La semillas contienen toda la información genética de una planta. Algunas de ellas son comestibles y contienen muchos beneficios nutricionales y representan una importante fuente de minerales, vitaminas y aminoácidos. Su consumo se ha popularizado en las últimas décadas y algunas son de fácil acceso. Se les estima como alimento vivo y si se consumen crudas, sus beneficios son innumerables. En seguida, «las más saludables del mundo».
Semillas de albaricoque
Contienen altos niveles de amigdalina, más conocida como vitamina B17, fundamental para la regeneración de los tejidos musculares. Muchos médicos aseguran que consumir 20 semillas al día, es una de las formas más efectivas de mantener alejado el cáncer.
Semillas de cáñamo
Cuentan con más de 20 aminoácidos, los cuales resultan esenciales para le regeneración celular. Poseen una alto índice de proteínas y ayudan a fortalecer el sistema inmune; igualmente, promueven la eliminación de toxinas y han sido usadas desde hace varios siglos por los hindúes.
Semillas de granada
Son una excelente fuente de aminoácidos, los cuales evitan el envejecimiento de las células del cuerpo. También son conocidas por los polifenoles, mismos que ayudan a oxigenar la sangre, así como a reducir el impacto de las enfermedades degenerativas, como la artrosis y la artritis.
Semillas de uva
Su consumo previene la hipertensión, disminuye el colesterol y reduce la inflamación de los tejidos osteomusculares. Contienen grandes concentraciones de vitamina E, ácido linolénico y flavonoides, los cuales estabilizan los niveles de glucosa en la sangre y ayudan a la regeneración celular.
Semillas de calabaza
Algunos nutricionistas aseguran que al consumir 100 gramos diarios, se provee el 50% de la proteína que el cuerpo necesita para su correcto funcionamiento. Representan una buena fuente de vitamina B, niacina y riboflavina. Son excelentes para combatir la depresión.
Semillas de comino
De acuerdo con los médicos, son formidables para tratar afecciones digestivas. Evitan la proliferación de infecciones y son una fuente considerable de hierro. Su consumo estimula las funciones del hígado, el cual se encarga de eliminar las sustancias tóxicas del cuerpo.
Semillas de lino
Sus beneficios se le deben al ácido alfa linolénico, el cual es un potente antiinflamatorio. Aportan fibra y disminuyen el riesgo de padecer cáncer de seno. Está asociada con la buena salud del colon y también generan grandes beneficios para la regulación hormonal, tanto en hombres como en mujeres. Algunas pruebas de laboratorio determinaron que bloquea el crecimiento de tumores malignos.
Semillas de sésamo
Se le ha calificado como «el condimento más antiguo de la humanidad». En oriente, se usa para acentuar el sabor de las comidas y contribuye al cuerpo una buena dosis de calcio, zinc y magnesio. Son las únicas que contienen sesamina y sesamolina, unas fibras muy benéficas que reducen el colesterol negativo.
Semillas de chía
Consideradas como «el alimento del futuro». Al igual, se encuentran dentro del grupo de los superalimentos, por su alto contenido de proteínas y antioxidantes. Se estima que cuentan con 6 veces más calcio, que la leche; 3 veces más hierro, que las espinacas y 8 veces más vitamina C, que las naranjas. Ayuda a acelerar el metabolismo y promueve la desinflamación de las articulaciones y la pérdida de peso.
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