Nunca sintió la necesidad del sexo

Natural de Escocia, Clara Meadmore superó un siglo y una década siendo totalmente virgen. Ella aseguró que nunca sitió la necesidad de contraer nupcias ni de llegar a algo más que una amistad platónica, con algunos hombres.

Nació en Glasgow y durante su vida, viajó y habitó en varios países como Nueva Zelanda y Canadá, donde luchó varios años contra el asecho de algunos varones que la pretendían, de distintas nacionalidades, condiciones y culturas. Pero Clara, a ninguno le dio más que una sonrisa o un buen momento de conversación.

Pero no se trata de un ideologismo puritano lo que la motivó, sino su ocupada y activa rutina diaria.  “Siempre he estado ocupada haciendo otras cosas. Cuando niña, sólo tenías sexo con tu marido y yo jamás me casé. Crecí en una época en la que a las niñas pequeñas no se les escuchaba ni se les veía, así que tuve que aprender y sostenerme por mi misma y mantenerme», relató Meadmore.

Cuando se dio cuenta ya estaba muy pasada de años

Prácticamente, los años se le pasaron en distintas actividades, sobre todo monetarias, que le ayudaron a distraer sus instintos sexuales y algunos médicos, han considerado que su longevidad se debe a su soltería, por un lado porque las relaciones de pareja suelen ser estresantes, y otra, por la conservación de sus energías sexuales.

Por lo general, a las mujeres jóvenes no les suele faltar pretendientes, pero ante la negativa y falta de interés de esta mujer, quienes lo intentaron se alejaban rápidamente, pues según ella misma narra: «a los hombres no les gusta eso en una mujer y con el paso del tiempo simplemente ya era muy vieja para casarme”, concluyó.

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