Vehículos de conducción automática
La tecnología ha transformado el mundo de manera impresionante las últimas décadas y, en particular, en los últimos años. La nueva ola de las redes ha convertido el mundo en un entorno verdaderamente interconectado y el acceso a nuevas aplicaciones y modos de pago ha revolucionado el entorno del mercado.
Sin embargo, muchos consideran que el “salto” todavía no se ha dado. Eventualmente, sin embargo, suponen que la tecnología saltará a ámbitos más humanos: un buen ejemplo son los drones que ya se están comenzando a usar para realizar entregas en varios lugares del mundo.
Y dentro de este aspecto juega un papel fundamental el carro de conducción automática. Desarrollado de manera independiente por un número considerable de empresas (dentro de las que destaca Google), este proyecto le apunta a un vehículo capaz de reconocer el peligro, evitar obstáculos y mantener a sus pasajeros y a los transeúntes seguros.
En un escenario idóneo los carros de conducción automática funcionarían en un entorno en el que todos los vehículos fueran de este tipo y entre ellos pudiesen comunicarse para evitar accidentes y buscar las rutas más eficientes. Sin embargo, es también necesario que los vehículos interactúen con transeúntes, ciclistas y seguramente con conductores de vehículos no automáticos.
Hacer esto requiere de una tecnología sumamente detallista, capaz de detectar a tiempo posibles peligros y de evitarlos en consecuencia. Pero la primera prueba parece haber sido superada de manera exitosa por Baidu, el gigante chino de la tecnología.
El auto de Baidu
Considerado por muchos como “el Google chino”, Baidu es una importante firma dedicada a la tecnología y el desarrollo de nuevas aplicaciones en la cotidianidad de las personas. Como su homólogo norteamericano, la empresa se ha tomado muy en serio el propósito de construir un vehículo de conducción automática y sacarlo al mercado.
El pasado 10 de diciembre Baidu parece haber logrado su primera victoria. Un BMW Series 3, programado para detectar obstáculos y equipado con una impresionante cantidad de mapas en 3 dimensiones fue capaz de realizar maniobras complejas que involucraban un giro en U, cambios de carril y atravesar de un lado a otro una avenida tras entrar desde otra vía. Al final retornó a salvo al lugar inicial.
Este experimento pone a Baidu en la delantera de la carrera del automóvil de conducción automática.
Un mundo sin conductores
Aunque hasta hace pocos años esto era poco más que ciencia ficción, lo cierto es que cada vez parecemos acercarnos más a un mundo en el que las tareas humanas sean realizadas por máquinas. Por ahora, los drones de transporte y los vehículos de conducción automática parecen llevar la delantera, aunque algunos sectores fabriles también han mostrado grandes avances.
No son solo las compañías tecnológicas. No podemos olvidar el caso de la “ciudad fantasma” en Estados Unidos diseñada específicamente para poner a prueba estas tecnologías. Así mismo, Samsung, el gigante coreano, anunció que creará una línea de productos específicos para vehículos de este tipo.
En general, parece ser que pronto llegará el día en el que los conductores sean una especie en peligro de extinción.
Fuente de imágenes: 1: telematicswire.net, 2: cloudwards.net