Albert Camus
Desde mediados del siglo pasado uno de los grandes debates de la intelectualidad y la academia ha versado sobre la definición exacta del término “artista”. Debate éste que siempre va acompañado de la eterna disertación filosófica sobre qué es el arte, y que en los últimos tiempos se ha acrecentado debido al intento del mundo del espectáculo de apoderarse de esta palabra para nombrar a sus celebridades.
En este sentido, queremos exponer cinco de las frases que sobre la condición del artista han enarbolado a lo largo de los últimos tiempos algunos de los más grandes intelectuales, en el intento de tratar de rescatar y definir este vocablo, que hace referencia al noble oficio de ejercer el arte. A continuación frases de artistas sobre “el artista”:
El artista debe estar siempre con aquellos que padecen la historia, no con los que la hacen. (Albert Camus)
En un discurso netamente político, este escritor francés marca en primera instancia una división entre quienes “hacen la historia” y entre quienes “padecen” la historia que estos primeros hacen, en la cual podemos entrever la conocida división de clases entre poderosos-opresores -quienes según la frase de Camus, llevan los hilos y marcan los caminos históricos por donde deben transitar todos- y los oprimidos, a quienes no les queda más que padecer las decisiones tomadas por los poderosos. Expuesto este panorama social, compuesto por la eterna dicotomía de opresores-oprimidos, en opinión de Albert Camus el artista tiene una responsabilidad social, la cual le obligaría a estar siempre del lado de los oprimidos, y no de los poderosos.
Wassily Kandinski
El artista es la mano que, mediante una y otra tecla, hace vibrar adecuadamente el alma humana. (Wassily Kandinski)
En esta frase, Kandiski hace referencia a aquello que los antiguos griegos llamaban La Belleza, pues de acuerdo a los helénicos era esta la responsable de hacer vibrar el alma, cuando el humano se encontraba frente a algo que le evocaba lo bello. Este reconocido pintor define entonces al “artista” como aquel agenciador o canal por medio del cual la belleza logra materializarse y tomar una forma en el mundo produciendo el estremecimiento del alma humana, la cual vibra ante el posible rapto de lo bello.
Un pintor es un hombre que pinta lo que vende. Un artista, en cambio, es un hombre que vende lo que pinta. (Pablo Picasso)
Por su parte, Pablo Picasso trae a escena una situación que se ha convertido en tema de discusión constante en los ámbitos artísticos, desde que el arte o las obras de arte comenzaron a ser un valor altamente comercializable. En este sentido para el artista español existe una gran diferencia entre aquel que direcciona su pintura a satisfacer los gustos del público, plasmando así lo que en el momento se encuentre “de moda”, en cuyo caso Picasso le concede el nombre de “pintor”, mientras que por otro lado señala que el verdadero “artista” no necesita seguir tendencias o responder a los gustos, pues su obra por sí sola comenzará a ser buscada por el público, porque por auténtica marcará dichas tendencias y gustos. Así vemos ya las diferencias de definiciones que comienzan a surgir entre el arte y el mundo del comercio de esta.
Oscar Wilde
Ningún gran artista ve las cosas como son en realidad. Si lo hiciera, dejaría de ser artista. (Oscar Wilde)
Así mismo tenemos al escritor Oscar Wilde quien es esta sentencia hace referencia a la mirada que debe tener un artista para serlo. En este sentido, Wilde habla de la condición “extrañada” con la que el artista debe ver el mundo para así poder plasmarlo, representarlo, emularlo o transformarlo en sus obras. De esta manera, el artista debe ser capaz de ver un objeto, situación o persona de forma diferente al resto de los humanos, es decir, debe ser capaz de imaginar otras posibles formas, imágenes o desenlaces sobre algo que para otros es simplemente lo que se ve a simple vista. De lo contrario no podrá crear otras realidades en base a esta.
Alejandro Dolina
La obra no puede ser mejor que el artista. (Alejandro Dolina)
Por su parte, este escritor argentino señala el compromiso ético y moral que debe haber en todo artista, pues no puede o no debería haber una disociación entre lo que transmite o predica la obra de arte y el comportamiento o verdadera naturaleza de quien la crea. Si bien esto no es así en todos los casos, y podemos encontrar por ejemplo grandes poetas románticos que en su vida real no viven o sienten lo que escriben -pues según algunos el arte también puede ser una forma de vivir lo que en realidad no tenemos- al parecer, Dolina se refiere a un estado ético ideal donde el artista se erige uno solo con su obra. Un mundo ideal donde el artista es integral y su comportamiento proporcional a los que crea.
Fuente de imagen: romoletto.alervista.org