Conocido por muchos pese a que han pasado ya más de 40 años desde su muerte, el fantasma de Bruce Lee sigue inspirando a millones de personas alrededor del mundo. Amado e idolatrado por sus compatriotas chinos, tuvo una maratónica carrera en el cine norteamericano antes de su trágica muerte, acaecida el 20 de julio de 1973 cuando apenas tenía 32 años.
De acuerdo con las autoridades de los Estados Unidos, Bruce Lee murió por causas naturales. Sin embargo, la importancia de su presencia, la fuerza de su mismo nombre, llevan a muchos a creer que hubo cosas que jamás se dijeron con respecto a este trágico evento. Hoy hablaremos sobre la muerte de Bruce Lee, pero antes de ello tenemos que ver un poco de la vida de la leyenda:
La juventud de Bruce
Quien sería conocido como El Último Dragón nació el 27 de noviembre de 1940 en San Francisco (Estados Unidos) mientras su padre se encontraba en una gira de la Ópera Chino Cantonesa. Nació en el año del dragón y en la hora del dragón: entre las 5 y las 8 de la mañana: sus padres vivieron con él en San Francisco antes de mudarse de nuevo a Hong Kong cuando él tenía un año de edad.
En su niñez y juventud, Bruce comenzó a relacionarse mucho con las pandillas de aquella ciudad, que solían andar en grupos y armadas con navajas, cadenas y armas contundentes. Se cuenta que Bruce comenzó a pensar qué sucedería si un día se encontrara sin sus compañeros o dichos objetos y por ello comenzó a pensar en estudiar artes marciales.
Fue su propio padre, Lee Hoy-chuen, quien le educó, con la esperanza de que las artes marciales lo llevaran a abandonar los malos caminos. Bajo su instrucción aprendería las bases del tai chi chuan, que luego profundizaría con el entrenamiento de su amigo William Cheung. Sería él quien lo llevara a visitar al mítico maestro Yip Man (también conocido como Ip Man).
La academia de Yip Man
Se cuenta que en su primera visita a la Academia Bruce no presentó la actitud respetuosa que, se supone, debería guardar un joven que piensa aprender del maestro. A consecuencia de ello, Yip Man decidió expulsarlo y un arrepentido Bruce tuvo que volver al día siguiente de manera respetuosa y educada. Yip Man entonces decidió concederle una segunda oportunidad.
El joven estudió 3 o 4 años en la academia antes de marcharse a los Estados Unidos, a sus 18 años, presionado por su padre que temía que se uniera a las crecientes mafias chinas. En Estados Unidos reclamó la nacionalidad y tras un breve periodo de trabajo itinerante comenzó a dar clases de artes marciales.
La vida en Estados Unidos
Pronto ganó fama. Su talento en el combate era impresionante: tuvo pocas confrontaciones (pues parecía no gustar de la violencia luego de su juventud entre las pandillas) todas de las cuales terminaron con una fácil victoria de Bruce. Además de enseñar, Bruce estudió Filosofía en la Universidad de Seattle y poco después empezó su carrera en Hollywood.
Había algo en la vida de Bruce que parecía llevarlo inexorablemente hacia el séptimo arte. Su primera actuación había sido cuando tenía apenas dos meses de nacido, y en su infancia trabajó en varios papeles gracias a la influencia y el trabajo de su padre. En Estados Unidos, sin embargo, su entrada a Hollywood se debió ante todo a tener buenos contactos y a su innegable talento en las artes marciales que lo convirtió pronto en una leyenda del cine de acción.
Su primera película (The Big Boss), filmada en Hong Kong (tras la participación de Bruce en algunas series en Estados Unidos) lo convirtió en una leyenda entre los chinos de Hong Kong que llegaron a considerarlo un héroe nacional. Fists of Fury, su segunda película (filmada en los Estados Unidos) superó toda expectativa y convirtió a Bruce en una leyenda de las artes marciales.
Su carrera terminaría pronto a causa de la misteriosa muerte que sufriría el 20 de julio de 1973. Las causas todavía se desconocen y muchos consideran que las circunstancias fueron bastante sospechosas:
La muerte de Bruce Lee
La tarde de aquel fatídico 20 de julio Bruce se dirigió a la casa de la actriz china Betty Ting Pei, en donde se iba a encontrar con el productor Raymond Chow. De acuerdo con Ting Pei (única testigo del suceso) comenzó a quejarse súbitamente de un tremendo dolor de cabeza que lo obligó a acostarse en la cama. La mujer buscó algunos analgésicos, pero consumirlos solo consiguió sumirlo en la inconsciencia, de la cual jamás habría de salir. De inmediato fue trasladado a un Hospital al que ingresó sin signos vitales.
La historia indica una posible aneurisma, aunque esto parece haber sido descartado por los médicos. Otras hipótesis indican complicaciones relacionadas con la epilepsia o a una súbita alergia a los fármacos. Sin embargo, algunos consideran que se trató de un asesinato.
Todo comenzó cuando el parte de los médicos indicó que se debía a complicaciones con los fármacos, tras lo que el médico personal de Bruce afirmó que ese no podía ser el caso ya que él jamás había mostrado reacciones adversas. Se evaluaron nuevas hipótesis, pero entre el público quedó un dejo de desconfianza. ¿Qué había matado realmente a Bruce Lee?
Pronto empezaron a surgir teorías. Enemigos ocultos del Último Dragón comenzaron a aparecer, uno tras otro. Historias comenzaron a hilvanarse a partir de retazos. Sobre ellas hablaremos en el próximo episodio.
Parte 2
Fuente de imágenes: 1: mayantravel.net, 2: upload.wikimedia.org, 3: im.ziffdavisinternational.com