Es un problema cutáneo que se distingue porque las glándulas sebáceas se inflaman y aparecen granos o espinillas. Se desarrolla más que todo en la zona del rostro y de la espalda, aunque puede aparecer en otras partes del cuerpo.
Para lavarse la piel con delicadeza
Resulta crucial lavar la cara mínimo dos veces al día, pero usando productos especiales para pieles grasosas y sin llegar a restregar. En seguida, es necesario hidratar el cutis con algún gel o crema adecuada para el tipo de piel. En cuanto las mujeres, es imperante que se desmaquillen al finalizar el día.
Para afeitarse con cuidado
El proceso de afeitarse puede contribuir a aumentar el acné. Por tal razón, se debe realizar con sumo cuidado para no agravar las lesiones preexistentes. Si se usa la cuchilla, la hoja ha de contar con buen filo y previamente de aplicar la crema de afeitar, es necesario lavar el cutis con agua y jabón para que la barba se ablande.
Para seguir una dieta equilibrada
Los expertos recomiendan siempre comer sano y disminuir lo más que se pueda el azúcar y todos los alimentos con altos niveles de glucosa, al igual que las harinas.
Para beber mucha agua
Beber agua con regularidad en el día, ayuda a limpiar el organismo en general y se lleva con ella todo lo que no sirve.
Para hacer ejercicio
Se ha descubierto a través de los años, que hacer ejercicio es fundamental para sanar el cuerpo en múltiples anomalías y enfermedades. El acné es uno de los males que disminuyen notablemente con el ejercicio, puesto que se mantiene la circulación sanguínea en óptimo estado y se eliminan toxinas.
Para buscar sol y aire fresco
El sol estimula que el organismo produzca vitamina D, misma que se requiere para una piel sana. Esto debe ir junto con aire fresco y se obtienen beneficios enormes, como disminuir el estrés significativamente y renovar el cutis.
