Definición de Recuento Histórico
De acuerdo a las distintas fuentes consultadas, se puede definir como Recuento Histórico a aquella narración, que busca contar eventos pasados, de forma cronológica, es decir, desde el acontecimiento que dio pie al suceso narrado hasta el final o conclusión de éste.
Característica del Recuento Histórico
Así mismo, algunos literatos se han dado a la tarea de clasificar y describir algunos de los principales rasgos, inherentes a este tipo de estructura narrativa, a fin de que el común de los lectores cuenten con las herramientas necesarias, que les permitan identificar un Recuento Histórico, así como para escribir uno, llegado el momento. En este sentido se pueden considerar que las características fundamentales de un Recuento Histórico son las siguientes:
- El Recuento Histórico se caracteriza por ser una narración destinada a dar cuenta de los sucesos que ha vivido en el pasado una comunidad.
- Así mismo, este tipo de textos se distingue por contar dentro de su narración con descripciones y reflexiones sobre el suceso del que da cuenta.
- Igualmente su narración es de tipo cronológico, es decir, que ofrece al lector un inventario histórico de hechos, sobre un momento de la historia de un pueblo.
- Al ser de carácter histórico, este tipo de narraciones incluye fechas, nombres propios y ubicaciones geográficas verdaderas, que puedan servir al lector para entender el contexto histórico y geográfico de los hechos, así como los personajes que intervinieron en él.
- Por lo general la voz del narrador asume un rol expositivo, a fin de mostrar al lector la generalidad de la sucesión de momentos.
- También se puede decir que se trata de una narración en prosa, que debe seguir un orden cronológico y lineal, colocando los hechos en la misma sucesión en la que ocurrieron. De esta forma un Recuento Histórico no puede de ninguna manera usar tiempos retrospección o prospección dentro de la narración.
- Tiene como objetivo enseñar a otros los hechos e importancia de un acontecimiento influyente en la historia de una comunidad específica.
- Dentro de su estructura puede contener también anécdotas, registros testimoniales de los involucrados, e incluso distintas versiones sobre el hecho citado.
- De igual forma, un Recuento Histórico puede contener los análisis hechos a los distintos eventos involucrados en el hecho.
- Como estructura narrativa al fin cuenta con tres partes esenciales: Introducción, donde el narrador cuenta, incluyendo fechas, protagonistas y lugares, el hecho que contará el Recuento Histórico; en segundo lugar un Recuento Histórico posee un Desarrollo, en el cual el narrador se extiende contando los hechos que acaecieron respecto a la historia que se cuenta, en ella debe incluir igualmente fechas, lugares, nombres y acciones en perfecto orden cronológico y lineal. Finalmente, el Recuento Histórico tiene en su estructura la Conclusión, parte donde se cuenta el desenlace del hecho al que se hace referencia, y en donde el autor puede incluso también señalar algunas de las consecuencias inmediatas del suceso histórico, del cual se quiere hacer memoria, a fin de explicárselo a otros.
Ejemplo de un Recuento Histórico
Vistas las características a las que debería responder un Recuento Histórico, resulta pertinente exponer un ejemplo de cómo sería un texto, circunscrito en esta categoría o género. A continuación, entonces, un ejemplo de Recuento Histórico:
Se conoce como “Descubrimiento de América” al momento histórico en el cual Cristóbal Colón, en nombre de los Reyes Católicos de España y en compañía de su tripulación, avizoró la costa del continente americano, convirtiéndose en el primer europeo en transitar una ruta marítima hacia América.
De acuerdo a lo que refieren las fuentes históricas, Colón zarpó del Puerto de Palos, el 3 de agosto de 1492, como capitán de tres embarcaciones: la Niña, la Pinta y la Santa María, las cuales contaban con ciento veinte hombres a bordo, quienes no se sentían muy seguros de realizar el viaje, pues en ese momento se creía que el mundo era cuadrado y quien traspasara sus límites, simplemente caería en un abismo.
Luego de dos meses y ocho días de navegación, y a punto de que estallara un botín dentro de la tripulación, la cual insistía en regresar, finalmente, el 12 de octubre de 1492, Francisco de Triana divisó Tierra: Colón y sus hombres habían descubierto el Nuevo Mundo, aun cuando en ese momento todavía estaban convencido de haber llegado a las Indias, a través de una nueva ruta.
La primera tierra americana, donde Colón puso un pie fue una isla del archipiélago de las Bahamas, conocida por los habitantes originarios como Guanahaní, y que el almirante llamaría San Salvador. Después vendrían nuevos viajes y tierras: durante este primer viaje, Colón visitaría también los territorios pertenecientes a la actual Cuba y Haití. En su segundo viaje, en 1493, Colón llegó a Jamaica y recorrió nuevamente Cuba. Para su tercer viaje, en 1498, Colón decidió ir más allá, logrando entonces llegar a tierra latinoamericanas, específicamente Venezuela, donde visitó las islas de Coche, Cubagua y Margarita, así como la ribera del Orinoco. Finalmente, su cuarto viaje, realizado después de 1500, Colón llegó a visitar lo que actualmente se conoce como Centro América.
No obstante, aunque la mayoría reconoce el alcance de la hazaña de Cristóbal Colón, por atreverse a realizar un viaje, que a pesar de haber sido realizado con anterioridad por los Vikingos, ningún español había tenido la iniciativa, sí existe un profundo debate sobre el nombre histórico de los distintos viajes del almirante a la actual América. En este sentido, los detractores del nombre “Descubrimiento” se basan en que las tierras americanas contaban con civilizaciones al momento de la llegada de los europeos. De esta forma, algunos afirman incluso que si hubo un descubrimiento en América en 1492 fue el hecho por los habitantes originarios de estas tierras al encontrar a Colón y su tripulación perdidos en el mar.
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