs cuenta cómo una buena idea era conformada por al menos cien personas que trabajaban en conjunto para su concepción y cómo él dirigía el proceso, sabiendo escuchar, explorando y permitiendo que los otros se expresaran, crearan y aportaran, sabiendo llevar a cabo y a la perfección un proceso creativo colectivo.
Empresas y sucesiones Algunas personas dicen, “Oh, Dios, si [Jobs es atropellado por un autobús, Apple estaría en problemas”. Definitivamente no organizarán una fiesta, pero sí creo que hay personas muy capaces dentro de la empresa. Mi trabajo es hacer a todo el equipo ejecutivo lo suficientemente bueno como para que sean mis sucesores.
Algunas personas dicen, “Oh, Dios, si [Jobs es atropellado por un autobús, Apple estaría en problemas”. Definitivamente no organizarán una fiesta, pero sí creo que hay personas muy capaces dentro de la empresa. Mi trabajo es hacer a todo el equipo ejecutivo lo suficientemente bueno como para que sean mis sucesores.
Igualmente, esta frase casi profética sobre su propio fin es materia de observación también desde el punto de vista del liderazgo, puesto que un líder aun cuando es importante, debe hacer tan bien su trabajo que no resulte indispensable o insustituible, sino por el contrario asegurando la continuidad del proceso más allá de su ausencia o propio fin. Al parecer Steve Jobs entendió desde el principio este concepto, formando una empresa sólida, con el mejor personal calificado, enamorado de su empresa y con la conciencia de seguir y sacarla adelante, así Steve Jobs no estuviese.
El enfoque del empresario La gente piensa que enfocarse significa decir sí a aquello en lo que te enfocas, pero no es así. Significa decir no a otras cientos de ideas buenas que hay.
La gente piensa que enfocarse significa decir sí a aquello en lo que te enfocas, pero no es así. Significa decir no a otras cientos de ideas buenas que hay.
Así mismo, este pensamiento del magnate de Apple revela un ingrediente importantísimo en el éxito de una gestión y en la carrera de un empresario exitoso: el enfoque, el cual además tiene que ver con la capacidad de decisión y de concentración. No obstante, Jobs indica que lo más importante no es saber lo que se quiere y decirle sí, sino ser consciente de la necesidad de olvidar, descartar y decir no a las cientos de posibilidades que pueden distraer a un buen empresario del éxito de su gestión o de la obtención de su meta.
Afrontar los errores A veces cuando se innova, se cometen errores. Es mejor admitirlo rápidamente y continuar con otras innovaciones.
A veces cuando se innova, se cometen errores. Es mejor admitirlo rápidamente y continuar con otras innovaciones.
Finalmente, esta frase sirve para recordar que por muy exitoso que sea un empresario como ser humano no está exento de cometer errores. No obstante, la excelencia del hombre de negocios se mide en la capacidad que éste tiene para reconocer, afrontar y superar de forma rápida los errores, a fin de pasar la página y seguir el camino de las innovaciones. En este sentido, este pensamiento también constituye una gran lección sobre liderazgo por parte de Steve Jobs, puesto que estaría planteando que un buen líder no es aquel que no se equivoca, lo cual es imposible, a lo sumo podría ser un líder que no reconoce sus errores, mientras que el líder ideal sería aquel con la capacidad de aceptar que se ha equivocado, a fin de decidir un nuevo rumbo.
Imagen: revistaitnow.com