El Pensante

Biografía de Enrique Anderson Imbert

Biografía - agosto 31, 2016

Enrique Anderson Imbert (Córdoba, Argentina, 12 de febrero de 1910 – Buenos Aires, Argentina, 6 de diciembre de 2000). Escritor, Crítico Literario, Ensayista y Crítico literario, de origen argentino, quien cuenta con gran prestigio en el mundo de las Letras latinomericanas.

Este escritor es tenido como uno de los autores fundamentales de la Literatura argentina y suramericana, en especial por sus numerosos cuentos breves, así como por su magistral ensayo Historia de la Literatura Hispanoamericana, el cual fue publicado en el año 1954, constituyéndose desde entonces como un texto esencial a la hora de aproximarse y pretenden abordar la literatura de esta región, a lo largo de su evolución en la historia.

Primeros años

Enrique Anderson Imbert nació el 12 de febrero de 1910, en Córdoba, Argentina. No obstante, desde muy pequeño vivió numerosas mudanzas con su familia, como por ejemplo el traslado a Buenos Aires, cuando apenas tenía cuatro años de edad, y donde permanecería por cuatro más, antes de emprender otro traslado, esta vez a La Plata. Sin embargo, la estadía en La Plata se extendió un poco más, llegando incluso a cursar su bachillerato en esta ciudad, específicamente en el Colegio Nacional Rafael Hernández. Una vez obtenido el título de bachiller, Enrique Anderson Imbert regresó a la capital argentina, matriculándose en la Universidad de Buenos Aires.

Carrera como catedrático

El año 1930 lo encuentra en otra provincia argentina: Mendoza, en donde se desarrolla como Profesor en la Universidad Nacional de Cuyo. Así mismo, diecisiete años después, sus biógrafos señalan que sus pasos lo habían llevado hasta la provincia de Tucumán, en donde servía dando clases en la Universidad Nacional de Tucumán. Durante esta época también destaca su trabajo como editor encargado de la sección literaria del periódico La Vanguardia, importante ventana socialista, referente en la vida política de la ciudad de Buenos Aires.

Carrera en las Letras

Sin embargo, la pasión por la Literatura que siempre le había acompañado, comenzó a exigirle explorar mayores profundidades. De esta forma, en el año 1931 se matriculó en la Facultad de Filosofía y Letras, en donde diez años después logró el título de Profesor en Letras, consiguiendo posteriormente, en 1945, el doctorado en la misma área. Después de haber obtenido su título, regresó a Mendoza, donde volvió a asumir su puesto como Profesor de la Universidad Nacional de Tucumán, sólo que esta vez a cargo de las cátedras de Literatura Hispanoamericana y Literatura Contemporánea. Igualmente, durante finales de la década del cuarenta, Enrique Anderson Imbert abandonaría Argentina rumbo a Estados Unidos, donde continuaría su formación intelectual, siendo el receptor de importante becas, como la Guggenheim, la cual obtuvo en el año 1943.

Así mismo, en el año 1947, logró una segunda beca, esta vez en la prestigiosa Universidad de Columbia. Durante los meses de este mismo año, Enrique Anderson Imbert encontró también la oportunidad de incorporarse como profesor en la Universidad de Michigan, recinto universitario en donde enseñaría por dieciocho años, hasta su retiro en 1965. Ese mismo año, este escritor y catedrático argentino logró recibirse en una Maestría en Artes en la Universidad de Harvard.

Reconocimientos

Igualmente, a partir de los años sesenta, la trayectoria de este intelectual argentino comenzó a ser objeto de múltiples reconocimientos, por parte de las instituciones con competencia en las Artes y las Letras. De esta forma, en el año 1967, Enrique Anderson Imbert ingresa como miembro de la Academia Americana de Artes y Ciencias. Casi una década después, en el año 1978, ese escritor sureño ingresa como miembro de la Academia Argentina de las Letras, lo cual representaba un verdadero honor para un hombre que había dedicado su vida en pleno al estudio de la palabra.

