Este artículo sólo tiene como finalidad dejar claro los conceptos para referirnos a la vida fuera de nuestro planeta Tierra, pues he notado con mucha frecuencia que todavía se cometen errores crasos al utilizar todavia la palabra marciano. Veamos:

Es correcto llamarte extraterrestre a todo aquello que sea fuera del planeta Tierra, bien sea vida o rocas, etc. Sin embargo, también son válidos los términos: extraterrícola, ultraterrícola, ultraterráqueo, o ultraterrestre.

Dado que la industria nos ha vendido una imagen elaborada de los extraterrestres y, dado que es posible que nosotros al escuchar la palabra extraterestre nos formemos un concepto determinado en la mente, sería preferible hacer uso de cualquiera de los tres términos ya mencionados. En lo personal prefiero la palabra ultraterrestre, «vida ultraterrestre», «seres ultraterrestres», etc.

Pero ¿qué hay de los marcianos? La palabra marciano se debe utilizar sólo para referirse a vida o elementos del planeta Marte. Por ejemplo: «los elementos marcianos», «la superficie marciana», etc.

Pero veámoslo mejor por planetas:

Luna: lunar, o lunático/a
Mercurio: mercuriano/a
Venus: venusino/a
Sol: solar
Marte: marciano/a
Júpiter: jupiteriano/a
Saturno: saturnino/a
Urano: uraniano/a
Neptuno: neptuniano/a
Plutón: plutoniano/a

Como vemos, es incorrecto denominarles marcianos a todos los elementos extraterrestres, pues no tenemos evidencia que su procedencia sea de Marte. En ese orden de ideas, es tanto como que alguien de las «Pléyades» nos dijera a nosotros «marcianos», cuando realmente somos «terrestres», o «seres terrestres.

Pero veámoslo de otro modo. Si nosotros vivieramos en el sol deberíamos denominar a todo lo que existe fuera del sol, o que procede de fuera del sol así: extrasolar. Y si vivieramos en júpiter: extrajupiteriano. Y así sucesivamente… extravenusino, extramarciano, etc. Con esto queda en claro el por qué de ambas palabras.