El Pensante

Los unicornios y el mar

Imagen 1. Los unicornios y el mar

Los narvales son una suerte de cetáceos que habitan principalmente las aguas del ártico y que llaman la atención por el enorme que sobresale de su cara y que puede llegar a medir hasta dos metros. Pero ¿cuál es el origen de tan misteriosos y llamativos animales? Algunos relatos presumen de tener la respuesta.

La petición de los unicornios a los dioses

Cuentan antiguas leyendas que los unicornios, viéndose terriblemente perseguidos por los humanos y viendo su existencia en peligro, rogaron a los Dioses que les concedieran una nueva morada donde poder vivir en paz, alejados de esos seres  que acababan con ellos en pretensión de adquirir sus mágicos poderes.

Los Dioses, apiadándose de ellos, les concedieron sus deseos y les ofrecieron los océanos como morada. Profundidades donde los humanos serían incapaces de encontrarlos. Transformaron sus cuerpos para adaptarlos a las aguas, les ofrecieron la majestuosidad de las ballenas y la inteligencia de los delfines y conservaron sus cuernos, donde residía todo el poder y la magia de estos seres mitológicos.

Hoy en día los unicornios se conocen como Narvales, los científicos no saben muy bien como clasificarlos. Al contrario que el resto de los Cetáceos, los Narvales rehuyen del contacto humano y es muy poco lo que se ha podido estudiar de ellos. Increíblemente, son los únicos habitantes marinos con cornamenta.