En consiguiente, entre el año 1980 y 1986, Anderson Imbert recibe también el honor de ejercer la vicepresidencia de la Academia Argentina de las Letras. Así también, el año 1994 marca un año de logros en la carrera de este escritor, puesto que su verbo le hace llegar a la posición de finalista en el reconocido premio internacional literario: el premio Cervantes. Así mismo, en llamado por la Universidad de Harvard, para integrarse como Profesor de Literatura Hispánica.

Años finales

A pesar de que los años lo llevaron a tomar la decisión de jubilarse de su actividad docente, Enrique Anderson Imbert nunca abandono su labor de investigador y escritor, impulsado por la profunda pasión que sentía hacia las Letras. Finalmente, en uno de sus muchos viajes a Buenos Aires, a donde volvía todos los años de vacaciones desde su residencia en Estados Unidos, Enrique Anderson Imbert falleció, dejando un inmenso vacío en las Letras Hispánicas, era 6 de diciembre de 2000.

Obra literaria

Con respecto a su obra literaria, ésta es señalada por sus críticos como extensa y variada, debiendo entonces analizarse su producción por género, a fin de lograr apreciar también la gran cantidad de facetas transitadas por la pluma de este gran intelectual de las Letras hispanas. En este sentido, entonces, la obra de Enrique Anderson Imbert sería la siguiente:

  • Novelas: entre ellas se encuentan Vigilia (1934); Fuga (1953); Evocación de sombras en la ciudad geométrica (1989); Amorío (1997); La buena forma de un crimen (1998); Historia de una Rosa y Génesis de una luna (1999).
  • Cuentos: así mismo, Enrique Anderson Imbert resalta como uno de los más importantes cuentistas hispanoamericanos. Sus cuentos serían: El mentir de las estrellas (1940); Las pruebas del caos (1946); El grimorio (1961); Vigilia. Fuga (1963); El gato de Cheshire (1965); La sandía y otros cuentos (1969); La locura juega al ajedrez (1971); La botella de Klein (1975); Victoria (1977); Dos mujeres y un Julián (1982); El tamaño de las brujas (1986); El anillo de Mozart (1990); ¡Y pensar que hace diez años! (1994); Reloj de arena (1995); Consenso de dos (2000).
  • Antologías: igualmente, este autor argentino destaca como un prolífico autor de cuentos breves, los cuales han sido recogidos en célebres antologías, entre las que destacan:  El leve Pedro (1976); Cuentos en miniatura (1976); El milagro y otros cuentos (1985); Páginas de Enrique Anderson Imbert seleccionadas por el autor (1985); Cuentos selectos (1999); Cuentos escogidos (s/f) y Tabú (s/f).
  • Ensayos de Crítica Literaria: finalmente, la carrera de este intelectual argentino también lo llevó a interesarse y desarrollar toda una trayectoria como ensayista, cuyo principal objeto de estudio eran las Letras hispánicas. Sus obras en este género son: La flecha en el aire (1937); Tres novelas de Payró con pícaros en tres miras (1942); Ibsen y su tiempo (1946); Ensayos (1946); El arte de la prosa en Juan Montalvo (1948); Estudios sobre escritores de América (1954); Historia de la literatura hispanoamericana (1954); La crítica literaria contemporánea (1957); Los grandes libros de Occidente y otros ensayos (1957); Los domingos del profesor (1965); La originalidad de Rubén Darío (1967); Genio y figura de Sarmiento (1967); Una aventura amorosa de Sarmiento (1969); Estudios sobre letras hispánicas (1974); El realismo mágico y otros ensayos (1976); Las comedias de Bernard Shaw (1976); Los primeros cuentos del mundo (1977); Teoría y técnica del cuento (1979); La prosa: modalidades y usos (1984); Nuevos estudios sobre letras hispanas (1986); Mentiras y mentirosos en el mundo de las letras (1992); Modernidad y posmodernidad (1997); Escritor, texto, lector (publicado póstumamente en el año 2001).

Imagen: wikipedia.org