¿Algún día haz sospechado que tu aparato telefónico o computadora te rastrea las conversaciones? ¿Has recibido ofertas de vuelos a Nueva York, después de haber dialogado al respecto con uno de tus amigos? En esta oportunidad, ante la voz de los expertos, veremos si es verdad que nos espían a través del micrófono y cámaras de dispositivos informáticos, o es tan sólo una leyenda urbana. Veamos:
Cada año, aumenta de modo exorbitante la producción e implementación de micrófonos, tanto en celulares, tabletas, computadoras y demás dispositivos, junto con altavoces inteligentes. Desde que salieron las aplicaciones de Siri o de Alexa, mismas que pertenecen a Apple y a Amazon, se puede deducir que fácilmente podemos ser escuchados y perder por completo la privacidad.
Una de las más notables especialistas tecnológicas en el mundo, es la periodista Zoe Kleinman, quien relata que vivió una circunstancia muy especial que le permitió corroborar que efectivamente, nos escuchan las conversaciones y que además de ello, no es para nada complejo de llevar a cabo. Zoe cuenta que todo comenzó así:
“Hace unos años estaba hablando con mi madre en su cocina y me contó que un amigo de la familia había muerto en un accidente de tráfico en el extranjero. Recuerdo que mi teléfono estaba a mi lado. Fue un accidente dramático, así que busqué si algún medio de comunicación había escrito algo de eso. Empecé a escribir en el buscador el apellido de la familia, mientras veía que el texto predictivo me sugería correctamente el nombre.”
La pregunta del millón era: ¿será coincidencia que el buscador de manera espontánea le arrojara esa información, a pesar de que ningún medio de comunicación había escrito algo al respecto?
Gracias a lo ocurrido, la inquietud se incrustó en la mente de Kleinman y no la dejó descansar tranquila, hasta que llegó al meollo del asunto. Comenzó por asesorarse de un especialista en programación, así que le pidió que creara una aplicación que permitiera conectar el micrófono de su teléfono móvil, con una computadora portátil. Sólo le costó un par de días al desarrollador, terminar dicha app.
Aparte de cerciorarse de que resulta muy sencillo rastrear el micrófono de un smarthphone, descubrió que existen programas que se pueden conseguir muy fácilmente, mismos que convierten en texto, cualquier archivo de audio del celular.
Una gran conclusión a la que también llegó, es que si ella y su amigo ingeniero de sistemas lograron que una laptop convirtiera en letras todas las voces que captara el micrófono del teléfono móvil de Kleinman, cosas aún mucho más increíbles pueden hacer las grandes multinacionales tecnológicas.
La versión de Edward Snowden
El famoso hacker Edward Snowden, que trabajó para agencias de inteligencia estadounidense, pero que luego por revelar tamañas informaciones clasificadas y secretas se convirtió en un enemigo público internacional, afirma que:
“que existen agentes intentando activar el control por voz. Nos hemos rodeado de estos dispositivos y nos están escuchando a la espera de palabras de control que los activen”.
Un programa espía por tan sólo 5 dólares
El famoso director de cine, Anthony van der Meer, también puso en evidencia que resulta muy sencillo hackear el micrófono de un smarthphone. Para ello, realizó un experimento que consistió en dejarse robar el celular intencionalmente, para de ese modo verificar si era posible espiar al ladrón y escuchar todo lo que éste dijera.
Todo lo efectuó gracias a una simple app, que facilita ejecutar las tareas normales del smarthphone, sólo que a distancia. Según él, tan sólo le costó 5 dólares y ésta podía incluso funcionar si llegaran a reiniciar el teléfono. Es factible divisar todos los mensajes, contactos, ver los videos, audios, fotos, etc. Acceso remoto total. Por eso, ahora con plena seguridad asevera lo siguiente:
“Me di cuenta de todo lo que compartimos con nuestros teléfonos y de que es el dispositivo perfecto para espiar porque la gente lo lleva todo el tiempo consigo. Tiene micrófono, cámara e incluso GPS que te permite saber dónde está la gente. No nos damos cuenta del daño que puede hacer”. Por ejemplo, el cineasta pudo saber con precisión los sitios que frecuentó el ladrón, uno a uno, gracias a los registros del GPS.
Algo que subraya bastante el director Van der Meer, es que los micrófonos que traen la mayoría de smarthphones son tan potentes, que él usando esa aplicación podía escucharle de manera nítida todas las conversaciones que el ladrón tuviera con otras personas físicamente, aunque lo llevara en el bolsillo. Por si fuera poco, la app tiene la herramienta de streaming, o sea que se puede grabar en vivo y en directo, todo lo que el portador del aparato esté haciendo en ese instante.
De acuerdo con la periodista Zoe Kleinman, “Otra cosa que hay que tener en cuenta es que hay aplicaciones que activan el micrófono y esto nos consume datos y batería”. Igualmente, señala que algunas empresas desde hace varios años, contratan personal que emplean con el fin de escuchar todas las conversaciones que los usuarios mantienen con su asistente virtual.
En el año 2018, el New York Times publicó que 75 compañías reconocidas obtienen datos acerca de la localización de las personas que acostumbran a revisar el estado del clima o las noticias más recientes en las distintas aplicaciones. Según el informe presentado, esas bases de datos son tan enormes que recaban la información de más de 200 millones de dispositivos informáticos, en sólo USA.
También es sabido, que el modo más utilizado por las corporaciones para rastrear los datos de la gente, es por medio de las cookies web. Existen compañías especializadas en construir el retrato de cada consumidor, incluyendo aspectos como género, edad, gustos, clase de dieta, profesión y hasta cuánto gana, entre otras muchas informaciones.
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