Aunque las mujeres han sido doblegadas en todos estos siglos, han existido personajes femeninos que lograron marcar la historia, tanto del mundo como de su nación, por lo que ahora se les recuerda como un ícono de la valentía, la inteligencia, liderazgo y amor por su pueblo. En seguida: “las mujeres más poderosas del mundo”:
Isabel la católica
La reina española que financió a Cristóbal Colón en el proyecto de América. Su carácter la demarcaba como una jerarca con gran rigor y autoridad. Se proclamó como reina el 13 de diciembre del año 1474, en la ciudad de Segovia. Dicho rito de nombramiento, iba acompañado de un juramento por los cuatro Evangelios, por Dios y por la Cruz, que obedecería fielmente los mandatos de la Iglesia Católica.
Nefertiti
Una mujer egipcia que gobernó con firmeza la dinastía número XVIII. Es la temible consorte del faraón Akenatón. Las leyendas la describen como una dama de enorme belleza, con un aspecto físico divinal. El pueblo le rendía gran tributo y veneración, por lo que tenía poder sobre lo político y lo espiritual.
Curiosamente, le encantaba mandar erigir estatuas que evocaran los momentos de intimidad de ella y el misterioso Akenatón. Algunos estudiosos de la historia, consideran que se trata de la misma Semenejkara, nombre con el que reinó en su tiempo. Sin embargo, es algo que aún no se ha confirmado con plena certeza. Lo que sí se puede determinar, es que Nefertiti ha sido una de las mujeres más poderosas de las culturas de la humanidad.
Emperatriz Teodora
Fue la mujer con mayor poder en todo el esplendor del imperio bizantino, desde el año 500, después de Cristo, hasta el 548. Fue la famosa consorte del emperador Justiniano.
La gente la estimaba como una fuente de gran sabiduría y amor por el bienestar de su pueblo, que se caracterizaba por sus métodos de conciliación, por eso la amaban tanto las vertientes ortodoxas como las monofisitas. Fue precursora de corrientes progresistas y fue canonizada por la iglesia bizantina ortodoxa.
Cleopatra
La historia cuenta que se trató de la última monarca del periodo del Antiguo Egipto y la más recordada. Su época de poder fue entre el 69 y el año 30 antes de Cristo. Su nombre completo: Cleopatra Filopátor Nea Thea.
Mucho se ha hablado de su relación con los emperadores romanos Marco Antonio y Julio César. Cuando cumplió 17 años, brillaba en ella una belleza seductora que ningún hombre podía resistir, poder que se aumentó al máximo por la forma de su personalidad, única, encantadora y voraz. Todos esos elementos la ubicaron dentro de las mujeres más poderosas de la historia.
Juana de Arco
Una heroica mujer de origen francés, quien cuando tenía 17 años comandaba al ejército de su país y lo condujo a importantes victorias. Cuando llegó a los 19 años de edad, la inquisición la envió a la hoguera, acusada de herejía, pues afirmaba que hablaba directamente con Dios.
Cinco siglos después, la misma iglesia la canonizó y se le rememora como una de las más poderosas mujeres que haya existido, pues para dirigir pelotones enteros de una de las principales naciones europeas, siendo aún adolescente, indica un potencial cual ninguno. Estos hechos ocurrieron entre los años 1412 y 1421.
Catalina la Grande
Fue la sucesora de Pedro el Grande. Su revolución cambió el destino de Rusia, mostrado que sí era posible una adecuada administración de las instituciones gubernamentales y militares. Gestionó grandes obras de avance tecnológico, científico, educativo, artístico, cultural y social. El gobierno de Catalina II fue desde 1762, hasta 1796.
La emperatriz Wu Zetian
China la recuerda como su más importante emperatriz, quien lideró al gran imperio del dragón naciente con sabiduría y equidad, a diferencia de los demás emperadores de la historia, de acuerdo las descripciones oficiales. Nació en el año 625 y murió en el 705, después de Cristo. Los libros indican que su nobleza, era literal.
Isabel I de Castilla
Se proclamó como Monarca de Castilla, el día 13 de diciembre del año 1474, en la ciudad española de Segovia.
Se ganó el título de la “Führer del siglo XV”, puesto que llevó a la incineración a más de dos millares de personas. Sin embargo, también se le considera como un ícono de la victoria. La iglesia intentó canonizarla durante la guerra civil española, pero ha pesado más su imagen tirana y oscura.
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