El Pensante

Derivación regresiva

Idiomas y lenguaje - noviembre 21, 2017

Quizás la forma más idónea de abarcar una explicación sobre la Derivación regresiva sea revisando de forma breve algunos conceptos, que permitirán entender esta definición dentro de su contexto lingüístico idóneo.

Imagen 1. Derivación regresiva

Definiciones fundamentales

En este sentido, puede que también sea prudente limitar esta revisión a dos nociones fundamentales. En primer lugar, se traerá a capítulo la definición de Afijos, por ser las estructuras lingüísticas involucradas en la Derivación regresiva. En segunda instancia, se deberá pasar revista sobre el propio concepto de Derivación, pues este resultará también indispensable para comprender la naturaleza del proceso lingüístico conocido como Derivación regresiva. A continuación, cada una de estas nociones:

Afijos

Por consiguiente, se comenzará por decir que la Lingüística ha definido de forma general a los Afijos como estructuras o secuencias lingüísticas que cumplen con la función de insertarse en algún momento de la palabra, a fin de formar una nueva palabra, o incluso solo señalar cuáles son los accidentes gramaticales que esta palabra posee.

Sin embargo, la Lingüística también señala que existen varios tipos de afijos, cuya principal diferencia será el lugar de la palabra en donde se insertan. A continuación, una breve definición de cada uno de ellos:

  • Prefijos: se unirán a la palabra o lexema de forma anterior. Son conocidos como estructuras átonas, y no tienen la capacidad de causar cambios en la categoría gramatical a la cual pertenece la palabra a la que se unen.
  • Sufijos: por su parte, los sufijos son entendidos como aquellas estructuras lingüísticas que se insertan en la palabra de forma posterior. A diferencia de los prefijos, son secuencias tónicas, y sí cuentan con la propiedad de afectar la categoría gramatical de la palabra a la que se unen.
  • Interfijos: en tercer lugar, los interfijos se insertarán en algún lugar de la palabra, justo entre el lexema y el afijo con el cual se ha unido. Como los prefijos, son también secuencias átonas.
  • Infijos: con respecto a los infijos, estos son descritos como estructuras que se insertan en medio del lexema, separándolo o partiéndolo en dos. En el Español, son bastante atípicos.
  • Circunfijos: finalmente, se habla de circunfijos cuando una palabra presenta afijación simultánea. Esta situación tiende a ser también bastante extraña en las Lenguas naturales.

Derivación

En otro orden de ideas, la Derivación ha sido explicada por las distintas fuentes como un proceso lingüístico en donde un lexema o palabra se une a un afijo, formando una nueva palabra, que se caracteriza por contar con una independencia semántica, es decir que tiene su propio significado, pese a que mantiene relación semántica con la palabra que le ha servido de origen. En las Lenguas naturales, según señala la Lingüística, la Derivación es el procedimiento por medio del cual se producen mayor cantidad de nuevas palabras, por lo que entonces es entendida también como la fuente más importante de productividad lingüística de los hablantes.

Derivación regresiva

Teniendo presente estas definiciones, puede entonces que ciertamente sea mucho más sencillo entender lo que sucede en la Derivación regresiva, la cual es explicada de forma general como el procedimiento lingüístico en donde a una palabra, conformada por un lexema y un afijo, se le suprime esta última partícula, dando como producto una nueva palabra, de ahí que se llame Derivación regresiva, puesto que en lugar de sumar un afijo al lexema, le es retirado.

Ejemplos de Derivación regresiva

En cuanto a los ejemplos concretos que pueden existir sobre la Derivación regresiva, la mayoría de las fuentes coinciden en señalar que este tipo de Derivación es frecuente en los sustantivos deverbales, es decir, cuando en la Lengua se producen sustantivos en base a otros verbos.

Así mismo, la Real Academia Española de la Lengua señala que por lo general los afijos que son suprimidos en este proceso específico están constituidos por sufijos, que pueden ser identificados como posverbales, por ejemplo: a, e, o. Algunos ejemplos de Derivación regresiva en el Español serían los siguientes:

Caminar (verbo) → Caminante (sustantivo)
Cortar (verbo) → Corte (sustantivo)
Cantar (verbo) → Cantata (sustantivo)
Legislar (verbo) → Legislador (sustantivo)
Debatir (verbo) → Debate (sustantivo)

Imagen: pixabay.com