Tal vez, antes de abordar cuáles fueron los matemáticos más importantes del mundo antiguo, sea necesario recordar algunas definiciones, a fin de poder entender el alcance de cada uno de estos hombres en su debido contexto.
Definición de Matemáticas
En este sentido, resulta pertinente revisar entonces la definición misma de Matemáticas (Ver más en ¿Qué son las Matemáticas?) la cual puede ser concebida como una disciplina del conocimiento humano, cuyo propósito esencial es estudiar las entidades abstractas, como por ejemplo los símbolos, figuras geométricas, y por su puesto los números, a fin de entender sus distintas propiedades y relaciones. Así mismo, las Matemáticas no son concebidas por la comunidad académica como una Ciencia en sí misma, sino como un conjunto de lenguajes formales, a través de los cuales las distintas disciplinas científicas pueden lograr expresar de forma no ambigua y en su justo contexto los problemas originados en torno a sus objetos de estudio y las Leyes observados en ellos. Por consiguiente, las Matemáticas se erigirían también como una herramienta científica por medio de la cual el hombre logra expresar y comprender las Leyes que rigen la naturaleza, de ahí que sean entendidas también como la herramienta del hombre a través de la cual logra cuantificar, medir y calcular el cambio del mundo que le rodea.
Definición de Matemático
Por su parte, un matemático (¿Qué hace un matemático? ) sería entonces un profesional de la investigación que se encargaría del estudio de este lenguaje formal, con el propósito de adquirir conocimientos suficientes que le permitieran a la larga resolver algunos de los problemas fundamentales de esta área del conocimiento, a fin de contribuir con ella. Así mismo, dentro de sus principales motivaciones estaría la de lograr, a través de la aplicación práctica de las Matemáticas, convertir en hechos verificables y comprensibles las distintas leyes formuladas por las diferentes ciencias, sobre todo aquellas concernientes a entender el Universo.
Matemáticos más importantes de la Antigüedad
A pesar de que los científicos y antropólogos consideran que las Matemáticas debieron originarse en el seno de la sociedad prehistórica (Ver más en Origen de las Matemáticas) en la medida en que el hombre comenzó a encontrarse con retos que le obligaban a desarrollar su capacidad de calcular las cantidades y forma correcta de administrar sus recursos, el cómo medir sus herramientas o lograr la construcción de edificaciones resistentes, o incluso cuantificar el tiempo y poder llevar la cuenta de los ciclos naturales, al momento de nombrar a los matemáticos más importantes del mundo antiguo tan sólo se puede hacer en base a las civilizaciones que sobrevinieron después de la invención de la Escritura, puesto que es este elemento el que ha permitido que los aportes de estas primeras civilizaciones antiguas se conozcan en la actualidad.
En este sentido, la Historia de las Matemáticas (Ver más en Historia de las Matemáticas) asume que las civilizaciones antiguas más importantes en cuanto al desarrollo de esta disciplina fueron los babilónicos, los egipcios, los chinos y los antiguos griegos, siendo de estos cuatro los más conocidos los Egipcios y los Griegos, debido a la calidad y gran capacidad de conservación con el que cuentan sus obras escritas, así como –en el caso de los griegos- las lecturas que hicieron de ellas las civilizaciones posteriores, sobre todo aquellas pertenecientes a la Edad Media. De ellos, los matemáticos considerados por las fuentes académicas como los más importantes de esas épocas son entonces los siguientes:
Tales de Mileto (645 a.C. – 546 a.C.)
Estudioso de la civilización helénica, el cual incursionó en áreas como la Filosofía, la Ingeniería, la Astronomía y por su puesto las Matemáticas, disciplinas del conocimiento humano, con las que trató de llevar a cabo su principal motivación: hallar una explicación racional para el Universo. Entre sus aportes más importantes es el de haber promulgado el Teorema de Tales, los cuales se constituirían en nociones fundamentales de la geometría.
Pitágoras de Samos (570 a.C. – 510 a.C.)
Mejor conocido sólo como Pitágoras, fue un matemático también de origen griego que logró la solución y demostración de un teorema esencial para la Geometría, el cual concluía que «en todo triángulo rectángulo, el cuadrado de la hipotenusa es igual a la suma de cada uno de los cuadrados de los catetos» (c2 = a2 + b2) y que fue bautizado en su honor como Teorema de Pitágoras, constituyéndose como una de las proposiciones más conocidas de las Matemáticas y uno de los preceptos fundamentales de la geometría. No obstante, algunas fuentes siempre destacan que este teorema en realidad existía antes de la propia existencia de Pitágoras, siendo Euclides, otro importante matemático griego, quien lo llamara de ese modo. Así mismo, Pitágoras fue en fundador de la escuela bautizada como los pitagóricos, quienes cumplieron con la importante misión de demostrar la existencia de los números racionales.
