Una de las grandes preocupaciones de las mamás o de aquellos que quieren cuidar su salud es qué opciones de comidas sanas podemos incorporar a nuestro menú diario. En esta ocasión ofreceremos dos ricos platos que puedes preparar para tus meriendas a media tarde o por qué no para una cena nutritiva y balanceada.
Moldecitos de Hígado
Estos ricos moldecitos de hígado te ofrecen una rica y original opción, tanto para los niños de la casa como para los adultos, además de ser estéticamente bastante atractivos. Para su preparación necesitarás los siguientes ingredientes: una (1) taza de agua caliente / dos (2) panecitos de banquete / cuatrocientos (400) gramos de hígado de ternera / cincuenta (50) gramos de mantequilla / cuatro (4) huevos / dos (2) cucharadas de perejil, el cual debes picar finamente / una (1) cucharadita rasa de polvo páprica / media (1/2) cucharadita de sal / una (1) cucharada de migas de pan blanco.
Igualmente necesitarás los siguientes elementos: un (1) bol profundo / una (1) licuadora, procesador de alimentos o un (1) molino para carne / un (1) tenedor / cuatro (4) moldecitos o pocillos de cerámica / una (1) olla grande / una (1) olla pequeña / un (1) plato grande precalentado. Una vez que hayas reunido todos los ingredientes procederemos con la preparación, para lo cual comenzaremos por remojar en agua caliente los panecillos, una vez que hayan absorbido completamente la humedad, debemos entonces exprimirlos, a fin de sacar de ellos la mayor cantidad posible de agua.
Igualmente, deberás agarrar el hígado de ternera y quitar de él la delgada tela transparente que lo cubre, una vez hayas hecho esto, con la ayuda de un molino de carne o un procesador de alimentos (aunque también puedes usar la licuadora) procederás entonces a moler el hígado de tu receta, aunque también tienes la opción de pedirle al carnicero que te ayude con ese paso, a fin de que te entregue la carne tal y como la necesitas.
Aparte en un bol, coloca la carne de hígado molida e incorpora la mantequilla. Así mismo, ve agregándole uno a uno los huevos, mientras bates la mezcla con un tenedor. Cuando tengas una masa lo más homogénea posible, agrega los panecitos que has remojado en agua caliente con anterioridad, así como el perejil y la páprica. Sigue batiendo vigorosamente hasta obtener una masa con textura y lo más compacta posible.
Engrasa con mantequilla tus moldecitos o pocillos de cerámica. Procede entonces a cubrir el fondo de cada uno de ellos con las migas de pan. Cuando estén listos, llena tus moldecitos con la masa del hígado de ternera que preparaste. Coloca una olla grande al fuego con un poco de agua en su interior. Dentro de ella coloca una olla más pequeña, que no toque los lados de la olla grande. En esa olla pequeña coloca tus moldecitos, a fin de que se cocinen un promedio de treinta y cinco minutos en baño maría.
Una vez transcurrido este tiempo, debes retirar de la olla y voltear sobre un plato precalentado, a fin de que conserven su forma. Esta receta se puede comer acompañada de algunas tajadas de pan blanco o galletas de soda, sobre cuyas superficies puedes untar tus moldecitos de hígado. Así mismo se recomienda comer usando un vaso de leche o una taza de té como sobre mesa. También puede servirte como opción de cena, cambiando el pan por un rico puré de papas y arvejas en mantequilla, obteniendo así un divertido y rico plato que consentirá y alimentará a tu familia, proporcionándoles una comida balanceada y de alto valor nutritivo.
Panecitos saludables
Otra de las opciones que puedes escoger para una rica merienda o tal vez una cena ligera y nutritiva son estos pancitos saludables. Para su preparación necesitarás los siguientes ingredientes: un cuarto (1/4) de libra de camarones pequeños congelados / una (1) lechuga tierna / dos (2) panecillos redondos / veinticinco (25) gramos de mantequilla / un cuarto (1/4) de pepino / dos (2) ramas de eneldo / dos (2) tomates medianos / media (1/2) cucharadita de pimienta blanca molida / un cuarto (1/4) de cucharadita de sal.
Para la preparación de este plato es bueno que comiences por descongelar los camarones. Igualmente en un bol profundo coloca un poco de agua, un chorrito de vinagre blanco, y luego de lavar muy bien la lechuga, sumérgela en esta agua con vinagre, a fin de matar cualquier bacteria que contenga en sus hojas. Una vez que tus camarones estén descongelados y limpios, coloca al fuego una sartén. Cuando esté bien caliente agrega mantequilla y dos cucharadas de ajo picado en trocitos muy pequeños, cuando el ajo comience a dorarse, agrega tus camarones y mézclalos con movimientos envolventes. Deja al fuego, removiendo de vez en cuando, hasta que los camarones se tornen de un color rosado, y al probarlos estén lo más tiernos posibles.
Cuando los camarones estén fríos, procederemos a montar el plato. Para esto corta horizontalmente los panecitos por el centro y úntalos con mantequilla, si lo prefieres puedes usar variedades de mantequilla con ajo o perejil, para darle más sabor a tu preparación. Transcurridos unos diez minutos, saca del agua con vinagre la lechuga, y escúrrela muy bien. Agrégala sobre tus pancitos. Sobre ella agrega las rodajas de pepino. Inmediatamente agrega los camarones, y adorna con las rodajas de tomate, espolvorea con sal y pimienta. Si lo prefieres también puedes rociar con jugo de limón los camarones antes de servirlos en tu pan. ¡Y ya tienes otro rico plato que puedes acompañar con té negro, caliente o frío!
Fuente de imagen: imujer.com