Un extraño lugar en tierras mexicanas donde suceden fenómenos impresionantes, donde espesas nubes suelen tapar el sol todo el tiempo, rodeado por un desierto en el que si llega a llover, quienes se hallen en sus inmediaciones quedan atrapados por varios días.
Allí se han generado historias paranormales y leyendas de todo tipo, desde extraterrestres, hasta de plantas mágicas, fantasmas, rocas calientes, personas misteriosas y mucho más. Bienvenidos a la enigmática zona del Silencio:
Especialistas de diversas ramas se ven muy atraídos a este rincón del mundo. Ufólogos, científicos, parapsicólogos, místicos, curiosos y demás. Exactamente el sitio se ubica en una región denominada como la Reserva de la Biósfera Mapimí, en límites con los estados de Chihuahua, Durango y Coahuila.
En el Bolsón de Mapimí, hace miles de años había un lecho marino, por lo que se ha hallado gran cantidad de fósiles marinos por toda el área.
Las diferentes leyendas
Desde siempre se han escuchado historias sorprendentes de este lugar, pero empezaron a ser más populares a raíz de un evento peculiar, ocurrido el 11 de julio del año 1970, cuando las fuerzas militares estadounidenses realizaban unas pruebas con un misil Athena, que extrañamente se estrelló en la denominada Zona del Silencio.
El destino de tal proyectil era la base de misiles de Nuevo México, White Sands. Sin embargo, se desplazó 400 kilómetros más en dirección al sur, cruzando la frontera mexicana y chocando en una duna de arena.
En común acuerdo con las autoridades mexicanas, un equipo de norteamericanos se dispuso a rastrear el terreno para estudiar todo los pormenores del incidente y recuperar todos los restos del artefacto. Como se trata de una zona desértica, se vieron obligados a construir una carretera y una mini pista para aterrizar. Curiosamente, en un momento dado, todos los equipos de comunicación se bloquearon y no servían para nada.
Este inexplicable suceso, sumado a la extraña desviación del misil, pero además a un evento que tiempo atrás se registró también en este mismo punto, conllevaron a la comunidad internacional a llamar a esta región tan especial, como “La Zona del Silencio”.
El piloto que se salvó de morir allí
Ese otro acontecimiento que ocurrió antes del famoso proyectil estadounidense, fue el curioso accidente que sufrió el piloto Francisco Sarabia Tinoco, quien ese entonces era el más reconocido aviador mexicano, pues logró el record de velocidad de vuelo entre el Distrito Federal y Nueva York, en el año 1939.
El mismo Francisco Sarabia relata que cuando sobrevolaba el desierto de Chihuahua, en el espacio aéreo de Durango, inexplicablemente la radio quedó muerta y de inmediato los controladores del tráfico aéreo quedaron en estado de emergencia. El piloto no tuvo otra opción que realizar sus mayores esfuerzos por lograr un aterrizaje que le permitiera a él y a su tripulación salvar sus vidas.
Por fortuna sobrevivieron, pero nunca se pudo hallar una razón específica de la causa del siniestro. Fue el primer caso oficial que se registró de fallas electromagnéticas inusuales en estas coordenadas. Algunas versiones afirman que allí se produce una fuerza magnética incomprensible que es la causante de esos accidentes y ocasiona anomalías de toda índole.
Extraterrestres y criaturas sobrenaturales
Varios lugareños han atestiguado que han visto extraños objetos voladores no identificados e incluso hasta los seres que los tripulan. Mencionan además los testimonios, que se han observado unas mutaciones impresionantes e inexplicables de la flora y también de varios animales cuyo hábitat se halla en la Zona del Silencio.
Aerolitos
En algunas partes de esta zona, yacen algunas de estas espectaculares piedras del espacio, meteoros que lograron sobrevivir a la explosión que se produce al ingresar a la atmósfera terrestre y al chocar con la superficie planetaria. Tienen una belleza muy singular.
El nopal morado
Algunos asocian esta planta, con vegetación extraterrestre. Presenta unos colores morados muy intensos en las temporadas de sequía. Es uno de los principales atractivos del lugar. La especie de este nopal es exclusiva de muy pocos sitios en el mundo.
La tortuga de Mapimí
Esta es la especie de tortugas más grande de todo Norteamérica. Es un reptil de grandes proporciones, pero lamentablemente se halla en vía de extinción, aunque quedan unos cuantos que todavía es posible ver en el nororiente del estado de Durango, en plena Zona del Silencio.
Imagen: wikipedia.org