Ventajas de usar Medios de Contraste

De acuerdo a como señalan las distintas fuentes médicas, el uso de este tipo de sustancias permite la coloración y visualización de ciertas estructuras o tejidos que no son fáciles de observar sin su uso, lo que se traduce en la realización de estudios imagenológicos precisos, claros e idóneos, para que el profesional médico a cargo pueda hacer el diagnóstico de una forma rápida y precisa. Así mismo, el empleo de este tipo de sustancias permite que zonas invisibles en los estudios radiográficos, sin su uso, puedan ser estudiadas sin necesidad de proceder a una intervención quirúrgica explorativa, lo que convierte a los medios de contraste en una opción menos invasiva.

Principales características

Entre los rasgos esenciales que tienen las sustancias usadas como Medios de Contraste, básicamente se encuentran su composición, la cual está conformada por algunas sustancias, como el Yodo, que tienen la propiedad de resultar opacas al ser expuestos a los Rayos X, dibujando entonces la zona que se quiere estudiar, y que sin la intervención de esta sustancia resultaría imposible de ver.

Vías de ingreso al cuerpo

Igualmente, de acuerdo al protocolo médico, existen diferentes formas en las cuales un Medio de Contraste puede ser suministrado al cuerpo del paciente, lo cual dependerá entre otras cosas del tipo de sustancia, la clase de examen que se realizará y la parte del cuerpo en donde se empleará. De esta forma, las principales formas de suministro por medio de las cuales una sustancia de contraste puede entrar al cuerpo humano son las siguientes:

• Vía oral: son aquellas sustancias que son suministrados al paciente por la boca, a través de líquidos opacos.
• Vía rectal: por su parte, las sustancias administradas por vía rectal casi siempre a través de la aplicación de enemas, con los cuales se introduce la sustancia al cuerpo.
• Vía intravenosa: finalmente, otra de las vías por medio de las cuales los Medios de Contraste pueden ingresar al cuerpo es a través de un vaso sanguíneo, bien sea una vena o una arteria, en donde es inyectada directamente la sustancia.

En cuanto a su eliminación, las fuentes médicas indican que estas sustancias opacas son eliminadas naturalmente por el cuerpo, después de cierto tiempo, a través de medios de excreción como la orina o las heces, así mismo puede ocurrir que el cuerpo simplemente lo absorba.

Materiales de las sustancias de contraste

Así mismo, los Medios de Contraste están conformados por un amplio espectro de sustancias, las cuales son clasificadas según las vías de ingreso por medio de las cuales entrarán al cuerpo, parámetro que decide cuáles serán los materiales por las que estarán constituidas. Entre ellos destacan:

Medios de contraste orales

Están constituidos principalmente por Medios o materiales de contraste a base de sulfato de bario. Son suministrados por vía oral, y se destinan principalmente para los estudios que buscan obtener imágenes del tracto gastrointestinal (faringe, esófago, estómago y los intestinos, tanto delgado como grueso) como por ejemplo radiografías o Tomografías Axial Computarizada (TAC).

Medios de Contraste rectales

En cuanto a este tipo de materiales o sustancias de contraste también es usual el empleo de materiales en base al sulfato de bario, el cual es suministrado al cuerpo humano por medio de enemas. Cumple con la misma función que los Medios de Contraste orales, pues su principal interés es revelar fragmentos del tracto gastrointestinal, sobre todo aquellos ubicados en la parte inferior, como el colón o el recto.

Medios de Contraste intravenosos

Por su parte, este tipo de sustancias son elaboradas en base a materiales como el Gadolinio, y especialmente el Yodo. Están pensados para aportar coloración a órganos internos (vejiga, los pulmones, el hígado, el corazón, cerebro, entre otros); vasos sanguíneos (venas y arterias ubicadas en el cerebro, el cuello, las piernas, el abdomen, etc.); zonas del tracto gastrointestinal y tejidos blandos (cartílagos, músculos, piel y grasa). Son aplicados por inyección directa en un vaso sanguíneo, una vez que se haya descartado que el paciente sufra algún tipo de reacción alérgica hacia este tipo de materiales, en especial el Yodo, sustancia a la cual gran número de pacientes reaccionan negativamente.

Medios de contraste, negativos y positivos

Así también, la Medicina cuenta con una clasificación de Medios de Contraste que se basa específicamente en su densidad con relación a los tejidos humanos, y entre las que se encuentran las siguientes:

Medios de contraste positivos

Compuestos por sustancias con números atómicos altos y una densidad que resulta mucho más alta que la de los órganos del cuerpo, incluso que la del tejido óseo, propiedad que también hace que al ser sometida a la acción de los rayos x se dibuje en la placa radiográfica de color blanco. En este grupo se encuentran aquellos Medios de Contraste fabricados especialmente por Sulfato de Bario y Yodo.

Medios de contraste negativos

Conocidos también como Medios de Contraste Radiotransparentes, se encuentra conformado por sustancias cuya densidad es mucho más bajo que la que presentan los tejidos y partes blandas del cuerpo. Debido a que su densidad es mucho menor que la de los órganos y tejidos, al ser sometida a la incidencia de los rayos x tienden a dibujarse en la placa con un color oscuro. Entre los principales materiales usados para este tipo de Medios de Contraste se encuentran el Oxígeno y el Aire, sustancias gaseosas que se caracterizan por absorber menos radiación. Sin embargo, este tipo de Medios de Contraste tienden a no ser muy empleados, o a emplearlos en procedimientos de doble contraste, pero con mucha precaución, puesto que involucra efectos adversos de gran importancia.

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