El gusano tiroles
Entre las numerosas criaturas fantásticas que habitan en el folclore bávaro se encuentra el Tatzelwurm. Desde hace siglos, los habitantes de los Alpes Austriacos y Alemanes, cuentan viejas historias en las que éste enorme gusano con garras es el protagonista. Dragón, reptil o felino, esta criatura feérica o criptozoologica ya forma parte del imaginario popular de la zona y, para muchos, es tan real como las vacas que pastan en sus verdes valles.
Se dice que este “gusano con zarpas”, también llamado Stollenwurm, o gusano que habita en la madriguera, es una bestia reptil con forma de serpiente de hasta 1,5 metros de longitud, con dos patas delanteras claramente visibles. En resumen, una criatura misteriosa que guardaba un parecido más que pasajero con un lindorm.
Algunos informes describen su cabeza como la de un gato, y supuestamente es capaz de saltar distancias considerables. Un día del verano de 1921, en Hochfilzen, al sur de Austria, según se dice, un Talzelwurm con cabeza de felino, saltó sobre un pastor y un cazador furtivo; ambos hombres salieron huyendo aterrorizados.
Aunque se había informado sobre estos notables animales muchas veces anteriormente y desde entonces y, de acuerdo con las tradiciones locales, incluso habían sido asesinados en pocas ocasiones, los zoólogos todavía no habían obtenido un cuerpo para identificarlo.
Se habían visto criaturas similares más al sur también. Uno de los informes más famosos de nuestro tiempo data del 1954, cuando unos agricultores afirmaron haber observado cómo una bestia con forma de serpiente y cabeza de gato, con dos patas, atacaba a una piara de cerdos cerca de Palermo, en Sicilia.
Esos zoólogos dispuestos a creer en la existencia del Tatzelwurm han sugerido que podría haberse tratado de un gran eslizón desconocido.
Otros han propuesto que no es un reptil, sino una sirena, un anfibio parecido a una anguila sin patas traseras; sin embargo, se sabe que las sirenas de agua dulce existen sólo en Norteamérica (¿?¿?).
Existen varios tipos de dragones que podrían haberse inspirado en imágenes de animales vivos. Por tanto, quizá en lindorm también se basó en una criatura real que sigue escapando al descubrimiento científico formal. Por otro lado, la existencia de gusanos bípedos no es algo extraño en la naturaleza y es muy posible que exista o existiera un ser completamente real tras el Tatzelwurm.
Fuente:
Dragones, una historia ilustrada, de Karl Shuker
www.cryptomundo.com
CRIPTOMUNDO DE T.E.M