Sin embargo, no todos los intelectuales alaban el consenso como el lugar ideal de una comunidad, de ahí que haya quienes lo alaban y propician, así como fuertes detractores, que básicamente creen que la necesidad de consenso anula en cierta medida el libre pensamiento del individuo. De ahí, que este tema haya generado polémica en el seno del pensamiento occidental.

En este sentido, quizás la forma más práctica de ver los dos caminos o posiciones que pueden existir en cuanto al consenso sea revisar algunas de las más célebres frases que respecto a él, a favor o en contra, pueden rastrearse en la historia de Occidente. No obstante, antes de abordar estos pensamientos, se revisará el propio concepto de Consenso.

Definición de consenso

Sin embargo, siendo un tema con tantas aristas y percepciones, cuenta entonces con varias definiciones, promulgadas desde las distintas corrientes que lo han estudiado. Por ende, una forma objetiva de aproximarse a la definición de este sustantivo puede ser tomar en consideración el concepto que maneja sobre él la Real Academia Española de la Lengua (RAE), institución que le da una entrada en su Diccionario, texto este en donde se puede leer la siguiente definición:

Acuerdo producido por consentimiento entre todos los miembros de un grupo o entre varios grupos.

De forma neutra, la RAE señala entonces que se puede asumir como Consenso el acuerdo al que llegan los miembros de un grupo, y que se toma como base para la toma de decisiones. No obstante, este concepto no da claridad sobre si el consenso debe involucrar a cada uno de los distintos miembros del grupo en cuestión, o si por el contrario se toma en cuenta solo la voluntad de la mayoría para tomar decisiones, aun cuando exista una minoría en desacuerdo, así como tampoco indica cómo influiría esto a futuro en la decisión tomada por los miembros que llegaron a consenso.

Frases de consenso

Quizás entonces por esta serie de dudas y matices que pueden presentar las acciones que se decidan en cuanto al consenso obtenido, es que son varios los pensadores que han centrado su atención sobre este tema. A continuación, algunas de las frases que han pronunciado al respecto:

Sigmund Freud (1856 – 1939)

Si dos individuos están siempre de acuerdo en todo, puedo asegurar que uno de los dos piensa por ambos.

Se dice siempre que cada persona es un mundo, lo cual implica entonces que cada persona tenga su propia forma de asumir, entender, interpretar y decidir sobre los elementos de la realidad. En este sentido, si a esta persona se le suma otra, pues entonces habrá momentos en donde los pareceres individuales coincidan, y otros en donde no, lo cual es propio de la condición humana.

Por ende, tal como lo señalada en su momento Sigmund Freud no es natural que dos personas coincidan todo el tiempo, puesto que de ser así, significa que uno de ellos piensa por ambos, y no que los dos están haciendo uso de su libre albedrío.

Oscar Wilde (1854 – 1900)

Cuando la gente está de acuerdo conmigo siempre siento que debo estar equivocado.

Así mismo, los pensadores e intelectuales han señalado que siendo totalmente natural el que las personas muestren puntos de vista diferentes, puede resultar un hecho un poco curioso que al decir algo frente a un público todos estén totalmente de acuerdo. En consecuencia, los pensadores han señalado que si esto sucede, debe ser signo de que uno en realidad está equivocado, pues nunca se puede complacer a todos.

Goethe (1749 – 1832)

No preguntemos si estamos plenamente de acuerdo, sino tan sólo si marchamos por el mismo camino.

Por otro lado, algunos son de la idea de que en realidad no es el consenso lo que debe buscarse entre humanos, pues no es natural estar todos de acuerdo, sin embargo, esto no significa que no se pueda marchar por la misma brecha. De hecho, según ha señalado Goethe, no importa en realidad estar de acuerdo, sino poder recorrer juntos un camino.

Enrique Rojas

La verdad no puede ser sometida a consenso.

De igual manera, algunas corrientes han señalado que no todas las cosas de la vida deben ser sometidas a consenso, para poder ser ciertas o  ser posibles. Una de ellas es la verdad. Es decir, las cosas que son verdad no necesitan ser aprobadas por todos para ser, tal como señala este médico español, que desestima el consenso sobre el absoluto.

Albert Einstein (1879 – 1955)

Una velada en que todos los presentes estén absolutamente de acuerdo es una velada perdida.

Por último, para algunos pensadores también es necesario que los individuos entiendan que nunca se debe procurar el estar de acuerdos con todos, o que todos estén de acuerdo con nosotros, pues en realidad además de imposible y desgastante, sería una derrota o –tal como señalaba Albert Einstein- una pérdida de tiempo.

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