Es el proceso de adaptar o hacer que un ser vivo se acostumbre a determinadas circunstancias, ambientes, sitios, climas o condiciones diferentes de las que originalmente se ha desarrollado.
Para aclimatar un perro a un gato
Lograr aclimatar un perro a un gato no es tarea complicada pero tampoco es tan fácil. Si ambos animales no han crecido juntos y no se han relacionado desde cachorros, lo más recomendable es tomar precauciones con el fin de que no se presenten riñas entre los dos. Así, es posible que tanto el perro como el gato resulten aclimatándose uno al otro a un ritmo natural de ellos. Conviene estudiar las medidas más pertinentes para aclimatar el canino al gato y viceversa. Si se hace todo correctamente, en poco tiempo las mascotas pueden correlacionarse sin ningún riesgo.
Para aclimatar ganado bovino
Uno de los mayores problemas que surgen en la ganadería, es trasladar los animales de clima frío a temperaturas más cálidas, puesto que como resultado se origina en el ganado patologías ocasionadas por las garrapatas. En el momento de transportar animales de tierras cálidas a templadas o frías, o al contrario, el ganadero se ve obligado a emplear diferentes prácticas de manejo con el objetivo de que los bovinos se acostumbren a las nuevas condiciones del ambiente, evitando que se ocasione un choque que les pudiera causar serios malestares.
Para aclimatar peces en el acuario
Aclimatar peces es una labor que consiste más que todo, en conseguir que se acostumbren a sus nuevas condiciones de vida y ecosistema. Esto implica que estos animales acuáticos se logren familiarizar con el pH del agua, los niveles de salinidad, la temperatura y otros aspectos cruciales. Se debe tener muy en cuenta la enorme sensibilidad de estas mascotas ante cualquier cambio de agua.
Para aclimatar plantas
Aclimatar cualquier clase de planta que lo permita, consiste en reducir al máximo los efectos que ocasionen los cambios drásticos de las condiciones del ambiente, permitiendo a las nuevas plantas adaptarse al nuevo hábitat.