“Islas de patogénesis”
En muchas especies de bacterias dañinas para los seres humanos existen fragmentos de ADN particularmente nocivos que saltan de bacteria bacteria e incrementan la producción de toxinas o la virulencia de los microorganismos. Esos fragmentos son conocidos en el mundo científico como “islas de patogénesis” y son una de las principales causas por las que resulta tan difícil combatir algunas infecciones bacterianas y por las que una infección puede empeorar de manera tan rápida.
En esencia, estas islas de patogénesis se caracterizan por su rápido y eficaz transporte entre una bacteria y otro. Es decir, al contrario que otros fragmentos de ADN, tienden a intercambiarse de manera mucho más recurrente. Por esta razón, basta con que una bacteria tenga una de estas islas para que toda una comunidad bacteriana se vuelva peligrosa o para que una persona enferma enfrente, de repente, una septicemia u otros problemas semejantes.
Pero por su misma tendencia a pasar de bacteria en bacteria, estas islas de patogénesis, de ser modificadas, podrían representar un mecanismo para el combate de ciertas enfermedades bacterianas.
CRISPR
CRISPR es un mecanismo de modificación genética desarrollado en los últimos años con un nivel altísimo de precisión y eficacia (esencialmente permite «cortar» y «pegar» trozos de ADN donde se desee). Debido a su eficacia,varios equipos científicos se encuentran investigando cómo usarlo para modificar estas islas de patogénesis para convertirlas en bombas de tiempo que desactiven o maten las bacterias patógenas.
Se han realizado avances importantes. Por ejemplo, en una de las versiones el gen modificado genera la muerte inmediata de la bacteria al ingresar en su organismo; en otra el gen se adhiere a la parte del genoma que regula la reproducción de la bacteria, haciéndola mucho menos virulenta.
Pero además de modificar genéticamente la bacteria estos mecanismos se pusieron a prueba en ratones de laboratorio, que fueron infectados con dosis letales de agentes bacterianos y luego inyectados con estos genes modificados. El resultado fue que los ratones lograron sobrevivir la infección aun cuando en condiciones ordinarias los habría matado en cuestión de horas.
Este mecanismo podría usarse como alternativa a los antibióticos, que cada vez se encuentran con cepas más resistentes, y presenta muchas similitudes con el tratamiento mediante bacteriófagos del que hablamos en el artículo Las armas contra las superbacterias que desarrolló la URSS. Es posible que estos tres mecanismos combinados logren superar el actual problema que presenta para nuestra sociedad la aparición de super bacterias.
Fuentes:
- https://www.sciencenews.org/article/smuggling-crispr-gene-editor-staph-bacteria-can-kill-pathogen
Imagen: sciencenews.org