Algunas personas no se sienten a gusto con su cuerpo, entonces le mandan realizar exorbitantes tatuajes, operaciones quirúrgicas de toda especie y hasta efectúan dietas extremas; todo, con el fin de modificar el aspecto físico. Pero algo de lo más extremo es cambiarse de género y luego, convertirse en un dragón, como en el caso del siguiente sujeto:
Un obsesión reptil
Richard Hernández, un ex banquero de Arizona, Estados Unidos, que primero se mandó realizar intervenciones quirúrgicas que le cambiaron de sexo, pero no contento con ello, después se sometió a otras transformaciones que de hecho, no sólo no lo hacen parecer masculino como era originalmente, sino que ya ni si quiera parece un ser humano.
De hecho, es el primer individuo humano que afirma haberse operado radicalmente el rostro, para parecerse a un dragón; se instaló cuernos; se mandó teñir los ojos de verde con inyecciones de tinta; le cortaron la nariz y le quitaron las orejas; la lengua le fue cortada en dos de forma bífida reptil; se modificó los dientes para que quedaran en punta y se tatuó escamas por todo el cuerpo.
Para su primera cirugía de cambio de género, se implantó senos, se quitó el pene y se hizo llamar “Eva Tiamat Baphomet Medusa”, pero con la última conversión se autodenomina “Dragon Lady” y asegura ser “una bestia de la mitología”.
Una trans pre-op M2F
En sus redes sociales como Twitter, Tiamat se auto describió de la siguiente manera: “Yo soy Lady Dragon, una trans pre-op M2F (hombre a mujer) en proceso de transformación en una dragón humana. Estoy dejando atrás mi humanidad mientras cambio mi apariencia y mi vida para convertirme en un reptiloide. Quiero superar mi timidez natural, convirtiéndome en una bestia mítica”.
Richard, como verdaderamente se llama, en una entrevista con un importante medio, dijo que todo había comenzado hace más de 20 años, cuando entró por vez primera a un consultorio donde se transforman de esa manera. Ahora, se gana la vida en concursos de fenómenos y transformistas.
Imágenes: caracol.com.co