En el ámbito de la Literatura universal, se conoce con el nombre Los viajes de Gulliver a un conjunto de relatos de viaje, inscrita en el género de la sátira, nacido de la pluma del célebre escritor inglés Jonathan Swift, la cual se publicó por primera vez en el año 1726, gracias al trabajo de la editorial Benjamin Motte.
Sobre la obra
Así mismo, las distintas fuentes señalan que Los viajes de Gulliver fue titulada en principio, en su lengua original inglesa como Travels into Several Remote Nations of the World: in four parts. By Lemuel Gulliver, First a Surgeon and then a Captain of Several Ships, forma esta que fue posteriormente abreviada a Gulliver´s Travels, en la edición correspondiente a 1735, momento desde el cual ha seguido siendo impresa con ese título.
Por otro lado, en cuanto a su trascendencia, la Critica considera de forma general a Los viajes de Gulliver como una de las más famosas obras de su autor, así como una de las obras de referencias, tanto para la Literatura inglesa, como universal, para las cuales es considerada un clásico, de ahí que no haya dejado de ser impresa desde su salida al mercado, además de haber sido la inspiración de diversas adaptaciones teatrales y audiovisuales, siendo el más famoso de sus relatos El viaje a Liliput, el cual constituye además la primera parte de este relato.
Resumen de Los viajes de Gulliver
En cuanto al contenido de este clásico de la Literatura universal, se puede decir que se trata básicamente de cuatro relatos de viajes, narrados en primera persona, y atribuidos a Lemuel Gulliver, quien se supone que también es la voz que da a conocer la historia de cómo él recorrió cuatro lejanas naciones, a la vez que dejó de ser médico cirujano para convertirse en el capitán de varios barcos.
Por su parte, cada uno de los cuatros viajes narrados en la obra de Jonathan Swift, pueden ser reunidos de la siguiente manera:
Viaje a Liliput
Este relato de viaje constituye la primera parte de la obra Los viajes de Gulliver. Comienza con una breve introducción, en donde un hombre llamado Lemuel Gulliver rememora su vida, señalando además que le gusta viajar. Así mismo, este hombre señala que es de profesión cirujano, pero que en algún momento la situación económica apremiante lo hizo decidirse por la aventura, en búsqueda de cambiar su fortuna.
Es así como se da pie a la narración sobre los hechos transcurridos entre el 4 de mayo de 1699 y el 13 de abril de 1702. De esta manera, Gulliver recuerda cómo ha zarpado de Bristol, en mayo de 1699, a bordo de la nave llamada Antílope, en búsqueda de la riqueza. Sin embargo, en medio del viaje, una tormenta hace naufragar la embarcación, dejando a Gulliver en medio del océano.
Aferrado a la vida, el hombre nada con todas sus fuerzas, hasta que consigue llegar a la orilla. Una vez a salvo, el cansancio lo vence. Cuando despierta, no puede con la sorpresa e observar cómo ha sido hecho prisionero de unos diminutos hombrecillos, quienes han aprovechado su sueño para atarle.
Es así como Gulliver descubre que la tierra a donde ha llegado en su travesía es una isla llamada Liliput, la cual está habitada por estos pequeños hombrecitos, que no sobrepasan los quince centímetros de altura, y que se conocerán a su vez como liliputenses. Atado, comienza a negociar, para obtener su liberación, logrando su libertad a cambio de compromiso de portarse bien, y sobre todo no dañar a ningún ciudadano de Liliput.
De esta forma, contando con la gracia de los liliputenses, Gulliver comienza a conocer los detalles de su sociedad, narración que ha sido analizada por la Crítica como una sátira a la sociedad europea de finales del siglo XVII. Gozando de su máxima popularidad, Gulliver será también testigo de cómo Liliput entra en guerra con una nación vecina: los Blefusco, quienes son del mismo tamaño que los liliputenses.
El gran hombre decide apoyar a sus amigos, por lo que logra apresar la flota de los Blefusco, dando la victoria a Liliput. Empero, la gloria ganada no es suficiente para los ganadores, quien le piden el apoyo a Gulliver para terminar de conquistar Blefusco, y convertirla en terreno liliputense.
Gulliver rechaza la petición, por lo que es acusado de traición, y condenado a quedar ciego. Para salvarse, el hombre decide huir a Blefusco, en donde fabrica un bote que le permite hacerse a la mar, en donde logra encontrar un barco, cuya tripulación lo rescata.
El viaje a Brobdingnag
Por su parte, la segunda historia de Los viajes de Gulliver tendrá lugar entre el 20 de junio de 1702 y el 3 de junio de 1706. En ella se cuenta cómo a tan solo unos meses de haber vuelto a casa, Gulliver decide regresar a la aventura, por lo cual se embarca en junio de 1702 en la nave Adventure.
No obstante, nuevamente el destino coloca dificultades frente al viajero, esta vez en forma de una terrible tormenta que obliga a la tripulación a desembarcar en una isla, a fin de buscar agua, y descansar del terrible contratiempo. Mientras los hombres se encuentran buscando recursos, se topan de repente con un grupo de gigantes, quienes comienzan a perseguirlos.
En medio de la huida, los marineros abandonan a Gulliver, quien sigue su camino solo, hasta que llega a una granja. En ella habita un gigante y su familia. Gulliver calcula entonces que la estatura de estos seres puede llegar a las nueve yardas. Más por curiosidad que por compasión, el granjero toma a Gulliver y lo lleva a su casa, en donde la hija del gigante comienza a cuidarlo.
