En el ámbito biológico, la leche es definida sobre la secreción alimenticia producida por las glándulas mamarias de los animales mamíferos, y que tiene como objetivo servir de alimento inicial y principal a las crías durante los primero meses de vida, mientras sus sistemas digestivos maduran y están aptos para consumir otro tipo de alimentos.
Funciones nutricionales
En este sentido, la leche de los mamíferos cuenta entonces con la tarea principal de proporcionar nutrientes al nuevo miembro de la manada o de la familia, al tiempo que le suministra anticuerpos directamente desde la madre, así como elementos que protegen su sistema digestivo de posibles complicaciones o inflamaciones, hechos estos que explican por qué es tan importante para cualquier mamífero, incluido el ser humano, consumir leche de su madre durante los primeros meses de su vida.
A pesar de que todos los mamíferos luego de vivir el destete no vuelven a consumir leche en sus vidas, el desarrollo de la civilización humana ha permitido que cuando el niño ya no puede seguir consumiendo la leche de su progenitora, puede todavía seguir tomando su reemplazo, constituido por leche de distintas especies de animales de cría (vacas, cabras, ovejas, etc.) de las cuales se extrae este producto, destinado a complementar la alimentación del humano, pues hasta ahora se ha asumido que estos productos son una fuente inigualable de calcio, vitaminas y minerales.
Al respecto, es tal la fama que ha obtenido esta opción alimenticia, que en realidad en los países industrializados está recomendada como una de las bases de una alimentación balanceada y saludable, siendo los propios médicos los que recomiendan la toma de al menos un vaso de leche al día. Por el contrario, algunas corrientes nutricionales de las últimas décadas han comenzado a pronunciarse contra este producto, denunciando que no es tan bueno como se cree, sin embargo, mientras la discusión se desarrolla son miles de litros de leche los que se producen y consumen en el mundo, y no sólo en forma líquida, sino como queso, yogurt y demás productos lácteos.
Usos sorprendentes de la leche
No obstante, según algunas fuentes de economía doméstica las maravillas de la leche de vaca, que es la que más se consume en el mundo occidental industrializado, no se limitan solamente a sus propiedades nutricionales, sino que según algunos autores este blanco líquido puede venir también a convertirse en el aliado ideal de todo dueño de casa. A continuación, algunas de sus aplicaciones más sorprendentes:
Leche como quitamanchas
Probablemente una de las peores pesadillas de los encargados de lavar la ropa, sea el encontrarse con manchas definitivas como la tinta de bolígrafo, la de marcador, o alguna otra mancha que amenace con quedarse para siempre en esa hermosa prenda. Por fortuna, no todo parece estar perdido, pues hay fuentes de economía alternativa que aseguran que el remedio ideal para este tipo de sucesos es la leche. En este sentido, bastará con dejar la prenda manchada toda la noche en remojo en leche a temperatura ambiente, a fin de que las encimas de este producto actúen sobre la tela. A la mañana siguiente se lava con el método de costumbre y listo, la mancha quedará en el pasado.
Para limpiar el rostro
Las antiguas leyendas afirman que Cleopatra se bañaba en leche para mantener su piel joven. Ahora esto puede dejar de convertirse en un mito para hacerse realidad, sólo que a menor escala, y es que resulta que algunas fuentes aseguran que la leche puede resultar un efectivo desmaquillante, por lo que sólo falta empapar un algodón con este producto y pasarlo por la cara, para ver cómo se desprende el maquillaje de la piel. Lo mejor de esto es que además le proporcionará a la piel elasticidad, haciéndola lucir mucho más joven.
En caso de quemadura
A quién no le ha sucedido que un día de playa se convierte en una noche de dolor debido a las quemaduras solares. Para estos casos, y aun cuando lo ideal es proteger lo que más se pueda la piel de los rayos solares, si las quemaduras se han producido, una buena forma de aliviarlas –según algunas fuentes de salud alternativa- es la de aplicar sobre la piel afectada leche fría, puesto que ella cuenta con la posibilidad de crear una partícula proteínica sobre la piel, la cual ayuda a calmar rápidamente el dolor.
Contra el picor de boca
Así mismo puede pasar que en un intento por consumir comidas nuevas y exóticas se descubra que en realidad no se es muy tolerante cuando de picante se trata. Para estos casos, en los que incluso se puede presentar inflamación inmediata de la mucosa bucal, el remedio ideal, de acuerdo a lo que indican algunas fuentes, es la de tomar un vaso de leche fría, la cual contiene un componente llamado caseína, y que puede resultar el equivalente a un alivio inmediato en este tipo de casos.
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