El coco

Por consiguiente, se comenzará por decir que las distintas fuentes biológicas optan por definir al Coco como el fruto de la palmera cocotero, la cual es reconocida también por su nombre científico Coco nucifera, así como por ser la palma más cultivada a nivel mundial.

En cuanto a las características del Coco, este puede ser descrito como una fruta redondeada, y en algunos casos también ovoide, que cuenta con tener tres distintas capas: una exterior, que se caracteriza por ser bastante gruesa; una capa media, que se distingue por ser bastante fibrosa; y finalmente una corteza interior, distinguida también por su dureza, así como por su pelambre de color marrón, en donde también podrán observarse tres distintos puntos.

De hecho, algunas fuentes señalan que es a la apariencia de esta capa interior marrón y peluda al que esta fruta le debe su nombre occidental moderno, pues cuando los portugueses llevaron el coco desde América a la vieja Europa, la gente comenzó a relacionar la apariencia del coco con la imagen que tenía popularmente el fantasma, protagonista de un mito popular, y que tenía misión de asustar a los niños mal portados. En consecuencia, esta fruta fue denominada de esta manera.

Dentro de esta capa gruesa y de pelambre marrón, se encuentra también la pulpa, la cual puede describirse también como bastante carnosa, dulce, aromática y de un profundo blanco. Así también, esta carne blanca que constituye la pulpa del coco contiene también el agua de coco, un líquido que es entendido actualmente por la Ciencia como un verdadero elixir de la naturaleza, capaz de hidratar, alimentar e incluso sanar el cuerpo humano.

Origen del coco

Con respecto al origen con el que cuenta el Coco, algunas fuentes señalan que es un verdadero tema en discusión. En este sentido, pese a que Europa conoció esta fruta durante el proceso de la conquista de América, en específico cuando comenzaron a adentrarse en los territorios costeros, ubicados al norte de Suramérica, existen estudios que señalan que en realidad el Coco proviene de las tierras ubicadas al Sur del continente asiático, en específico aquellas que conforman el delta del Ganges.

Sin embargo, América y Asia no son los únicos continentes que se disputan haber servido de cuna biológica a esta exótica y nutritiva fruta. Por consiguiente, algunos hallazgos arqueológicos señalan la antigua existencia del coco en Oceanía, en específico en Nueva Zelanda, tierra en donde al parecer esta fruta habría crecido de forma natural hace al menos unos 15 millones de años. Así mismo, se han encontrado evidencias sobre la existencia del Coco en otras regiones a lo largo de Asia.

Propiedades nutricionales del coco

De igual forma, durante las últimas décadas el Coco ha dejado tan solo de ser una refrescante fruta, obsequiada por la oportunidad, sino que también ha venido posicionándose como una de las mejores opciones alimenticias, debido a sus grandes propiedades nutricionales, entre las que se encuentran, por ejemplo, la de ser una gran fuente de Carbohidratos, Proteínas vegetales, Azúcares naturales, Fibra alimenticia y Grasas, tanto saturadas, como monoinsaturadas y poliinsaturadas.

Así también, el Coco puede ser entendido como una gran fuente de vitaminas, entre las que se encuentran algunas del complejo B, como por ejemplo la vitamina B1, B2, B3, B5, B6 y B9, así también como de vitamina C. Otra de las propiedades nutricionales que tiene el Coco será la de ser gran fuente de minerales, entre los que destacan el Calcio, Hierro, Magnesio, Fósforo, Potasio y Zinc.

Además, aparte de estas grandes propiedades nutricionales, el Coco es también visto como una fruta con grandes cualidades curativas, entre las que se encuentra ser un poderoso hidratante, un protector del corazón, una gran fuente de antioxidantes, una fruta revitalizante e incluso un antibiótico natural, bastante efectivo.

Recetas dulces a base de Coco

Empero, las cualidades nutricionales y medicinales del Coco no son las únicas razones por las cuales esta exótica fruta se ha ganado una posición de honor en las cocinas y culinarias mundiales, en donde su versátil sabor, textura y cualidades han hecho del Coco el protagonista de los más deliciosos platos. Un ejemplo de esto lo conforma la gran variedad de postres que pueden ser preparados a base de coco, a continuación, algunos ejemplos:

Arroz con coco

Quizás uno de los platos dulces a base de Coco más tradicionales del Caribe, en específico de las costas venezolanas, es el Arroz con coco, el cual puede ser considerado una versión exótica del típico arroz con leche. Para prepararlo será necesario tener a disposición los siguientes ingredientes: dos (2) tazas de arroz, previamente cocinados / una (1) taza de leche / dos y media (2 y ½ ) tazas de azúcar refinada / una (1) taza de leche condensada / una (1) taza de leche de coco / una (1) rama de canela / tres (3) clavos de olor / una (1) flor de anís estrellado / una y media (1 y ½ ) tazas de coco rallado fresco / cuatro (4) cucharadas de canela pulverizada / una (1) pizca de sal.

