El Pensante

Los años antes de la vacuna, o cómo se descubrió en Oriente una defensa contra la Viruela

Ciencia, Medicina - junio 18, 2016

Imagen 1. Los años antes de la vacuna, o cómo se descubrió en Oriente una defensa contra la Viruela

En China se usaba el método de inhalar los restos del polvo de viruela para inmunizar

La Vacuna

Hace unos días hablábamos de la Expedición Filantrópica, que se encargó de llevar la vacuna contra la viruela a todas las posesiones de la corona española. Esta expedición se realizó gracias al descubrimiento, por parte de Edward Jenner de una variedad de virus vacuno (de ahí el nombre “vacuna”) que volvía inmunes a las personas a la viruela. Pronto de descubrió que entrar en contacto con la sangre de una persona inmunizada brindaba inmunidad, y desde entonces se pudo controlar la temible epidemia.

Pero siglos antes del descubrimiento de la vacuna (que ocurrió en los últimos años de los 1700’s) varias sociedades habían encontrado un método llamado variolización que, aunque menos eficiente, podía prevenir exitosamente el contagio de la viruela. Veamos:

Variolización

También conocido como Inoculación de la Viruela, la variolización consiste en el uso del polvo seco del pus de los granos de viruela como un agente inmunizador. Este polvo seco hace que la viruela pierda gran parte de su poder infeccioso y permite que un porcentaje muchísimo más alto de personas sobrevivan a la enfermedad, quedando inmunizadas de por vida. Aunque seguía siendo riesgoso, era una apuesta mucho más segura.

De acuerdo con las fuentes actuales, la variolización comenzó a realizarse tan temprano como el siglo X en China, aunque aún se debate si fue este (o arabia) su lugar de origen. En el periodo temprano se hacía por tradición y no está claro qué llevó a las personas a intentarlo por primera vez (a priori parecería una decisión estúpida) pero desde el principio se sabía que si sobrevivías a esta “viruela débil” serías inmune a la enfermedad más seria que vendría después.

India, China y África parecen haber sido las primeras regiones donde apareció la variolización. Las tradiciones eran diferentes: en África se hacían cortes en las muñecas o los codos para introducir el polvo seco, en India se arropaba a los niños con mantas usadas por los enfermos de viruela. En China, por su parte, el polvo de pus se inhalaba.

Imagen 2. Los años antes de la vacuna, o cómo se descubrió en Oriente una defensa contra la Viruela

La variolización se volvió muy popular en las clases medias y altas occidentales

Llegada a Occidente

Pese a tratarse de una costumbre milenaria de éxito probado, la variolización nunca fue generalizada y no se conocía en vastas zonas del mundo. Las regiones islámicas parecen haberla desarrollado poco tiempo después que los chinos y desde allí se extendió a toda el área de influencia árabe… pero no a Europa.

No sería hasta el siglo XVIII que este magnífico método de prevención llegará a la nobleza europea gracias, ahora, a la curiosidad de Lady Mary Wortley Montagu, esposa del embajador británico en el Imperio Otomano. La mujer probó la variolización en sus  hijos y tras darse cuenta de que funcionaba la llevó de vuelta a su Inglaterra natal. Corría entonces el año de 1717.

Durante casi un siglo el método se popularizaría entre las clases altas, pero jamás llegaría de manera masiva a las clases bajas por lo que la viruela seguiría siendo una enfermedad letal que rondase continuamente las ciudades europeas.

Con la llegada del siglo XIX el descubrimiento de la vacuna haría que se volviese más y más fácil el control de la viruela, pero aún así tomaría otro siglo para exterminarla. Todos concuerdan en que, si la variolización se hubiese extendido con mayor eficiencia en sus inicios la viruela bien podría haber desaparecido mucho tiempo atrás.

Suele debatiré mucho sobre la utilidad de la medicina tradicional. En el caso de la variolización, aunque nunca nadie supiera cómo funcionaba (y no tengamos idea de su origen), la medicina tradicional probó ser extremadamente útil.

Imágenes: 1: detectivesdelahistoria.es, 2: quimicaviva.qb.fcen.uba.ar