El granjero decide que el hombrecito le puede servir, y decide comenzar a mostrarlo a cambio de dinero. En poco tiempo, la exhibición de Gulliver se ha hecho un negocio rentable, lo que hace que viajen por todo el país mostrándolo. Las condiciones de viaje comienzan a enfermar a Gulliver.
Para su fortuna, la reina asiste a una de estas exhibiciones. Encantada con la personalidad y el tamaño de Gulliver decide comprarlo. Así también le construye una jaula transportable, en donde las cosas son hechas a su medida, para que pueda estar cómodo en sus viajes. Durante esta parte del relato, Gulliver les cuenta a sus nuevos dueños sobre cómo es Europa, lo cual da cabida nuevamente a una sátira sobre esta sociedad. Por otro lado, deberá vivir también aventuras inesperadas en este gran mundo.
Empero, un buen día, águila rapta la jaula en donde ha sido confinado Gulliver. En medio del vuelo, el ave la deja caer al océano. No obstante, lejos de lo que se piensa, este no es el fin de Gulliver, quien corre con la buena suerte de encontrar una nueva nave, que lo ayuda a volver a casa.
Viaje a Laputa, Balnibarbi, Luggnagg, Glubbdubdrib y Japón
A tan solo dos meses de haber regresado a casa, Gulliver decide emprender un nuevo viaje, el cual durará entre el 5 de agosto de 1706 y el 16 de abril de 1710. Sin embargo, al poco tiempo de comenzar la travesía, nuevamente el destino vuelve a interponerse, esta vez en forma de un asalto pirata, que deja a la embarcación a la deriva, en aguas cercanas a la India.
A punto de entrar en desesperación, Gulliver se encuentra frente a frente con Laputa, una isla flotante, cuyos habitantes lo rescatan. Es así como este hombre conoce por primera vez esta civilización cuya principal motivación de vida es el conocimiento, por lo cual se dedican con tesón al estudio de las matemáticas, la ciencia, la astronomía y las artes. Lamentablemente, no para fines prácticos, ni mucho menos posibles, por lo que están llenos de investigaciones absurdas, que no los conducen a nada. Algunos críticos han visto en este relato una sátira dirigida a la Royal Society.
Así también, Gulliver tendrá la oportunidad de visitar Balnibardi, Lagado y Maldona, en donde ve cómo se repite la desgracia de una sociedad apasionada por el conocimiento y sin ningún tipo de noción sobre cómo emplearlo en la realidad. Igualmente, este viajero visitará Glubbdubdrib, en donde se entrevistará con un mago, y tendrá la oportunidad de conversar con los fantasmas de grandes hombres antiguos.
Decidido a llegar a Japón, vive una aventura desgarradora, cuando conoce a los struldbrugs, habitantes de Luggnagg, quienes cuenta con la cualidad de ser inmortales, sin que esto les impida envejecer. De esta manera, los struldbrugs padecen eternamente el deterioro de sus cuerpos. Ya en Japón, Gulliver logra el beneplácito de no tener que pisar el crucifijo como muestra de respeto. Desde ahí parte hacia casa, decidido a poner fin a sus viajes.
El viaje al país de los Houyhnhnms
Pese a su deseo inicial, a los cinco meses de su regreso, Gulliver se siente insatisfecho nuevamente de su vida como cirujano, por lo que decide entregarse nuevamente a la aventura. Es así como se convierte en el capitán de un enorme navío, en el que emprende un nuevo viaje que durará entre el 7 de septiembre de 1710 y el 5 de diciembre de 1715.
A poco tiempo de haber zarpado, Gulliver decide recoger un su nave a unos hombres, y sumarlos a su tripulación. Para su desgracia, los nuevos tripulantes colocan a los hombres de Gulliver en su contra, generando un motín que da como resultado la expulsión del capitán del barco. Los tripulantes continúan como piratas, mientras Gulliver es abandonado en un bote salvavidas.
La marea lo conduce esta vez al país de los Houyhnhnms, donde al llegar se encuentra con unas horribles criaturas, que le causan una terrible repulsión. Afortunadamente, también se encuentra con un caballo, con la capacidad de hablar, y que le cuenta cómo ellos conforman la raza de los Houyhnhnms, nombre que significa “naturaleza perdecta”. Por su parte, Gulliver descubre igualmente que los seres que le han asustado al principio son yahoo, los cuales noo son más que humanos salvajes.
Sintiéndose fascinado por la sociedad de los Houyhnhnms, Gulliver permanece entre ellos, queriendo aprender todo respecto a ellos. Sin embargo, los líderes de esta sociedad terminan por concluir que Gulliver no es uno de ellos, sino un yahoo, que aun cuando evolucionado, puede traer el fin de su civilización. De esta forma es expulsado, y obligado a regresar a casa.
Al llegar, Gulliver siente que no soporta estar entre humanos, pues no quiere ser parte de los yahoo. Es así como termina por aislarse del mundo, e incluso de su familia, dedicando horas a estar en compañía de sus caballos, con quienes prefiere hablar. En consecuencia, se concluye, que este viajero ha perdido la razón.
Imagen: Retrato de Jonathan Swift, autor de Los viajes de Gulliver / Fuente: wikimedia.org