Una vez se han reunido todos estos ingredientes, se comenzará con la preparación. Para esto, se colocará al fuego una olla profunda, en la que se colocará la leche. Así mismo, se aromatizará esta leche con la rama de canela, la flor de anís estrellado y los clavos de olor, permitiendo que la leche hierva.

Cuando se haya alcanzado este punto, se bajará la intensidad del fuego, hasta obtener la llama mínima, y se agregarán la leche de coco, el azúcar, el arroz y la pizca de sal, permitiendo que la preparación se cocine por unos 7 o 9 minutos más, teniendo entonces mucha precaución de no dejar que la mezcla se pegue a la olla. En este proceso se verá cómo se reducen los líquidos, al tiempo que el arroz dobla sus dimensiones.

Se retira la preparación del fuego, se retiran las especies, y se lleva a la heladera por unas cuatro horas, antes de consumir. Pasado este tiempo, se debe agregar el coco rallado y las cucharadas de canela en polvo, y se mezcla nuevamente, hasta que estos ingredientes se hayan integrado por completo. Así mismo, se agrega la leche condensada, y se mezcla ligeramente para que este producto impregne la preparación. Se sirve frío, y se puede agregar más canela y coco rallado para decorar.

Bocados de piña y coco

Otra de las deliciosas recetas dulces que pueden prepararse a base de coco son estos bocados, que además de combinar a perfección el sabor de la piña y el coco, resultan bastante sencillos de preparar. Para su elaboración, será necesario reunir los siguientes ingredientes: media ( ½) libra de queso crema / una (1) lata de piña en almíbar / dos y media (2 y ½ ) tazas de coco rallado endulzado previamente.

Cuando se tenga todo a mano, se comenzará por destapar la piña, colarla y proceder a triturar la fruta en almíbar. Así mismo, se llevará directo a un recipiente, en él se colocará el queso crema y tan solo un tercio ( 1/3 ) del coco rallado endulzado. Se mezcla la preparación, y se lleva a la heladera por unos treinta minutos.

Pasado este tiempo, se toma el resto del coco rallado, y se coloca en un plato o en una bandeja plana. Se saca la mezcla de la nevera, y con ayuda de la mano se comienzan a formas pequeñas bolitas, las cuales se pasarán por el coco, hasta dejarlas totalmente cubiertas. Pasado este proceso, se deberán llevar nuevamente a la heladera, esta vez por toda la noche. Al día siguiente ya están listas para consumir, y deleitar los paladares con esta divertida combinación tropical.

Pancitos de coco

Por último, otra rica receta a base de coco serán estos tiernos y deliciosos pancitos de coco, los cuales pueden ser preparados para servir durante una merienda o desayuno.

Para elaborarlos, será necesario tener a disposición los siguientes elementos: Una (1) libra de Harina de Trigo, aunque también podría funcionar con harina de coco, siendo así mucho más saludable / una (1) taza de azúcar / una (1) pizca de sal / una (1) cucharadita de levadura fresca / dos (2) cucharadas de mantequilla / dos (2) tazas de leche / una y media (1 y ½ ) cucharadas de manteca o mantequilla / una (1) cucharada grande de coco rallado / una y media (1 y ½ ) cucharada de azúcar /  una (1) cucharada de ralladura de limón / cuatro (4) cucharadas de azúcar / cuatro (4) cucharadas de agua / tres (3) cucharadas de azúcar glass / una (1) onza de jugo de limón.

Cuando se dispongan de todos estos elementos, se comenzará entonces por colocar una olla profunda al fuego, y colocar a derretir la mantequilla. Cuando se haya colocado totalmente líquida, será necesario agregar la leche. Se bate la preparación, hasta que esté bastante homogénea. Se baja del fuego, y se le permite reposar. Pasado el tiempo, se agrega la harina, el azúcar, la levadura y la mantequilla, se amasa hasta obtener una mezcla homogénea y de buena textura, y se le permite reposar por al menos media hora.

Aparte, mientras la masa descansa y crece, se preparará el relleno de los pancitos. Para esto se  deberán mezclar en un recipiente una y media (1 y ½ ) cucharadas de manteca o mantequilla / una (1) cucharada grande de coco rallado / una y media (1 y ½ ) cucharada de azúcar /  una (1) cucharada de ralladura de limón.

Con la ayuda de la mano, se toma un poco de masa, y en el centro se coloca un poco del relleno que se ha preparado. Se colocan en una bandeja enharinada, y se le permite a la masa crecer nuevamente, por al menos una hora. Se llevan al horno por al menos 20 minutos, a unos 200 grados.

Cuando ya vayan a salir, se prepara el glaseado, para esto se hace un almíbar, se pincelan los pancitos con este almíbar, y se espolvorean con azúcar glass.

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