Definición de Gramática

De esta manera, se puede comenzar a decir que la Gramática es un concepto en constante revisión, el cual cuenta con varias interpretaciones, según la corriente que la conciba. Sin embargo, en líneas generales, la Gramática puede ser vista como una disciplina de la Lingüística, que procura una aproximación a la Lengua, a fin de estudiar las distintas normas y principio, por los cuales esta se maneja. Por consiguiente, la Gramática busca entender la Lengua desde las normas y reglas que esta posee.

Así mismo, existe un aspecto de gran importancia a la hora de entender esta disciplina, y es la diferencia de visiones que existe entre la tradición de la Gramática y la forma en la que esta materia es entendida por la Lingüística actual, la cual radica específicamente en que la Gramática actual puede ser considerada una Gramática descriptiva, es decir, que se entrega al estudio de la Lengua, a fin de poder observar, registrar y entender las distintas normas y principio que rigen en ella, como resultado de los aportes y decisiones hechas durante años, y de forma natural, por los miembros de una comunidad lingüística; mientras que la tradición que imperó en la Gramática antes de esta nueva visión era más del tipo prescriptivo, lo que hacía que por el contrario, se aproximara a la Lengua con la intención de estudiarla, para erigir normas sobre su funcionamiento, lo cual llevaba poco a poco a la concepción de una Lengua estándar o Lengua modelo, que puede no parecerse mucho a la Lengua hablada por los miembros de esta comunidad de habla.

Gramática funcional

Teniendo esta definición presente, será mucho más sencillo entonces abordar la definición de Gramática funcional, la cual puede ser descrita como uno de los tipos de gramática, que procura una análisis de la Lengua desde su concepción de instrumento social, buscando entender el uso de las distintas expresiones que existen dentro de ella, desde la necesidad o interés social de los hablantes que las emplean, de ahí que reciba el nombre de funcional, puesto que persigue estudiar el uso de las palabras y demás estructuras sintácticas dentro de la situación comunicativa en la cual tiene lugar, tomando en cuenta en todo momento el contexto lingüístico de los hablantes.

De acuerdo a lo que señalan las distintas fuentes, esta Gramática fue promulgada por el lingüista holandés Simon C. Dik, a finales de la década de los setenta, como resultado de su propósito por realizar un modelo de análisis lingüístico que le permitiera entender la funcionalidad que la Lengua tenía dentro -y ligada exclusivamente- a la situación comunicativa. Igualmente, la Gramática Funcional funge como una respuesta teórica a corrientes lingüística como el generativismo o el estructuralismo, modelos a los que principalmente, la Gramática Funcional, criticaba su afán por establecer categorías gramaticales, que en estudiar el uso y sentido social que estas podían tener para los hablantes de una Lengua, a diferencia de esta Gramática para la que una misma categoría podría desempeñar diferentes funciones, puesto que se estudia las relaciones de estos constituyentes según cada una de las construcciones en las cuales se integran.

Niveles de estructuración

Así mismo, la Gramática Funcional señala que las distintas funciones que pueden tener las construcciones de una Lengua se dan también en lo que su creador, Simon C. Dik llamó niveles de estructuración, y que definió como tres de ellos:

• Semántico: en donde se encuentran aquellos procesos de significado que se establecen según cada uno de los referentes.
• Sintáctico: en el cual se incluyen los distintos papeles que cumplen los constituyentes, según su lugar dentro de la construcción.
• Pragmático: en donde tiene prioridad los distintos valores informativos con los cuales cuentan cada uno de los constituyentes que conforman las distintas construcciones lingüísticas.

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