Hablar de extraterrestres en nuestra cultura actual ya no es un despropósito si la misma NASA tiene proyectos para la búsqueda de vida inteligente fuera de la tierra. Sin embargo, las películas de Hollywood nos han vendido una imagen que no se corresponde con la realidad. Pero entonces…
¿Que son los extraterrestres?
La respuesta está en la misma palabra. El prefijo extra significa «fuera» y la palabra «terrestre» alude a nuestra planeta Tierra. Por tanto, extraterrestre alude a algo que nació, que se originó o que se desarrolló fuera de la Tierra. La vida extraterrestre es todo tipo de vida que pudiera formarse fuera de nuestro planeta.
Nuestro espíritu mismo, si aceptamos que no se formó en la tierra, sino en algún otro lugar, es, en estricto sentido, extraterrestre. En otras palabras, no debemos pensar que los extraterrestres son monstruos que vienen a destruirnos. Los monstruos somos nosotros mismos que ya nos estamos autodestruyendo.
Si alguien va a la luna y trae una roca lunar, en efecto, ha traido una roca extraterrestre. Si un meteorito choca en la tierra, en efecto, deja rocas extraterrestres. Sin embargo, la palabra extraterrestre suele tomarse como humanidades venidas de otros planetas y, en este caso, también cabe el término: extraterrícolas, ultraterrícolas y ultraterrestres.
Las humanidades ultraterrestres son aquellas que se han formado en otros sitios fuera de la tierra. Sin embargo, sólo es cuestión de nombres. Si en el planeta Venus se hubiera desarrollado alguna civilización, nosotros, con respecto a ellos, seríamos extravenusinos.
Así las cosas, el término extraterrestre es sólo circunstancial y muy restrictivo. Es como si le dijéramos a toda persona que haya nacido fuera de México, por ejemplo, extramexicano. ¿Verdad que algo iría mal con ello?
De este modo, conviene llamar a las humanidades venidas de otros lugares por su lugar de origen, tanto como: seres venusinos, pleyadianos, sirianos, etcétera.
Y ellos no son más que humanidades, seres humanos que nacieron en otros planetas, en otras galaxias y que, de acuerdo a factores físicos y biológicos, han desarrollado facciones más o menos diferentes, mayor o menor altura, color, grado de inteligencia, etcétera.
Ahora bien, con respecto a que sean malos, debemos saber que si fueran lo suficiente malos como nosotros, se habrían autodestruido antes de alcanlzar un progreso tecnológico tan avanzado que les permitiera viajar a través del cosmos.
La mayor de las veces son humanidades que sólo desean conocer otros sitios, establecer intercambio comercial y cultural, a la vez que propiciar la integración del cosmos.
Las humanidades ultraterrestres han estado con nosotros desde tiempos remotos, otras han llegado recientemente, algunas se han quedado para ayudarnos, otras llegarán y nos auxiliarán cuando nosotros, los humanos, estemos a punto de destruirnos a nosotros como civilización y cuando estemos a punto de destruir nuestro planeta, nuestro hogar.