Diosa por una violación
Está es una leyenda triste, en donde queda más que marcado que el machismo y la falta de empatía han estado presentes desde las épocas más antiguas. He aquí la historia de Cardea, la ninfa de los bosques:
A diferencia de muchas otras historias mitológicas, donde la víctima es salvada por alguien y la convierten en una hermosa flor o planta (por ejemplo la historia de Dafne de la que hablamos en el artículo Apolo y las hojas de laurel). Cardea era una hermosa ninfa de la naturaleza que habitaba en los bosques sagrados de los romanos. Era muy parecida a la diosa romana Diana, pero con la diferencia que en vez de un arco y flechas, Cardea poseía una lanza y una red.
Como era de esperarse, su físico atrajo a más de uno, no obstante como a ella no le interesaba ninguno y éstos que eran tozudos no aceptaban un no por respuesta y la molestaban, la Ninfa tuvo que idear un método para despistarlos: cuando la asediaban, esgrimía la falta de intimidad del bosque y los encaminaba hacia una cueva. Los hacía pasar primero y en cuanto podía salía corriendo, escondiéndose en la espesura.
Todo marchó bien hasta que se encontró con Jano, el dios de las puertas, de los principios y finales, de las entradas y las salidas (de quien por cierto deriva el nombre del mes de Enero) y a quien se representa con dos caras. Este dios conocía el futuro y el pasado y ya sabedor de donde se encontraba la Ninfa, la buscó y la violó.
Jano, en su descaro y crueldad, le ‘’agradeció’’ a la ninfa de que le hubiera ‘’dado’’ su virginidad y la elevó al cargo de diosa como retribución. Cardea se convirtió en la diosa de las bisagras, pomos y umbrales, una compañera eterna de su violador.
Ovidio, un poeta romano, decía sobre el poder de Cardea: “su poder es abrir lo que está cerrado y cerrar lo que está abierto”, una formula religiosa.
Su culto
La veneración a la nueva diosa fue muy importante: en tiempos romanos era adorada en la festividad de Beltane (31 de octubre en el sur y 1 de mayo en el norte) y el 1 de junio. Los romanos colgaban espinos blancos entre las bisagras para evitar la entrada de los espíritus malignos y proteger a los bebes y niños de que fueran víctimas de una mala entidad.
Fuentes:
- https://es.wikipedia.org/wiki/Cardea
Imagen: wikipedia.org