El Pensante

¿Qué países se vieron afectados durante la postguerra?

Historia - julio 29, 2016

Por lo general, se denomina Posguerra al período histórico inmediatamente posterior al fin de una guerra, en el cual se sienten realmente los efectos de esta, al tiempo que los países involucrados luchan por sobreponerse a las nefastas consecuencias que deja todo conflicto bélico, independientemente de su duración en el tiempo.

Imagen 1. ¿Qué países se vieron afectados durante la postguerra?

No obstante, para la Historia Universal, el término Posguerra refiere directa y específicamente al período posterior a la Segunda Guerra Mundial, en el cual se dieron cambios políticos, económicos y sociales, que cambiaron totalmente el escenario mundial, al tiempo de que afectaría terriblemente a ciertos países, mientras que otros por el contrario se verían bastante beneficiados de ese período de reconstrucción vivido por una Europa que luchaba por renacer de las cenizas en las que la habían dejado sumida casi seis años de continuos bombardeos, asaltos y destrucción.

El Plan Marshall

Las consecuencias de la Segunda Guerra Mundial fueron desastrosas para Europa, continente que vio afectada terriblemente su economía, así como su infraestructura y su parque industrial, perdiendo importantes vías ferroviarias, barcos, fábricas, entro otros bienes. Así mismo, el gran gasto que había involucrado el pago de la Guerra había endeudado las naciones y reducido drásticamente las reservas de oro.

No obstante, del otro lado del Atlántico parecía estar la solución a todos los males: un Estados Unidos joven y con mucho interés por ayudar a sus vecinos. En este contexto entró en escena el Plan Marshall, un plan global de reconstrucción, financiado por la nación norteamericana, a saldo de profundos acuerdos económicos y políticos. Sin embargo, no todos los países europeos se decidieron en participar, dividiéndose entre aquellos que aceptaron la ayuda estadounidense, abiertamente capitalista, y aquellos que prefirieron abstenerse del socio americano, y que por contraparte quedaron al amparo de la URSS, lo cual sirvió también para configurar el escenario mundial de las próximas décadas: la Guerra Fría, en la cual se enfrentaban el bloque capitalista y el bloque comunista.

De acuerdo a lo que cuenta la Historia, este Plan se inició con un desembolso de cuatro mil setecientos millones de dólares, transferidos entre 1944 y 1946, a los países que aceptaron la ayuda. Así mismo, resaltaban algunos países que decidieron desmarcarse tanto del bando estadounidense, no recibiendo la ayuda representada por el Plan Marshal, así como de la ayuda de la URSS, estas naciones fueron Alemania y Japón, quienes optaron por reconstruir su economía de forma autónoma.

Durante las próximas décadas, el Plan cumplió su cometido, produciendo la recuperación vertiginosa de Europa, quien se levantó nuevamente teniendo ahora a Estados Unidos como aliado bélico, proveedor de materias primas y productos, y financistas del renacer europeo, el cual benefició a algunos países como España (en el viejo continente) y Canadá (en América).

Consecuencias económicas de la posguerra

Pese a la ayuda y crecimiento sostenido que originó el Plan Marshall, las consecuencias económicas del gasto y la deuda contraídas por la guerra dejaron sentir sus efectos de forma generalizada en los países europeos, en especial en aquellos que se negaron a la ayuda estadounidense, los cuales se manifestaron en inflación, falta de liquidez y demás dificultades de orden financiero, hecho que en ocasiones retrasó el desarrollo industrial, del cual Europa había perdido al menos cincuenta por ciento durante conflicto.

Ante esto, la mayoría de las naciones europeas decidieron adoptar el Modelo Keynesiano, el cual básicamente convirtió a los Estados en entes administradores de su propia economía, haciendo que se convirtieran en el principal promotor de las inversiones, se activó el parque productivo, se procuró la estabilización de la moneda, el aumento de la población,  mejoras laborales, seguridad social de los trabajadores, entre otras medidas que poco a poco comenzaron a dar frutos.

