Rudy Eugene

Este sujeto marcó la historia del mundo, pues resultó convirtiéndose en un zombi, debido a una sustancia alucinógena de gran potencia. Al poco tiempo de haberla consumido, atacó a un hombre y se comió su rostro a mordiscos. Cuando llegó la policía a detenerlo, le dispararon, pero las balas no surtían efecto y un policía tuvo que propinarle siete balazos, para poder someterlo, pues nadie le podía ganar en fuerza. Debido a los disparos, murió. Oficialmente, jamás se había visto algo así.

Georg Wilhelm Richmann

Vivió en el año 1753 y fue la primera persona registrada, que falleció a causa de un incidente con la electricidad. En la ciudad de San Petesburgo, el profesor estaba maravillado con todo lo concerniente al mundo eléctrico y lanzaba bolas gigantes de energía eléctrica hacia el cielo. Pero uno de esos globos centelleantes de alto voltaje, se fue directo hacia él al perder el control y lo asesinó al tocarle la cabeza.

Las misteriosas muertes de Bogle y Chandler

Ocurrió en 1962, comenzando el año. Gilbert Bogle se escapó con la esposa de uno de sus colegas profesores de física, de una fiesta a la que asistían, con la intención de mantener relaciones con la mujer, de nombre Margareth Chandler. Pero al siguiente día, sin causa alguna aparente, sus cadáveres yacían muy cerca de un río. En los cuerpos no había ninguna señal de que algo o alguien los hubiera matado, pues no habían golpes, ni rastros de algún veneno. Nunca pudieron explicar su muerte.

Combustión humana espontánea

En el año 2010, en Irlanda, las sirenas de emergencia alertaban que en la casa de Michael Faherty, de 76 años de edad, estaba ocurriendo un incendio. Salía humo por todas partes y los vecinos llamaron a la policía. Los bomberos y las autoridades llegaron al sitio, para intentar apagar las llamas y finalmente, hallaron el cuerpo calcinado de Michael. Lo extraño de todo, es que los bomberos reportaron claramente, que el fuego se inició desde el interior del cuerpo del occiso, como si éste se hubiera encendido en llamas de un momento a otro. Fue algo que nunca pudieron explicar, pero que se anexó a los casos de combustión humana espontánea que se han presentado a lo largo del mundo. De un momento a otro, las víctimas se envuelven en fuego, sin ninguna clase de carburantes o causa exterior aparente. Las llamas parecieran provenirles de adentro.

¿Murió por la maldición de una bruja?

Era el año 1991. Cristopher Case se estaba separando de su esposa, porque creía que ella le hacía brujería y le había lanzado una maldición. Se obsesionó tanto con la idea, que compró decenas de crucifijos y velas y las esparció por su casa en todas partes. Así mismo, rodeó con sal todos los rincones de la vivienda y llamó a sus principales amistades para comentarles que sentía grave peligro, por las brujerías de su ex. Unos cuantos días después, las autoridades lo hallaron sin vida metido en la bañera, pero los forenses nunca pudieron determinar cuál fue la causa del deceso, pues ni si quiera había una mínima herida, rastro de veneno ni pista alguna.

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