Cuando observamos el planeta tierra, este surge como una gran esfera azul, que pareciera una fuente grandiosa de agua. Sin embargo, a veces olvidamos el hecho de que sólo el tres por ciento de esa agua es dulce. Aunado a esto, del total del agua dulce, sólo el cuatro por ciento está disponible en ríos y cursos de agua accesibles. Por lo que cuidarla es vital para nuestra sobrevivencia, ya que sin agua moriríamos.
En esta ocasión ofrecemos algunos tips y recomendaciones sobre el uso y cuidados que deben tenerse con el agua potable, es decir el agua que llega a nuestras casa, a fin de colaborar con el ahorro de este recurso esencial para el desarrollo y sostenimiento de nosotros como humanidad, ya que si llegarán a contaminarse todos los cursos de agua, el humano quedaría sin posibilidad de cultivar, criar animales e hidratarse, pereciendo sin ningún tipo de alternativa.
En tu casa u oficina
Lo primero que debes hacer en tu lugar de residencia o trabajo es verificar que todas las llaves y tubos, que se encargan de llevar agua a tu hogar, estén en perfecto estado, sin que ninguna gotee. A lo mejor te parecerá que una pequeña gota no hace la diferencia, pero debes tener presente que esa gota cae durante horas y días, sumando litros de agua, que simplemente se desperdician. Por lo que es necesario cada cierto tiempo revisar y hacerle mantenimiento a estas instalaciones, sustituir las gomas de las llaves y colocar teflón en las conexiones.
Igualmente, trata de lavar el patio o el frente de tu casa con tobos de agua, y no con manguera. Ya que si bien es mucho más rápido usar la presión del agua, también es cierto que en este tipo de tarea puedes desperdiciar cientos de litros de agua. Procura también lavar tu carro o moto con baldes de agua, evitando usar las mangueras. Así mismo es importante que te mentalices a no dejar llaves de agua ni abiertas ni sin reparar. Otra forma en la que puedes ahorrar agua es construir un tanque abierto, a fin de recoger agua de lluvia, que puedes emplear para tareas específicas como limpiar o regar las matas.
En la cocina
Este puede ser uno de los sitios donde más tendemos a desperdiciar agua, por lo que es importante que sigas algunos consejos, a fin de procurar el ahorro de este líquido. Por ejemplo, es importante que una vez que retires los platos de la mesa, procures limpiarlos primero con ayuda de un trapito, para que así sea más fácil de lavar. Igualmente es recomendable enjabonar primero todos los platos. Una vez enjabonados y metidos en el lavaplatos, sí se puede abrir la llave y comenzar a enjuagarlos, cosa de que el agua que va cayendo vaya enjuagando también los otros platos.
También es importante que no desperdicies el agua con el que cocinas. Por ejemplo, si has hervido algunas verduras o carne, puedes aprovechar ese caldo para hacer arroz o como base para otras preparaciones como sopas. También es imprescindible que no arrojes aceites vegetales por el fregadero, ya que estos pueden llegar al océano, contaminando miles de litros de agua, y colocando en riesgo directo a la fauna y flora acuática. La mejor manera de deshacerte de ese aceite usado es colocarlo en una botella de vidrio y después procurarte un sitio para enterrarla.
En el baño
Otro de los sitios donde más puede llegarse a desperdiciar agua. En este sentido es importante que conviertas en un hábito el hecho de cerrar la llave mientras te cepillas los dientes o te afeitas, pues mientras el cepillo se encuentra en tus dientes o la rasuradora se encuentra en tu piel no es necesario que la llave esté abierta, dejando correr el agua. Igualmente, trata de tomar duchas cortas, las cuales pueden durar perfectamente entre tres y cinco minutos. Así mismo cierra la llave mientras te enjabonas o lavas tu cabeza con champú. Ábrela sólo cuando te vayas a enjuagar.
Así mismo puede adquirir el hábito de recoger en un balde o tobo esa agua que dejas correr mientras esperas que la ducha tome la temperatura que te resulte agradable. Puedes usarla después para bajar el inodoro o regar las plantas, lo cual se traducirá también en un gesto hacia el planeta y la conservación de nuestra especie.
Procura también, en medio de tus posibilidades, sustituir la cisterna de tu inodoro por una de menor capacidad, lo cual se traducirá en un ahorro de agua cada vez que bajes la cadena. Si te resulta imposible, una forma económica de hacerlo es colocar dos botellas de dos litros, llenas de agua en el fondo de la cisterna. El volumen de estas impedirá que esta se llene completamente, ahorrando unos cuantos litros del vital líquido.
Es importante también que tengas cuidado de no arrojar por el inodoro toallas de papel o alguna sustancia contaminante como aceite, ácido o gasolina, ya que también podrían llegar hasta otras fuentes de aguas oceánicas, contaminándolas y comprometiendo la vida de los animales y plantas que en él habiten. De igual forma, tanto para el lavado de tu ropa, tu carro, tu patio, tu casa y tu baño procura implementar el uso de jabones y productos que sean amables con el planeta y su medio ambiente. De esta manera estarás contribuyendo con el planeta.
Fuente de imagen: inteligenciapetrolera.com