Los ojos son el órgano en el cual se fundamenta nuestra subsistencia y además de ello, nos permiten movernos a voluntad. Es muy cierto que percibimos nuestra realidad a través de los cinco sentidos, pero la vista es el más primordial; y a pesar de saber esto, la sociedad moderna no se preocupa por la salud de este órgano maravilloso.
Aunque parezca mentira, mucha gente alrededor del mundo mira directamente al sol y este es quizá uno de los hábitos que causan un enorme daño en nuestra retina, que es un tejido sensible a la luz ubicado en la superficie interior del ojo. La luz que se introduce por la retina desencadena una serie de fenómenos químicos y eléctricos que finalmente, se convierten en impulsos nerviosos que luego son enviados al cerebro por medio el nervio óptico.
El daño que causa mirar el sol es bastante nocivo y puede llegar a desencadenar problemas más graves como las cataratas, por lo que se recomienda usar lentes que protejan los ojos de los rayos ultravioleta.
Otro de los hábitos diarios que dañan la salud de los ojos es el uso indiscriminado de maquillaje, que hoy en día no solo lucen las mujeres ya que la mayoría de cosméticos contienen elementos químicos que muchas veces se ignoran porque no vienen referenciados en las etiquetas de los productos. Curiosamente, prueba de esto fue una noticia que causo gran revuelo en Londres donde se descubrieron maquillajes falsos que estaban hechos con excremento de rata, arsénico y cianuro.
Leer es una actividad magnifica para el cerebro pero muchas veces abusamos de la literatura y nuestros ojos son los verdaderos afectados. Muchas personas leen mientras van en bus, en el carro, en el taxi y este hábito es extremadamente nocivo para la salud ocular, pues puede ocasionar el desprendimiento de la retina, dolor de cabeza, mareos y vómito, aunque estos síntomas varían según la persona. También existen daños ocasionados por la falta de luz mientras leemos, porque los ojos se sobre esfuerzan bastante y se dañan los tejidos musculares que sostienen el globo ocular.
Quizá el hábito más nocivo de todos es frotarse los ojos, porque las manos siempre están expuestas a un sin número de bacterias y partículas que al entrar en contacto con el ojo pueden desencadenar graves problemas de salud en repetidas ocasiones lo hacemos sin darnos cuenta pero debemos ser muy cuidadosos y precavidos a la hora de proteger nuestros preciados ojos que nos permiten desenvolvernos en el mundo.
Tener en cuenta esta información, conlleva a a mejorar la calidad de la salud ocular. En la época en la que vivimos, leer en las pantallas se ha vuelto casi indispensable y se efectúa durante bastante tiempo, al frente de la radiación que emiten dichos dispositivos. No obstante, leer cuando la habitación está oscura, bien porque sea de noche o bien porque no le entre luz suficiente, sobre esfuerza la mirada y cansa rápidamente a los ojos. Y tratándose de leer largos periodos en la pantalla, los galenos recomiendan frecuentes descansos y ejercicios de los músculos oculares.
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