No obstante, sería pertinente analizar brevemente el desarrollo de cada uno de los países involucrados en la guerra, puesto que cada uno vivió el proceso de posguerra y de recuperación, a su manera y con sus propias dificultades:

Alemania

Aun cuando no aceptó la ayuda estadounidense y su territorio había sido uno de los más afectados por la guerra, Alemania fue uno de los países que más se desarrolló y recuperó durante la posguerra, logrando convertirse en una verdadera potencia europea, aplicando con todo su entusiasmo el desarrollo de su parque industrial, la tecnificación de sus empleados, mejoras salariales y sociales, estrategias que se tradujeron en un aumento sostenido de la producción y en un crecimiento de exportaciones, además con rápida recuperación. Así mismo, el Estado alemán se encargó firmemente en combatir la inflación.

Gran Bretaña

Por el contrario, Gran Bretaña fue uno de los países que más afectado se vio en la época de posguerra, sobre todo en los primeros quince años, después del conflicto. Entre los problemas que tuvo que afrontar fue el atraso que sufrió su parque industrial, aun cuando este país fue en su momento la cuna de la Revolución Industrial. Por consiguiente, esta situación conllevó también a una escasa producción, inflación, altos precios, poca oferta, sumado a los problemas sociales con el lento crecimiento de su población como protagonista, hecho que influía también en su mano de obra, la cual se encontraba entre las más caras de toda la región.

Otro factor crucial en la crisis afrontada por Gran Bretaña durante mediados del siglo XX fue el gran gasto público, así como la pérdida de sus colonias, en manos de Estados Unidos, lo cual le ocasionó al antiguo Imperio europeo un déficit en sus recursos, así como una reducción drástica en su influencia en la política mundial, siendo desplazado por el nuevo poderío estadounidense.

Francia

Con respecto a Francia, esta nación –también bastante afectada por la Guerra- comenzó una rápida recuperación de su sector industrial, así como su crecimiento demográfico, en pro del desarrollo de una economía sostenida en la producción de bienes intermedios. Sin embargo, y pese a sus esfuerzos, Francia fue otro de los países más afectados en la época de posguerra, teniendo que soportar terribles tasas de inflación, producidas especialmente por el crecimiento sostenido de una población, que en primer momento contaba con una agricultura muy precaria, que no le permitía sostenerse. Así mismo, Francia sufrió grandes presiones económicas, debido a la gran deuda externa que había contraído durante la guerra.

Italia

Al contrario de sus pares, Italia comenzó un proceso de crecimiento y producción bastante acelerado, debilitándose en la década de los sesenta, pues aun cuando contó con gran inversión en la industria, la deuda pública, el crecimiento de la población y la deuda externa debilitaron de forma preocupante la economía, lo cual se vio traducido en una gran inflación.

Holanda, Bélgica, Luxemburgo, Austria y Países Nórdicos

El crecimiento de estas naciones también se produjo de forma sostenida, llegando a constituir una economía equilibrada que parecía representar el triunfo del denominado capitalismo socializado, es decir un sistema económico capitalista, que tomaba en cuenta las mejoras sociales y la inversión social como banderas. De esta forma, estos países pudieron seguir los pasos de sus vecinos de la Europa occidental, recuperándose poco a poco de los terribles daños causados por la guerra.

Rusia y España

Estos países conocidos tradicionalmente como la Europa periférica no participaron formalmente de la expansión económica que vivía Europa. En primer lugar, sobre todo Rusia, se negaron a aceptar la ayuda estadounidense, contando además con un campo industrial anticuado, débil, así como una agricultura bastante escasa. Como resultado, además de sus consecuencias negativas manifestadas en inflación y escasez, vivieron en su población procesos de emigración masivas de sus ciudadanos, buscando mayores beneficios. Por su parte, España, también por su situación geográfica vio la oportunidad de desarrollar el turismo, lo cual originó ingresos que le permitieron activar su parque industrial.

Estados Unidos

Aunque había participado directamente de la Guerra, esta se había llevado a cabo en suelo europeo, lo cual había significado la conservación de su parque industrial, el cual además se desarrolló importantemente durante la guerra. Así mismo, Estados Unidos no perdió oportunidad para erigirse y ejercer su papel como nuevo líder político y económico del globo.

Japón

Finalmente, en Asia, Japón –quien sufrió el estallido de dos bombas atómicas- se levantó de sus cenizas, a través de un plan de crecimiento demográfico, avances científicos, economía de austeridad, fortalecimiento del sector agrícola, intervención y control del estado, desarrollo de la competitividad y el compromiso de todos sus nacionales en lograr de Japón una potencia mundial, en todo sentido.

Imagen: foto de Normandía, Francia / Fuente: pixabay.com