Araña Camello

Es una tarántula enorme, que puede correr a una gran velocidad. Se cuentan relatos terroríficos con estas arañas, que suelen habitar los territorios de Asia, como que son capaces de comerse un hombre completo. Sin embargo, los estudios que se les han practicado, demuestran lo contrario: afirman que esta especie arácnida es muy amable con el ser humano y le es muy útil a la hora de mitigar plagas e insectos molestos.

Buitre

Tiene un aspecto un tanto desagradable y tétrico. Además de que se le teme por su modo de cazar y comer sus presas, mismas que ya de por sí son carroña, pero las toma con sus filudas garras y las despedaza como si estuviesen vivas. Sus medidas son de grandes proporciones y aunque alguien se llegue a encontrar frente a frente con un buitre, no debe temer, pues no atacan a los humanos.

Milpiés gigante africano

Su apariencia de verdad espanta y produce muchos nervios. Es quizá el milpiés más grande de todos, o uno de los más gigantes. Lo increíble de todo, es que hay familias orientales que lo prefieren como su mascota, sin importarles que llegue a medir más de 11 centímetros y tenga un número de patas que supera las 250. Su expectativa de vida es de una década.

Murciélago vampiro

Los famosos vampiros chupasangre, protagonistas de películas de terror y cuentos de ese tipo. Se sabe que viven en la oscuridad y se mueven en las noches; se agrupan en las cuevas y cavernas tenebrosas y sólo salen a morder a sus víctimas. Pero aunque todo esto es cierto, los seres humanos no están dentro de su dieta, sino sólo algunos animales como vacas, corderos, cabros y otras aves.

Serpiente lechera

Este reptil, aunque de colores que alertan de una criatura venenosa, no hace ningún mal a los humanos. Lo que sucede es que tiene rasgos muy similares a la serpiente coralillo, que sí es letal para cualquier mamífero. La diferencia radica en que la peligrosa coralillo presenta rayas amarillas con rojas. Mientras que la serpiente lechera, tiene rayas negras con rojas.

Tarántula Goliat

Es una araña que con sólo verla, la piel se pone de gallina. Pertenece al conjunto de arácnidos más grandes del planeta. Suele vivir en las selvas latinoamericanas. Sus presas caen infaliblemente, pero dentro de estas no figuran los humanos, por lo que de encontrar alguna, no hay mucho qué temer. Ellas disfrutan de insectos y aves, a los cuales cazan con sus filudos colmillos venenosos. Hay personas que las eligen como mascotas de compañía.

Aye Aye

Es una clase de mono de las tierras de Madagascar. Presenta un aspecto aterrador, con una mirada maligna, dedos extraños y largos y muchos pueblos los consideran como símbolos de malos presagos. Debido a esa superchería, son asesinados todos los días, porque de ese modo, sus cazadores creen que se libran de la mala fortuna. La verdad es que son totalmente inofensivos para las personas.

Gavial de Ganges

Por su feroz dentadura, todos aquellos que lo ven, se asustan porque creen que serán comidos. Pero realmente, su mandíbula es muy débil y no se presta para comer humanos. Por ese motivo, se conforma con cazar pequeños pececillos, insectos y anfibios. Tan pronto como ven humanos tienden a salir huyendo. Si no se les molesta, ellos no atacan.

Tiburón peregrino

Cualquiera que se halle al frente de uno de estos tiburones en el agua, puede creer que su vida ahí terminó y de seguro se pondrá a rezar las últimas oraciones. Sin embargo, se sorprenderá al ver que el tiburón le pasará por el lado, sin hacerle el más mínimo daño, pues el tiburón peregrino es inofensivo, porque disfruta mas de un buen platillo de zooplancton y plantas marinas. De hecho, se muestran amigables con los buzos que se les acercan.

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