Perder uno que otro año en la época escolar, puede ser visto como algo dentro de lo normal. Pero pasar casi medio siglo intentando pasar las materias, es algo que resulta inaudito. Pues este es el caso de un hombre que ha reprobado 46 veces en la secundaria y a los 77 años de edad, por fin lo pudo lograr. Ésta es su historia:
Una lucha incansable
En el año 1968, Charan Yadav, natural de la India, quedó completamente estancado en cuarto grado de secundaria. Llegó el año 69 y sus resultados académicos tampoco alcanzaron para que fuese promovido al siguiente curso. El muchacho ponía lo mejor de sí mismo, pues no era por falta de interés o por flojera, sino porque no se le quedaba casi nada en su mente, de lo aprendido en clase. Seguramente, debido a un problema de atención y concentración patológico, que por las condiciones precarias de su nación, jamás se le detectó.
Fue entonces que siguió perdiendo los años, una y otra vez con sus exámenes de baja calificación. No obstante, sus padres lo seguían enviando a la escuela y nunca se rindió. Pero llegó incluso hasta la fecha de la muerte de sus padres, quienes envejecieron con la esperanza de ver algún día, a su hijo salir de la secundaria.
Fue hasta en marzo del año 2016, que en la oportunidad número 46, se le evaluó para determinar si ya era apto de recibir el título de bachiller. Muy temprano en la mañana del 4 de marzo, a sus 77 años de edad, se presentó nuevamente para el desafío de cada año. Pero esta vez había todo un equipo de periodistas que se vieron atraídos por esta rareza tan particular, lo cual parece que le dio el factor suerte que necesitaba o la presión mediática para que lo aprobaran por fin, al menos por humanidad.
El caso de Charan es un ejemplo de la rudeza de la educación en India, pues no lo dejaron graduarse como bachiller, a pesar del pasar de las décadas. En total fueron 46 veces que reprobó. Él mismo relató:
«Todos los años me pasa que apruebo algunas asignaturas y suspendo otras. Por ejemplo, si consigo puntuación suficiente en matemáticas o ciencias, fallo en hindi e inglés. En esta ocasión espero aprobarlas todas».
Las condiciones de vida de este anciano son bastante precarias. Sus padres le heredaron una pequeña casa en un pequeño poblado llamado Khohari, en la parte norte de Rajastán. Nunca se pudo casar y todo por un juramento que hizo desde joven: se propuso firmemente no contraer nupcias, hasta que pudiera vencer el reto de pasar el año escolar.
Un ejemplo de persistencia
Este hombre se volvió el hazmerreir de todos sus vecinos, pero él dice que nunca se dejó deprimir y por eso no renunció a su objetivo, a pesar del agobiante y frustrante paso del tiempo. Charan Yadav ha vivido todo el tiempo de limosna que recibe de un templo y de una pensión que el gobierno le otorgó unos años atrás. Su sueño siempre fue obtener su diploma y en seguida verse en un altar celebrando su matrimonio.
En el año 1995, casi se cumple su tan deseada ambición, pero por una sola asignatura, no se le permitió avanzar. En esta oportunidad fue matemáticas el punto de tropiezo. Pero en vista de que ya se convirtió en un suceso que llamó la atención del mundo entero, no tuvieron más remedio que aprobarlo en este último intento. El resto de años, el número de materias con calificaciones insuficientes, fueron más. El 10 de marzo de 2016, sus ojos se llenaron de lágrimas al ver en frente de las cámaras y de un gran número de espectadores, el diploma por el que luchó toda su vida.
Iba totalmente confiado ese día. Decía a todos que había recibido clases individuales de matemáticas y que ya no había forma de que lo reprobaran. Efectivamente, por fin pudo ponerse la toga y el birrete y cuenta que espera ahora sí, a la mujer de su vida. Por su parte, muchas personas han manifestado que no pueden comprender por qué los maestros y directivos de la institución académica no tuvieron compasión con una persona con un claro trastorno cognitivo.
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