Trascendencia de la obra

En este sentido, quienes así refieren la importancia que tiene La educación de Henry Adams (1907) se basan en el abordaje que su autor hace sobre los temas más importantes de la civilización del siglo XX. Sin embargo, Adams no se queda en lo superficial, sino que apunta directamente a las bases sobre las que se construye toda sociedad, y que en el caso de la civilización occidental del siglo XX parecía ser su alimento y sustento: la incertidumbre, o incertidumbres, dicho así en plural, a fin de resaltar su variedad y número.

Entre muchos de los reconocimientos que ha obtenido desde su publicación, La educación de Henry Adams fue elegida en su momento por la Modern Library como “la mejor obra de no ficción en lengua inglesa del siglo XX». Así mismo, es señalada por la mayoría de los críticos como la autobiografía occidental más relevante.

No obstante, otras fuentes prefieren denominarlo igualmente como uno de los libros más extraños de la literatura estadounidense moderna, puesto que además de alejarse de la ficción, construye un testimonio sobre la vida de un hombre, pero desde las incertidumbres que debía transitar como sujeto de su civilización. En el año 1919, un año después de la primera edición comercial de este libro, la obra de Adams se hizo merecedora de un Premio Pulitzer.

Resumen de La educación de Henry Adams

Sobre el contenido de esta obra, básicamente se puede decir que La educación de Henry Adams es la autobiografía de este autor, la cual es escrita desde una forma bastante íntima y reveladora, sobre varios aspectos de su vida. Sin embargo, el hilo conductor de este relato personal es cómo este hombre escribe desde el amanecer del siglo XX, reflexionando sobre lo distinto que se ha tornado el mundo desde su juventud hasta el momento en que se dedica a la redacción de su testimonio.

Son varios de los aspectos de la civilización, que Adams aprovecha para cuestionar, siendo quizás uno de los más importantes y abordados de forma más rigurosa: la educación del siglo XIX, en cuanto a la forma de abordar dos aspectos de esta: la teoría y la práctica. Para aproximarse a este tema, es decir, a la Educación, de la civilización de la que era parte, Henry Adams toma como ejemplo su propia educación, para a través de ella, poder ir desglosando los diversos aspectos de esta institución.

No obstante, es necesario señalar que esta aproximación, análisis y crítica hacia la Educación del siglo XIX no se realiza desde un punto de vista netamente académico, sino mucho más integral. Es así como el autor de esta autobiografía logra colocar también en el foco de atención temas vitales para el ser humano, tanto de forma individual como colectiva: el amor, la vida, los hijos, el dolor, entre otras circunstancias y sentimientos, propios de la condición humana.

Quizás por eso esta obra cuenta con un valor tan alto para la Crítica, pues constituye un documento irremplazable sobre el hombre moderno. Otro de los elementos que sobresalen de esta obra es la capacidad de su autor por renunciar a la voz en primera persona, y preferir la tercera persona, recurso que le da la posibilidad de tomar distancia, y con esto alcanzar un poco la objetividad necesaria para reconstruir la historia de su propia educación, así como de la infinidad de cambios sociales, políticos, religiosos, intelectuales e incluso tecnológicos que fue viviendo a lo largo de su vida.

Imagen: retrato de Henry Admas, autor de La educación de Henry Adams / Fuente: wikipedia.org