Uno de los peores momentos que podría vivir una mujer, sería si la obligan a casarse con un hombre al que no ama. Aunque pareciera que eso sucedió en épocas remotas, aún sigue sucediendo. Esta es la historia de “la novia más triste del mundo”.
No pudo ocultar su gran tristeza frente a las cámaras
Su nombre es Kheda Goilabiyeva, natural de Chechenia y fue casi inevitable, que los medios de comunicación fijaran su atención en ella, puesto que su esposo es un reconocido funcionario ruso y su fiesta de bodas fue un epicentro de las cámaras.
El hombre tiene 30 años más que ella y cuando se casaron en 2015, Kheda había cumplido 17 años. Él, aunque ya tenía una esposa legalmente constituida y la poligamia está prohibida en Rusia, contrajo nupcias según expresa la chica, “a la fuerza”.
Un hombre cercano a Putin
Sumado al hecho, algunos medios informativos publicaron que la joven chechena recibió fuertes amenazas por parte de aquel individuo, para que se casara con él. Se trata de un importante mando de la Policía nombrado por el mismo Vladimir Putin en 2008. De acuerdo con tales informaciones, si Kheda no aceptaba, el sujeto le advirtió que secuestraría y lastimaría a toda su familia, valiéndose del alto cargo oficial policial que lo favorece.
Algo evidente, fue que durante la ceremonia del matrimonio, la joven mantuvo una expresión de terrible tristeza en su rostro, sin importar lo muy lujoso que fuera el evento, mismo que se llevó a cabo en Grozny, la capital de Chechenia. Pero como habían entrevistado a la novia días antes de la boda, mucha gente pudo notar su mala disposición y tristeza, por lo cual, varias mujeres activistas y organizaciones feministas se hicieron presentes alrededor del recinto, marcando su voz de protesta ante lo que consideran como “un acto de total tiranía y abuso de poder”.
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