Eudoxo de Cnidos (410 a.C. – 355 a.C)
Otro de los importantes matemáticos griegos fue Eudoxo de Cnidos, estudioso que se cree vivió entre el 410 a.C. y el 355 a.C., aunque existen otras fuentes que prefieren situar los límites de su vida entre los años 408 a.C. y el 347 a.C. Dentro de los grandes aportes de este científico, quien también incursionó en áreas como la Medicina, la Geografía y la Astronomía, está la de haber promulgado la Teoría de la Proporción, así como el establecimiento del Método de exhaución. Así mismo, Eudoxo de Cnidos logró crear una clasificación para distintos conceptos como número, longitud y dimensión espacial, al tiempo que desarrolló fórmulas que le permitieron calcular el volumen de figuras geométricas como el cono y la pirámide.
Euclides de Alejandría (365 a.C. – 300 a.C.)
Perteneciente también a la civilización griega, a la cual se le atribuye el haber concebido las Matemáticas abstractas, a través de la aplicación del método deductivo, Euclides trató fervientemente de entender las Matemáticas, sobre todo las Geometría a través de la aplicación de fundamentos axiomáticos. Así mismo, logró deducir el algoritmo de Euclides. Sin embargo, el reconocimiento de la civilización occidental no sólo se reside a los propios conocimientos y descubrimientos que este sabio griego hizo en esta materia, sino que también toma en cuenta la importante tarea editorial y académica que Euclides realizó al escribir su obra los Elementos, en las cuales logra recopilar todo el conocimiento matemático que la civilización occidental tenía para este remoto siglo (s. III a.C.)
Arquímedes de Siracusa (287 a.C. – 212 a.C.)
Por su parte, este matemático griego, conocido simplemente como Arquímedes (Ver más en Biografía de Arquímedes) pasó a la historia como uno de los matemáticos e ingenieros más importantes del mundo helénico, pues a él se le atribuyen la construcción de impresionantes e ingeniosas máquinas, así como la promulgación del principio de Arquímedes, el cual dicta que “todo cuerpo sumergido en un fluido experimental un empuje vertical y hacia arriba, igual al peso del fluido desalojado”, y que además de ser vital para entender el cómo calcular el volumen de un cuerpo, constituye uno de los principios físicos fundamentales. Así mismo, Arquímedes se distingue como un gran matemático debido a los trabajos realizados por este estudioso griego, en cuanto a calcular la razón entre el diámetro y el radio del círculo (conocido actualmente como π).
Apolonio de Perge (262 a.C. – 190 a.C.)
Matemático que se cree nación en Perge en el año 262 a.C. y falleció en Alenjandría, en el año 190 a.C. Es reconocido dentro de la Historia de las Matemáticas como uno de los grandes, por su importante trabajo en cuanto a las sesiones cónicas, los límites de secesión, entre otros asuntos relacionados con las figuras cónicas, y que recogió en su célebre obra Cónicas (kωνικά por su título original en griego).
Diofanto de Alejandría (100 a.C. – 350 a.C.)
Importante matemático griego, famoso por su obra escrita, de la cual resalta sobre todo, aquella que lleva por título Aritmética. Basó su trabajo en el área de las ecuaciones algebraicas, las cuales logró resolver despejando varias incógnitas, dedicación que fue recompensada históricamente con el bautizo de estas operaciones como Ecuaciones diofánticas, que es como se le conocen a todo tipo de ecuación que trate de hallar su solución dentro de los distintos números enteros.
Herón de Alejandría (10 d.C. – 70 d.C.)
A pesar de que se desconocen datos precisos sobre el nacimiento y muerte de este ingeniero y matemático griego, su obra sí es conocida, pues destaca por haber trabajado arduamente en promulgar la célebre Fórmula de Herón, la cual básicamente consiste en el cálculo de la superficie de un triángulo, el cual no se logra sino a partir de la suma de la longitud de cada uno de sus lados. Así mismo, este matemático griego incursionó en el cálculo de raíces cuadradas.
Imagen: fotografía del Partenón griego (Atenas, Grecia) /Fuente: pixabay.com