El Pensante

Cuando un ejército se atacó a sí mismo: la batalla de Karánsebes

Historia - octubre 6, 2017

Imagen 1. Cuando un ejército se atacó a sí mismo: la batalla de Karánsebes

Austria vs el Imperio Otomano

El Imperio Otomano fue una poderosa entidad política con centro en Turquía que en su momento sembró terror en toda Europa. Tras la conquista de Constantinopla (que luego se convertiría en Estambul), en 1453, parecía que nada podía detener a los otomanos, que siguieron extendiéndose por los Balcanes amenazando a la misma monarquía austríaca.

Sin embargo, los reinos cristianos de Europa Central (particularmente Austria, Polonia, y otros pequeños estados en los Balcanes como Moldavia) resistieron el avance otomano y con el paso del tiempo el impulso de este poderoso imperio comenzó a perderse. Para los 1700’s, el Imperio Otomano ya no era la temible potencia de antes, era a lo sumo un poder regional.

Pero aún decadente, su poder no debía subestimarse. En 1788 los Otomanos marcharon a la guerra: Rusia, aliada con Austria, sería su enemiga.

Y así comenzó la Guerra Austríaco-Turca de 1788.

La batalla de Karánsebes

Los motivos de la guerra no están del todo claros (y es probable que, en su momento, tampoco estuviesen tan claros). Lo importante aquí es que Austria no pasaba por un buen momento y haberse involucrado en este conflicto era bastante complejo para la monarquía. Por esta razón, una victoria contundente era fundamental.

Y así, el ejército austríaco marchó a la ciudad de Karánsebes, en la actual Rumania, donde se esperaba que los otomanos atacarían. El ejército, que contaba con unos 100.000 hombres, traía personas de muchas de las regiones del imperio: serbios, croatas, austriacos, alemanes. Esto hacía difícil la comunicación y por lo tanto convertía cualquier movimiento de emergencia en un potencial peligro para los austríacos.

Imagen 2. Cuando un ejército se atacó a sí mismo: la batalla de Karánsebes

Húsares y alcohol

En cualquier caso, el ejército se encontraba en la ciudad cuando un grupo de húsares (esto es, soldados montados muy temidos en este periodo) se encontró con una caravana de gitanos. Los gitanos, cómo no, tenían algo de alcohol que vendieron a los soldados a precios inflados; estos procedieron a embriagarse a más no poder…

Y ya anocheciendo llegaron otros soldados de infantería. Querían un poco de licor, pero los húsares se negaron a dárselo. Comenzaron los conflictos y peleas, puños por aquí, cuchillos por allá. La situación escaló y en algún momento uno de los hombres disparó su arma.

Y entonces un soldado asustado gritó “¡Vienen los Turcos!”.

Hasta ahí llegó el orden en el campamento. Soldados de todos los regimientos se pusieron de pie con el objetivo de atacar a los invasores sin saber dónde se encontraban. Unas divisiones se enfrentaron con otras, los húsares fueron atacados por otros grupos de infantería y el campamento se volvió un completo caos.

Miles de soldados optaron por la huida, disparándole a toda sombra que se cruzara en su camino, convencidos de que se trataba de los otomanos. Como si fuera poco, cuando los generales alemanes intentaban dar la orden de alto (Halt! Halt!) muchos soldados creyeron que gritaban Allah! Allah!, incrementando el terror y la confusión.

Huelga decir que los otomanos no habían llegado. Y cuando efectivamente lo hicieron, dos días más tarde, se encontraron con un campo plagado de muertos (las cifras varían entre 1.200 y 10.000), un ejército en retirada y un montón de armas en el campo. Tomaron con facilidad Karánsebes y dejaron en vergüenza al ejército austríaco.

Bibliografía:

  1. https://www.worldatlas.com/articles/did-you-know-the-austrian-army-defeated-itself-in-the-1788-battle-of-karansebes.html
  2. https://www.todayifoundout.com/index.php/2014/04/battle-karansebes/

Imágenes: 1: bellumartis.blogspot.com.co, 2: ojoscuriosos.com