Al parecer, la mayoría de los humanos concebimos la Tierra como algo sólido y estable, y se nos olvida que el planeta es una masa viva de materia en constante transformación, aunque sus tiempos se midan en eras y su ritmo no sea tan acelerado.
De vez en cuando, el planeta sufre transformaciones abruptas que nos hacen recordar la fuerza que guarda bajo su corteza.
Un ejemplo de esto es el terremoto, primero de muchos durante las semanas siguientes, ocurrido el 25 de abril de 2015 en Nepal, cuya fuerza y alcance conmocionó al mundo.
Siendo solo uno de los ocurridos en la misma zona durante abril y mayo, y con una energía de 7,8 grados en la escala de Ritche, este sismo dejó miles de muertos y desaparecidos, y destruyó milenarias construcciones.
Sin embargo, los daños humanos y materiales no fueron las únicas consecuencias de la serie de sismos ocurridos en la región.
MÁS DE UN METRO DE ALTURA
Algunos científicos afirman que la energía liberada por el movimiento telúrico fue de tal magnitud que logró modificar la atmósfera terrestre, durante su emisión.
Así mismo, otros institutos de investigación como el Servicio Geológico de Estados Unidos señalan que el terremoto de Nepal cambió también la geografía del territorio, provocando que una franja de las formaciones montañosas conocidas como los Himalayas perdiera 1,5 metros de altura aproximadamente.
Según lo publicado por la agencia de noticias BBC, la zona más afectada con el descenso de su territorio corresponde a una porción de aproximadamente 100 kilómetros, ubicada en Langtang Himal, al noroeste de Katmandú.
Zona esta donde además se reportaron dramáticas avalanchas que sepultaron a varios excursionistas que se encontraban en sus campamentos, al momento del sismo.
Igualmente –según el reporte de esta agencia británica- los científicos consideran que otras formaciones de este sistema montañoso, ubicadas al oeste también vieron afectadas su altura, descendiendo aproximadamente un metro.
OBSERVACIÓN SATELITAL
El método usado para la medición de cómo fue afectada la altura de este sistema montañoso consiste en comparar –según explicaron investigadores del Centro de Observación de la Tierra del DLR a ese medio inglés- las imágenes satelitales obtenidas antes y después del sismo.
Tal como explicó el científico Minet, adscrito a ese Centro:
«Los valores positivos después del terremoto significan que el área está más lejos del satélite y que es más bajo ahora«.
Concluyendo, igual que el Servicio Geológico de EEUU, que las imágenes satelitales estarían dando reporte de una disminución entre setenta centímetros y un metro y medio de altura en esta porción de montañas, ubicadas al noroeste de Katmandú.
¿Y EL EVEREST?
Esta afirmación despertó de inmediato las alarmas e interrogantes con respecto al ícono por excelencia de este sistema montañoso: el Everest, cuya altura además –tal como explica la BBC- siempre ha sido tema de debate entre los científicos.
Sin embargo, en cuanto a la altura específica de la montaña más alta del mundo y de este sistema, el científico dice que no se puede saber la altura específica de una formación montañosa en particular, sino que sólo puede dar razón de la altura general de la zona.
De todas formas, adelanta que aunque esta medición se debe hacer con equipos como GPS, puede especular que quizás el Everest no haya sufrido alteraciones en su altura, puesto que este monte aunque está ubicada al este de la zona donde se registró la mayor fuerza del movimiento sísmico, región que no sufrió el terremoto tan dramáticamente como el esto, el centro y el sur del territorio.
En ese sentido, el científico Minet, del Centro de Observación de la Tierra del DLR, concluyo:
“con este resultado no podemos afirmar que una montaña específica es ahora un metro y pico más baja; es la zona general la que podemos evaluar«.
Igualmente, los institutos de investigación geológica –según la BBC- han determinado que también se encuentran evidencias sobre la elevación de ciertas zonas del centro, donde estaría incluido Katmandú y el sur del sistema montañoso Himalaya, que de alguna forma equilibraría el hundimientos de las montañas.
Los científicos explican que este tipo de fenómenos geológicos son naturales en terremotos de esta magnitud, y que la elevación o hundimiento de algunas formaciones se debe a la colisión de las placas tectónicas.
COLISIÓN DE PLACAS FUE FRONTAL
En este caso –según informó la agencia BBC- la colisión fue frontal.
Tal como explicó Tim Wrigth, profesor de la universidad británica Leeds, a ese medio inglés, la falla geológica ubicada bajo Katmandú:
“se deslizó bajo la parte de la corteza hacia el sur, donde se aplastó, y se estiró hacia el extremo norte”.
Este comportamiento originó, según este Profesor, que la región ubicada debajo de Katmandú (la que se “aplastó”) se elevara; mientras que hacia el norte, donde el profesor asegura que la placa “se estiró” se produjo el hundimiento.
Igualmente, Tim Wrigth señaló que el deslizamiento de la falla geológica se produjo mayormente hacia el norte del territorio, trayendo como consecuencia que las montañas ubicadas hacia este punto geográfico sean las que mayor hundimiento presentan.
En este sentido, los expertos dicen que este terremoto marcó un comportamiento distinto al que estas placas tectónicas han tenido.
La altura del sistema Himalaya –según reseña la BBC- generalmente tiende a aumentar debido al choque constante de las placas tectónicas correspondientes a las regiones de India y Eurasia.
Los investigadores afirman que ante terremotos de esta magnitud el proceso se invierte.
Es decir, normalmente la parte de la placa tectónica correspondiente a Nepal está siendo aplastada por las dos fallas, y la zona más cercana a esta es constantemente arrastrada por la placa India, ocasionando que las regiones más apartadas se eleven.
Durante el terremoto, ocurrió todo lo contrario: la zona de Nepal que está atrapada en la falla fue arrastrada hacia abajo, deslizándose libremente y rebotando hacia arriba, produciéndose su elevación, mientras que las zonas que generalmente se elevan, fueron aplastadas, hundiéndose.
Evidentemente, como ejercicio de autoconservación como especie, no deberíamos olvidar nunca –como lo hacemos la mayoría- el gran poder que tiene la naturaleza, y lo frágiles que somos ante él.
Este tipo de transformaciones son algo totalmente natural, así se formó el planeta que conocimos, y así seguirá transformándose así no estemos ya en él para observarlo y registrarlo.
Esta son sólo una de las consecuencias de un sismo que afectó la atmósfera, el paisaje, la altura de los territorios y la vida de los cientos de humanos que cambiaron de plano y la de los sobrevivientes.
Si tienes alguna opinión sobre este gran terremoto que sacudió Nepal y sus consecuencias, escríbenos tus comentarios.
Fuentes de imágenes: 1. Pixabay; 2. bbc.co.uk
Autor: Paola Sabogal