Una Isla encantada en el Mediterráneo
Parece ser que el Mediterráneo (y, en él, la región de las costas de Italia) en un territorio particularmente apto para el surgimiento de leyendas. Sus innumerables islas, islotes y pequeñas penínsulas son el terreno ideal para el secreto, la conspiración… y la aparición de entidades de categoría paranormal.
La historia de la isla comienza en torno al año 421, cuando por primera vez algunos habitantes de la región decidieron fundar allí residencias permanentes. Su decisión no se debía a ninguna ventaja que ofreciera la isla en sí misma, sino al terror que estaban suscitando las invasiones bárbaras que en este periodo amenazaban con destruir al Imperio Romano.
La muerte negra en la isla
Algunos siglos después, la isla se había convertido en una floreciente población italiana, que se dedicaba a la pesca y al comercio. Sin embargo, habría de ser duramente golpeada por la Peste Negra: los documentos relatan que los muertos se contaban por miles, y casi toda la población de la isla pereció en estos dramáticos años. Una vez no quedaron prácticamente supervivientes, enfermos de otras regiones se llevaban allí a morir, para que no infectaran a sus ciudades.
Poveglia vino entonces a conocerse como “la Isla de la Muerte”. Miles de cuerpos inertes (algunas fuentes afirman que más de 100 mil) yacían, unos sobre otros, en el suelo de la otrora próspera región. Los cuerpos se quemaron, y sobre sus cenizas renacería una nueva población… aunque la isla ya no volvería a ser lo que fue.
Bajo dominio veneciano, la Isla se convirtió en una avanzada que sería usada de nuevo como zona de cuarentena durante la plaga de 1793. Durante el siglo XIX fue abandonada por sus habitantes mientras se convertía en un Lazaretto (un hogar para los enfermos), y una vez éste se cerró, en 1814, la isla quedó casi deshabitada.
Fantasmas en la Isla – Hospital
Fue entonces cuando comenzaron a correr las leyendas. Fantasmas de la peste, de la guerra y del hospital comenzaron a volverse los residentes permanentes de la región, mientras se volvía más y más despoblada. Cuando, en 1920, los primeros médicos y enfermeros arribaron a la isla – que habría de convertirse en un establecimiento psiquiátrico – comenzaron a denunciar que actos misteriosos impedían su buen actuar. Los avistamientos de fantasmas se volvieron casi recurrentes.
Para añadirle al cuadro, el director del hospital no se caracterizaba por su humanidad con los pacientes. Al considerarlos poco más que animales, y con una obsesión por el dominio de la mente, comenzó a realizar todo tipo de experimentos que involucraban aislamiento, torturas, lobotomías y trepanaciones en la esperanza de comprender el funcionamiento de las mentes de estos hombres.
Crueles, como dicen que son, a los espíritus de la isla esto pareció no gustarles. Los eventos paranormales aumentaron y llevaron a la renuncia de muchos de los médicos de allí. Sin embargo, lo más impresionante fue que obligaron al director del hospital a suicidarse: el hombre se lanzaría de la torre más alta del hospital tras contarle sus visiones a algunos médicos del lugar.
Después de este dramático evento, el hospital se cerró y la isla quedó completamente deshabitada. Después de este periodo, y hasta la actualidad, ha sido usada como viñedo. Hace poco fue comprada por un magnate italiano (aunque el hombre jamás ha puesto un pie en ella), quién quizás estaría interesado en construir allí un hotel de lujo.
Los barcos que pasan por las cercanías dicen que las campanas aún tañen, aunque suavemente, y que los susurros de los espectros pueden oírse mar adentro. Son pocos los que se aventuran en los linderos de la isla. En la actualidad, se le considera como uno de los lugares más embrujados del mundo, y se dice que en sus 1500 años de historia este diminuto territorio fue lugar de más de un millón de muertes.
¿Serías capaz de pasar una noche allí?
Fuente de imágenes: 1: images.huffingtonpost.com, 2: k45.kn3.net, 3: resources3.news.com.au.