El Pensante

Sufijo -dura

Idiomas y lenguaje - enero 8, 2018

Quizás lo mejor, antes de avanzar en una explicación sobre el sufijo –dura, sea revisar de forma breve algunas definiciones, que permitirán entender esta partícula morfológica, en su contexto lingüístico preciso.

Imagen 1. Sufijo -dura

Definiciones fundamentales

En este sentido, puede que sea necesario iniciar entonces con la propia definición de Sufijo, pues esto hará posible tener conciencia sobre la naturaleza del morfema –dura. Así mismo, será prudente pasar revista sobre el concepto de los sufijos verbalizantes, por ser esta la categoría de sufijos, en la cual puede ser incluida esta partícula. A continuación, cada uno de estos conceptos:

Los sufijos

En primera instancia, se podrá decir que los Sufijos han sido identificados de forma general por la Lingüística como aquellas partículas o morfemas tónicos, que se unen a la palabra o lexema, de forma posterior, creando con su anexión una nueva forma, la cual puede encontrarse impulsada por dos procesos morfológicos específicos, definidos a su vez de la siguiente manera:

  • Flexión: de esta manera, la Lingüística hablará en primer término de Flexión, cuando un morfema o sufijo se adhiera de forma posterior a un lexema, con el fin de crear algunas de las varias formas que una palabra puede tener, según responda a su contexto lingüístico, y los diferentes accidentes gramaticales que este plantea.
  • Derivación: por otro lado, la disciplina lingüística también señala que los sufijos desencadenan procesos derivativos. En este caso, estas partículas morfológicas se unirán de forma posterior a la palabra, con el objetivo de dar origen a una palabra totalmente nueva, así como plenamente independiente, según su semántica y gramaticalidad.

Por otro lado, la Lingüística también advierte que los sufijos pueden ser considerados uno de los cinco tipos de afijos que existen en las Lenguas naturales, por lo que se encontrará en el mismo grupo de los prefijos, infijos, interfijos y circunfijos, solo que se diferenciarán de ellos por ser los únicos con la capacidad de interferir directamente en la categoría gramatical de la palabra a la cual se une.

Sufijos nominalizantes

Así también, será necesario traer a capítulo la noción de sufijos nominalizantes como aquellos morfemas, de tipo tónico, que cumplen con la función derivativa, de anexarse de forma posterior a la palabra o lexema, para constituir una nueva palabra, que además de contar con independencia semántica y gramatical, puede ser clasificada, en este último ámbito, como un sustantivo. Por lo tanto, los sufijos nominalizantes serán los encargados en el Español de crear algunos sustantivos, a través de la Derivación.

No obstante, es importante señalar igualmente que los sustantivos creados a partir de la unión de un sufijo nominalizante no podrán englobarse en una misma categoría, sino que estos se diferenciarán entre sí, de acuerdo a la propia categoría gramatical de la palabra que le ha dado origen, distinguiéndose entonces entre sustantivos deverbales, deadjetivales y denominales, según provengan respectivamente de otro verbo, adjetivo o un sustantivo.

Sufijo –dura

Teniendo presente estas definiciones, es probable entonces que sea mucho más sencillo aproximarse a la definición del sufijo –dura, el cual será entendido entonces como una partícula morfológica, de tipo derivativo, que se unirá de forma posterior a los lexemas, con el fin de dar vida a nuevos sustantivos, los cuales además cuentan con la característica de ser sustantivos deverbales, puesto que provienen directamente de palabras clasificadas como verbos.

No obstante, en cuanto al sufijo –dura, este podrá ser entendido también desde los dos distintos tipos de sustantivos que ayudan a formar, y que son descritos por la Lingüística de la siguiente manera:

  • Sustantivos de acción: creados a raíz de verbos, por un proceso de Derivación, el sufijo –dura podrá conformar sustantivos que revieran a una acción específica, como por ejemplo en el caso de Mordedura, la cual proviene del verbo Morder, o también podrán indicar un resultado específico, en base a un verbo, como sucede por ejemplo con el verbo Quemar y su derivado Quemadura.
  • Sustantivos que indican objetos: por otro lado, el sufijo –dura también podrá adherirse a algunos verbos específicos, para crear sustantivos que sirvan para nombrar instrumentos o herramientas de utilidad, como por ejemplo ocurre con el verbo Cerrar, el cual conforma por derivación con el sufijo –dura, el sustantivo Cerradura.

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