Casi nadie puede resistirse a un rico y condimentado plato de comida, pero no todos sabemos cómo aprovechar al máximo el rico sabor de las especies. De esta manera, la mayoría de las despensas viven llenas de frasquitos de ricas especies a las que casi nadie les da el uso adecuado para proveer nuestras mesas de aromatizados y sabrosos manjares. Por suerte, a partir de ahora sabrás cómo, en qué alimento y cuál es el momento indicado para agregar una especie determinada.
En esta ocasión queremos ofrecerte una práctica lista de siete especias, para que sepas cómo, dónde y cuándo usarlas, para la preparación de tus platos preferidos, a fin de que consientas a tu paladar y al de tus comensales. Recuerda también que es muy importante que estés segura de que ni tú ni ninguno de tus invitados son alérgicos a las especies empleadas. Para esto consulta a un médico antes de incorporar a tu cocina alguna especie nueva de cuya inocuidad sobre ti y los tuyos aún no esté demostrada.
A continuación una breve y práctica lista que cambiará para siempre tu manera de cocinar:
Albahaca: constituida por las hojas de la mata de la albahaca dota a tus alimentos de gran frescura y sabor. Es ideal para darle un toque diferente a tus recetas de huevos, sean revueltos o en tortilla. Igualmente enriquece el sabor de tus salsas para pasta, siendo la base principal de la salsa al pesto. Puedes consumirla también cruda en ensaladas, donde es compañera por excelencia del tomate. Es importante que sepas que si la vas a cosechar tú mismo no debes cortar las hojas con una tijera, sino que debes arrancarlas con las manos. Así mismo debes saber que el momento ideal para agregar albahaca a tus especies es hacia el final de la cocción, a fin de que se conserve lo más posible su sabor y aroma. También debes tener presente que no acepta congelación.
Comino: el comino es una especie conformada por pequeñas semillas marrones, las cuales pueden ser consumidas enteras o molidas. Es ideal para darle sabor a tus carnes rojas y blancas, en especial al pescado. Resiste grandes niveles de calor, por lo que puede estar presente en tus alimentos desde el principio, un buen truco es calentar un poco de aceite vegetal y agregar el comino hasta que se sofría liberando su sabor. También está recomendado para salsas, arroces, ensaladas, así como para platos dulces, donde su sabor se adapta igualmente de manera deliciosa.
Pimienta: se pueden encontrar, sea entera o molida, tres tipos de pimienta: blanca, verde y negra. Esta especie es un gran potenciador de sabores, por lo que agregarlo a tus platos subrayará el sabor de tus platillos. De acuerdo a la tradición, la pimienta blanca se la lleva de maravilla con mariscos y salsas como la bechamel, mientras que la verde y la negra van mejor con carnes rojas, salsas y pastas. Incluso se usa en repostería para potenciar el sabor del chocolate. La puedes usar tanto al principio de tu cocción, también calentando un poco de pimienta en un poco de aceite para que libere su sabor, o en medio de tu preparación. Igualmente, existen personas que gustan de agregar pimienta a sus platos justo antes de consumirlos.
Tomillo: esta especie se encuentra constituida por pequeñas hojas, las cuales puedes consumir secas o frescas. Es un compañero inseparable del romero, con quien hace una dupla excelente en tus platos. Sus características aromáticas y grasas lo hacen ideal para sazonar tus carnes rojas y blancas (pollos, codornices, pavos). Puedes agregarla también desde el principio de tu cocción.
Romero: especie constituida también por hojas, las cuales impregnarán tus comidas de un aroma similar a las hojas de pino. Puedes agregarlas picada o enteras a tus platos. Se usa principalmente par aderezar carnes, quesos, aceites y vinos. Si te provoca puedes agregar a tu aceite de oliva una rama de romero, a fin de darle un toque divertido a tus preparaciones. Es ideal para la carne de cordero, y es un compañero inseparable del tomillo.
Laurel: considerada por muchos chefs como una de las especies básicas de la cocina, está constituida por unas hojas de color verde olivo, que puedes consumir de manera fresca o seca. Es ideal para aromatizar y saborizar preparaciones a base de pescados y mariscos, siendo imprescindibles para la preparación de paellas y caldos de pescados. No obstante también se le agrega a las pastas, así como a otras carnes rojas y blancas. Debes agregarlo al principio de las cocción, a fin de que libere todo su sabor desde el primer momento.
Perejil: conformada por hojas de color verde, puede consumirse fresco o seco. No obstante puede conservarse congelado hasta por seis meses, solo hace falta que lo laves, lo piques y lo empaques en bolsas plásticas. Tiene la propiedad de dotar a tus platos de un delicado sabor, es ingrediente imprescindible de platos como vinagretas, salsa verde, así como un excelente adobo de pescados y carnes rojas. Igualmente le puede dar un rico toque a tus tortillas y guisos. Así mismo lo puedes consumir crudo en ensaladas, combinado con tomate, trigo hidratado y limón constituirá un sabroso y fresco tabule.
Fuente de imagen: guiadecocina.net