A lo largo de la vida hemos escuchado repetidamente frases como «El tiempo es oro», pero aun así la gente en su mayoría, lo sigue perdiendo y no le dan tal valor. Dice otro refrán popular: “Pierde una hora por la mañana, y la estarás buscando todo el día”. O: “El tiempo perdido los santos lo lloran”.
El tiempo gastado, lamentablemente no vuelve. Un segundo se esfuma y se va para siempre. Mucha gente se lamenta y quisiera regresar el tiempo, pero es algo que resulta imposible. Quisieran volver atrás para corregir tantos errores y sobre todo: para haber aprovechado su tiempo de vida, de una mejor manera. Es una sensación que experimentan especialmente quienes saben que van a morir pronto.
Hay quienes creen que aprovechan el tiempo, porque no se sientan a diario cinco horas frente al televisor, pero no son conscientes de que se van juntando pequeños espacios de tiempo donde se desperdicia y al final del día, es evidente que se podía haber sido más eficaz. Pero ante ese dilema, hemos recopilado algunas de las maneras como la gente suele desperdiciar su existencia, para de ese modo, aprovechar al máximo nuestra estancia en esta Tierra. Veamos:
El entretenimiento
En la actualidad, uno delos entretenimientos que más agotan las horas de la existencia de un individuo, son las redes sociales. Las personas adictas gastan enormes cantidades de tiempo, curioseando la opinión y la vida de los demás en todos los aspectos. Son muchos los elementos distractores del entretenimiento, pero estos son los más usuales.
Ni qué decir de los videojuegos, donde pueden pasar días enteros sin despegarse de la pantalla. O el clásico de esta era moderna: la televisión, que ha sufrido diversos cambios y ahora se puede llevar en una pequeña pantalla de bolsillo o hasta en el reloj, para disfrutar de las más sorprendentes series, películas, documentales, novelas, noticias, etc. Y allí, en todo ello, se va consumiendo el tiempo destinado de vida.
No contar con un cronograma de actividades
Esto conlleva a que se pierda mucho tiempo pensando en cuál es la siguiente acción que se debe llevar a cabo. Por eso muchas cosas se quedan sin hacer en un día, cuando debieran haber sido ejecutadas.
Está comprobado científicamente, que la psicología de una persona se programa de maravilla cuando se proyecta con un cronograma de actividades, desde la noche anterior. Preparar el siguiente día es una estrategia de lujo para vivir la vida al máximo, intensamente, con éxitos rotundos y con mucho tiempo disponible.
Aceptar un trabajo que se odia
Es un punto muy complejo, pero a la luz de la neutralidad, se puede concluir que someterse a una rutina de labores que se detestan, sólo con el objetivo de pagar las facturas y suplir las necesidades básicas, es prácticamente un modo de esclavitud, donde se vende la vida, a cambio de unos cuantos pesos.
Muy distinto es quien disfruta de un modo de ganarse la vida, que a su vez, forme parte de su vocación. Es un infierno vivir hora tras hora, día tras día, en una especie de prisión mental y hasta física, pero de manera voluntaria en cierta medida relativa.
Durmiendo
Si hacemos cálculos, podemos deducir que prácticamente pasamos la mitad de la vida sobre un colchón. Mucho se ha dicho que hay que dormir mínimo 8 horas cada noche, pero estudios científicos recientes han expuesto que esa es una de las mentiras que creímos durante toda la vida, puesto que a través de experimentos se ha logrado demostrar que de 4 a 5 horas son suficientes para tener un sueño reparador.
Sabemos que un día tiene 24 horas, pero en realidad tenemos la impresión de que fueran solo 16. Para que nos alcance la vida y un día, debeos sacrificar el placer de dormir más de 5 horas, aseveran varios especialistas.
Permanecer atado a un lugar
El apego por un lugar, como por ejemplo al sitio donde se creció y se ha vivido toda la vida, es una manera de desperdiciarla en cierta manera, si se le ve desde la perspectiva de que el mundo es demasiado maravilloso y extenso como para anclarse en un pequeño rincón, año tras año.
Estudiar lo que los padres imponen
Se clasifica dentro de los principales martirios que extinguen de manera tortuosa, los segundos, minutos, horas, días, semanas, meses y años de vida.
Obsesionarse con trabajar todo el tiempo para ganar dinero
La vida no sólo consiste en obtener recursos económicos, pues eso es tan sólo una parte minúscula de lo que realmente es la vida. Lo que recomiendan los sabios, es que se debe vivir de modo equilibrado, no sólo invirtiendo el tiempo de vida a cambio de dinero, sino también invertirlo en personas y asuntos trascendentales del ser humano.
El diálogo interno lleno de pensamientos desordenados
Chismes, molestias del pasado, frustraciones, miedos, ansiedades, odios, rencores, sospechas, celos, intrigas, venganzas, sufrimientos, etc, etc, etc, ocupan la mayor cantidad de tiempo en los pensamientos de las personas. Esto hace que se pierda grandes cantidades de tiempo y energía, como por ejemplo sufriendo por lo que acontece en vidas ajenas.
Lo más inteligente, es aprovechar cada segundo al máximo y proponerse no perder ni medio instante de vida, en cosas superfluas y sin sentido, o mucho peor, autodestructivas.
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